Gracias, Tito

Como jugador, me cuentan los que lo conoc¨ªan bien y lo vieron jugar (sobre todo, mi padre), que ten¨ªa calidad para haber triunfado en el primer equipo del Bar?a.

Yo lo tuve como entrenador, primero en el Cadete B, y despu¨¦s como ayudante de Pep en el Bar?a B y en el primer equipo. En pocas palabras ¡ªcomo buen ampurdan¨¦s¡ª te transmit¨ªa lo que quer¨ªa y esperaba de ti, siempre con un tono correcto y las palabras precisas. Probablemente, es el entrenador que m¨¢s marc¨® positivamente mis a?os de formaci¨®n; mi madre guarda con locura los trofeos de ¡°mejor jugador del torneo¡± (Citt¨¢ de Rieti, Memorial Gaetano Scirea, Trofeo Casablanca¡­), todos con ¨¦l como entrenador, que yo recib¨ªa sorprendido con una sonrisa de complicidad y una felicitaci¨®n contenida por parte de Tito.

Como ayudante de Pep, se convirti¨® en la materia gris del mejor equipo de f¨²tbol de la historia. Viviendo durante cinco a?os a la sombra de un genio, cuando le toc¨® ser el l¨ªder del proyecto, lo asumi¨® y lo hizo con la misma naturalidad con la que entrenaba a aquel Cadete B, 10 a?os atr¨¢s.

Pep, Dome, Aureli, Jordi, Carles¡­ seguro que todos han aprendido muchas cosas a su lado durante estos a?os. Su saber estar, su valent¨ªa, su humildad, su pasi¨®n, su coraje, pero sobre todo la naturalidad que tanto escasea en el f¨²tbol y en el mundo en general. De la misma forma que encar¨® su enfermedad.

En mi casa dicen que siempre estar¨¢n en deuda con los ¡°educadores¡± como Tito, que sin ellos no ser¨ªa quien soy. Y yo lo confirmo.

Hasta ahora los ampurdaneses ten¨ªamos un pintor (Dal¨ª) y un escritor (Pla) universales, ahora tambi¨¦n un entrenador. Muchas gracias, M¨ªster. Agradecido eternamente.

Marc Crosas exjugador del Bar?a de 2001, cuando entr¨® en La Masia, a 2007; ahora est¨¢ en el Santos Laguna, mexicano.