El acorazado minimalista

Azotada por la salvaje crisis econ¨®mica del pa¨ªs, la Liga griega ha perdido a sus principales figuras. Equipos como el Olympiacos, el Panathinaikos o el AEK ya no son la base de su selecci¨®n. El futbolista heleno, como tantos otros, ha tenido que hacer las maletas y emigrar a otros campeonatos. Grecia, sin embargo, casi no ha evolucionado. Aunque apenas queda rastro de aquel equipo que se coron¨® en la Eurocopa 2004, el combinado griego mantiene la misma esencia primitiva. El bloque, el rigor defensivo y el minimalismo contin¨²an siendo sus se?as de identidad. Las que le aport¨® durante los nueve a?os que ocup¨® su banquillo el t¨¦cnico Otto Reghhagel.

Su heredero, el portugu¨¦s Fernando Santos, opt¨® por una din¨¢mica continuista que le permitir¨¢ a Grecia disputar su tercer Mundial. Antes particip¨® en las citas de 1994 y 2010 sin ning¨²n ¨¦xito. En la primera perdi¨® los tres partidos de la fase de grupos y en Sud¨¢frica cosech¨® un triunfo y dos derrotas. Alcanzar los octavos es, por tanto, el gran objetivo. Guerrillera, la selecci¨®n helena rubric¨® un fase clasificatoria de m¨¦rito. El balance fue de ocho victorias -cinco de ellas por 1-0-, un empate y una sola derrota. Sus 25 puntos le habr¨ªan bastado para liderar cinco de los ocho grupos de la zona europea. Sin embargo, Bosnia logr¨® la primera plaza por su mejor registro realizador y tuvo que resolver el pase a Brasil en la repesca ante Ruman¨ªa.

El ej¨¦rcito griego, encuadrada en un grupo exigente con Colombia, Costa de Marfil y Jap¨®n, sigue siendo rudimentario. M¨¢s all¨¢ de su r¨ªgido entramado defensivo, piedra de toque, se articula en torno a tres piezas. Karagounis (37 a?os, 132 internacionalidades) es el jefe; junto a Katsouranis, el ¨²nico superviviente de 2004. Y en al ataque, dos islotes: Samaras, el gigant¨®n que golea desde hace a?os para el Celtic, con poder¨ªo a¨¦reo y un nada desde?able juego de pies, y el punzante Mitroglou. Fichado por el Fulham (15 millones de euros) en el ¨²ltimo mercado invernal, fue decisivo en la clasificaci¨®n (cinco goles) y la repesca (tres). La acorazada Grecia se agarra a ellos.