¡°En el balonmano pens¨¢bamos que ¨¦ramos la bomba y no invertimos¡±

Seis Copas de Europa, ocho Ligas, dos bronces ol¨ªmpicos, tres platas en Europeos y ser el primer jugador en levantar para Espa?a una Copa del Mundo, en T¨²nez, en 2005, bien sirven para decir que Mateo Garralda (Burlada, Navarra, 1969) lo fue todo como jugador de balonmano. Ahora disfruta como entrenador del Guadalajara, un equipo peque?o en esta ya de por s¨ª modesta Asobal. A punto de volver a los entrenamientos, se presta a charlar sobre su deporte y lo que acontecer¨¢ a partir del domingo en Dinamarca. Donde tambi¨¦n gan¨® una Liga.

Pregunta. ?Qu¨¦ posibilidades tiene Espa?a en este Europeo?

Respuesta. Bastantes. No hay grandes diferencias entre selecciones. Es cierto que las lesiones de Julen [Aginagalde, duda para la primera fase] y de Arpad [Sterbik] son duras; la falta de veteran¨ªa sin Alberto Entrerr¨ªos se puede notar, pero somos campeones del mundo.

P. ?Qu¨¦ va a aportar la llegada de Manolo Cadenas al banquillo?

R. Este equipo ya tiene una identidad muy marcada, que se la han ido generando los ¨²ltimos seleccionadores. Ese car¨¢cter ganador se ha forjado durante muchos a?os. La gente que ha ido llegando se ha impregnado de ¨¦l. Manolo no va a permitir que se pierda esa ambici¨®n. Es de esos entrenadores con los que no te aburres ni en los entrenamientos.

La realidad nos pega bofetones no cada a?o, cada mes; hay que remangarse y trabajar¡±

P. ?Usted de qu¨¦ entrenador aprendi¨® m¨¢s?

R. Por suerte he tenido muy buenos entrenadores y, por decirlo de otra manera, a no tan buenos. Siempre preguntaba por qu¨¦ hac¨ªamos las cosas y por qu¨¦ no otras. Algunos te daban sus razones y otros incluso dec¨ªan: ¡°Lo pensar¨¦¡±. Eso ya era positivo. He tenido la suerte de estar con Pastor, Cadenas, con Valero¡­ He tratado de coger de todos lo que m¨¢s me gustaba. Tengo claro que ning¨²n entrenador puede cumplir en todas las facetas al 100%. Todos tienen carencias. Y yo m¨¢s que ellos, seguro.

P. ?Le cost¨® cambiar el chip de jugador a entrenador tan r¨¢pido?

R. Fue poco a poco. Ya en mis ¨²ltimos a?os en el Portland San Antonio, alg¨²n jugador, viendo c¨®mo actuaba, me dijo que por qu¨¦ no me animaba a ser entrenador. Se me qued¨® en la cabeza¡­ En Le¨®n pas¨® lo mismo. Una vez estaba en el banquillo dando alguna directriz y precisamente Manolo Cadenas me grit¨®: ¡°Oye, si quieres ser entrenador te sacas el t¨ªtulo. Mientras seas jugador, te callas la boca¡±. Como diciendo: ¡°Aqu¨ª el que manda soy yo¡±. Despu¨¦s surgi¨® la oportunidad de ir a Dinamarca y ellos mismos me plantearon la posibilidad de ser entrenador all¨ª. Al final me apunt¨¦ al curso y los veranos, a estudiar.

P. ?Sigue teniendo el mismo temperamento que de jugador?

R. El car¨¢cter fuerte lo tengo. Lo intento sacar lo menos posible para intentar transmitir lo que creo y que los jugadores sean receptivos. Pero la manera de expresarme no va a variar. El car¨¢cter me ha llevado donde estoy, me ha levantado de lesiones despu¨¦s de que los m¨¦dicos, grandes m¨¦dicos, me tiraban a la calle, por as¨ª decirlo. Me dec¨ªan: ¡°T¨² de esta no sales¡±. Joder que si salgo¡­ Mi car¨¢cter es el que me ha ayudado a lograr ¨¦xitos. Tambi¨¦n a fallar. Como entrenador luego entiendes que debes amoldarte a lo que hay. La mentalidad de los jugadores es diferente a la de hace 15 o 20 a?os, a la tuya. Pero no s¨¦... la gente puede decir que la manera de luchar es otra. No lo acepto. Que hay una vida de mayor confort, entre comillas con la que est¨¢ cayendo, es indudable, pero el car¨¢cter de lucha est¨¢ en el ser humano.

P. El balonmano no supo aprovechar el oro de T¨²nez 2005. ?Qu¨¦ ha cambiado despu¨¦s del de Barcelona, hace un a?o?

R. Nada. Pero es muy dif¨ªcil. Este segundo Mundial pilla a Espa?a en una situaci¨®n en la que las empresas se ven atadas de pies y manos para invertir. No es tiempo, o no parece serlo, para apostar por el deporte o por un deporte ganador como el balonmano. Adem¨¢s, esta federaci¨®n lleva muy poquito ejerciendo.

Espa?a tiene marcado su car¨¢cter ganador, los que llegan se impregnan de ¨¦l¡±

P. ?La anterior no hizo bien su trabajo?

R. Ni la anterior, ni la anterior ni la anterior. Las fichas federativas han bajado de forma escandalosa en los ¨²ltimos 15 o 20 a?os. No se ha buscado la manera de generar ilusi¨®n, de empujar a los chavales, de crear balonmano en las escuelas. Que cada palo aguante su vela.

P. ?Por qu¨¦ no termina de despegar este deporte?

R. Porque la gesti¨®n no est¨¢ bien hecha. El baloncesto, por ejemplo, en muchos aspectos nos da sopas con honda. Cuando invert¨ªan en medios de comunicaci¨®n, en el balonmano pens¨¢bamos que ¨¦ramos la bomba y no invert¨ªamos un duro. ¡°No, ya vendr¨¢n a nosotros¡±, pens¨¢bamos. Deber¨ªamos adaptar sistemas que est¨¦n funcionando. Hay que darle una vida nueva al balonmano; demos un paso para atr¨¢s para impulsarnos si es necesario. Hay algo que es innegable, el balonmano a nivel de clubes a d¨ªa de hoy es un deporte moribundo.

P. ?Hay suficiente autocr¨ªtica o solo una queja permanente?

R. No s¨¦ si hay suficiente autocr¨ªtica. Existe, pero no nos remangamos y ponemos a trabajar lo suficiente. La realidad nos est¨¢ pegando bofetones no cada a?o, cada mes. El problema no es quejarse, es ver qu¨¦ est¨¢s haciendo t¨² para que esto vaya a mejor. En Guadalajara los jugadores del primer equipo tienen que entrenar a la cantera, se ha creado un peque?o torneo de verano para todas las categor¨ªas¡­ Lo haremos mal, regular, pero estamos haciendo cosas para generar balonmano.