Ndour, a por su primera Copa

Casi no cabe en el banco. Astou Ndour (Senegal, 1994), jugadora de baloncesto del Gran Canaria 2014, est¨¢ sentada en un asiento del vestuario en el que es dif¨ªcil plegar su 1,95 de estatura. En un ritual que se sabe de memoria, alcanzando con esfuerzo sus pies, se sube los calcetines, se ajusta el el¨¢stico y fija sus zapatillas de colores. Dentro de pocos minutos saldr¨¢ al parqu¨¦ de la cancha a entrenarse, donde este s¨¢bado se disputar¨¢ un puesto en la final de la Copa de la Reina ante el Perfumer¨ªas Avenida (12.05, Teledeporte; a las 17.00, FEBtv, la otra semifinal, Rivas Ec¨®polis-Beroil Ciudad de Burgos). Pero Ndour, de 19 a?os, no est¨¢ nerviosa. Hace cuatro a?os estaba jugando con sus amigas en Senegal, en canchas mucho menos acondicionadas. Espigada y t¨ªmida, alza la vista y comienza a hablar.

"Es mi primera Copa y supuestamente tendr¨ªa que estar inquieta, pero no lo estoy", dice, "solo un poquito antes del partido". A Ndour, designada mejor jugadora de 2013 y campeona del Europeo sub-20 en Turqu¨ªa, el baloncesto le viene de familia. Sus padres jugaban ("pero no eran tan buenos como yo", r¨ªe) y ella pronto quiso botar el bal¨®n. "Empec¨¦ por ellos. No viven aqu¨ª, pero les echo de menos", explica. La p¨ªvot lleg¨® a Espa?a en 2009. Su fluidez y envergadura no pasaron desapercibidas para el Gran Canaria, que se la trajo a las categor¨ªas inferiores de su equipo. "Yo jugaba con varias chicas altas en Senegal. Se fijaron en m¨ª y entonces vine. La adaptaci¨®n cuesta. No conoc¨ªa a nadie, la lengua era diferente...", enumera. "Eso s¨ª, con las compa?eras genial. Adem¨¢s, hay tres senegalesas en el equipo. Y tambi¨¦n estoy yo", cuenta.

Plata en el Mundial sub-19 de Chile y bronce en el Europeo sub-18 de Ruman¨ªa, le colgaron la etiqueta de promesa a seguir. Y por a?adidura, la de l¨ªder

En 2011 se nacionaliz¨® espa?ola y no tard¨® en enfundarse la camiseta de la selecci¨®n. Plata en el Mundial sub-19 de Chile y bronce en el Europeo sub-18 de Ruman¨ªa, le colgaron la etiqueta de promesa a seguir. Y por a?adidura, la de l¨ªder. Ndour le resta importancia: "No te voy a decir que lo soy, estoy trabajando y me faltan muchas cosas. Dependo de mis compa?eras y de la gente que me gu¨ªa". El futuro, pese al actual ¨¦xodo de grandes talentos a otros pa¨ªses de Europa, no se lo plantea. "Estoy muy contenta aqu¨ª. He tenido un par de ofertas, pero por ahora me quedo".

El domingo Ndour podr¨ªa estar alzando la Copa de la Reina, como ya logr¨® su equipo en 2000, cuando ten¨ªa ella seis a?os. Por si acaso, no pierde la calma y estudia inform¨¢tica. "Ahora estoy bien, vivo del baloncesto. Pero nunca se sabe. Trabajo todos los d¨ªas, como siempre, y lo que llegue llegar¨¢". Se decanta por un cl¨¢sico si se le pregunta por su ¨ªdolo de la canasta. "Pau Gasol. Me gusta dentro y fuera de la cancha, adem¨¢s juega en mi misma posici¨®n", afirma. Le suena el m¨®vil, tres pitidos que anuncian un mensaje. Puede que sea su t¨¦cnico, dici¨¦ndole que salga ya a calentar. O quiz¨¢ es solo una amiga que le desea suerte. Se levanta con prisas y extiende sus brazos como har¨ªa un sauce con sus ramas. Al irse, bromea cuando le hacen elegir otro referente: "Me quedo conmigo misma".