Xavi: problema o soluci¨®n del Bar?a
El volante, relegado a la suplencia en el partido de Liga decisivo, marca el estilo azulgrana
Acabado el partido del s¨¢bado en Camp Nou, un resumen de la temporada para Atl¨¦tico, nuevo titular de la Liga, y para el Bar?a, campe¨®n saliente, el presidente azulgrana, Josep Mar¨ªa Bartomeu, anunci¨® que habr¨ªa ¡°cambios profundos¡± en el club -¡ªafectar¨¢n a directivos, ejecutivos y al f¨²tbol base¡ª y en el equipo, novedades facilitadas en parte por la salida del entrenador, Gerardo Martino, del capit¨¢n Puyol y del portero Vald¨¦s. El cambio se visualizar¨¢ pronto ¡ªhoy Zubizarreta informar¨¢ a la directiva¡ª con el anuncio de la contrataci¨®n de Luis Enrique y la continuidad se expresar¨¢ con la renovaci¨®n de Piqu¨¦. Queda por definir el d¨ªa de la firma de la mejora de contrato de Messi.
No hay dudas sobre Luis Enrique. Necesita la plantilla un t¨¦cnico que recupere la cultura del esfuerzo y entienda el juego y requiere la instituci¨®n de una figura que conozca la casa, aglutine al barcelonismo y asuma el liderazgo del Bar?a, ahora mismo un equipo desnaturalizado. El desorden y la falta de un trabajo t¨¢ctico abonaron la confusi¨®n con Martino: buscando un plan B se olvid¨® del A. Nada m¨¢s revelador para expresar el fin de una etapa que el aplauso de la hinchada hacia el Atl¨¦tico cuando en temporadas anteriores desped¨ªa con aplausos a su Bar?a despu¨¦s de perder con el Inter o el Chelsea.
Aunque ten¨ªa la buena intenci¨®n de rendir tributo a Tito Vilanova, el lema seny, pit i collons no funciona en el Bar?a, cuyo juego ha acabado en los reiterativos centros inocuos de Alves. El resultadismo ha dejado de ser una coartada para no afrontar una renovaci¨®n aplazada desde la salida de Guardiola. El Bar?a precisa fichar y traspasar despu¨¦s de un tiempo en que los movimientos han sido relativos. Hay que activar la lista de incorporaciones, que, desde la temporada 2010-2011, la de la llegada a la direcci¨®n deportiva de Andoni Zubizarreta y a la presidencia de Sandro Rosell, ha estado capitalizada por Villa, Mascherano, Adriano, Afellay, Alexis, Song, Alba y Neymar.
Las dudas sobre su alineaci¨®n explican la confusi¨®n en el equipo sobre el juego
El club da por descontada la contrataci¨®n de uno o dos porteros ¡ªya es seguro Ter Stiegen¡ª; un central, un central-lateral, un medio, y un delantero goleador, puestos a concretar por Luis Enrique. El asturiano llegar¨¢ del Celta con Rafinha y se supone que podr¨ªa rejuvenecer al equipo con futbolistas del filial, que viene completando una excelente actuaci¨®n en Segunda Divisi¨®n, y puede que incluso con el croata Halilovic. Hay un inter¨¦s especial por conocer tambi¨¦n las bajas despu¨¦s que el mercado especule con los nombres de Tello, Afellay, Cuenca, Alexis, Pedro, Alves, Mascherano, Cesc, Song o Adriano.
Aunque el ¨¢lbum de cromos ayuda a recuperar la ilusi¨®n de los aficionados, no hay en cualquier caso ning¨²n asunto m¨¢s capital en el Camp Nou que redefinir el papel de Messi y Xavi: el delantero marca diferencias y el volante define el estilo. El 10 ha sido el mejor futbolista cuando ha tenido al mejor equipo. A la que se ha ca¨ªdo el juego colectivo azulgrana, Messi ha evocado al futbolista extraviado de la inclasificable selecci¨®n de Argentina. Ah¨ª estar¨ªa su diferencia con Maradona. Hoy no se sabe el rol que le adjudicar¨¢ Luis Enrique. Queda constancia de todas formas que cuando Messi se alej¨® de la porter¨ªa, el Bar?a se ha alejado de la victoria, incluso con delanteros de la talla de Pedro, Alexis y Neymar.
El reinado de los azulgrana se edific¨® con el 10 como como punto final y Xavi como origen del juego. Volcado como volante, en cuanto se dej¨® de compararle con Guardiola, Xavi triunf¨® en la selecci¨®n y en el Bar?a. La conclusi¨®n era sencilla: para que el equipo jugara bien y Messi resolviera precisaba del mejor Xavi.
Las salidas de Puyol y Vald¨¦s afectan al jugador, defendido desde la entidad
Hay, sin embargo, mucha indefinici¨®n sobre la forma del volante, de 34 a?os. La directiva quer¨ªa renovarle a la baja y finalmente el entonces presidente Rosell le extendi¨® de forma sorprendente un gran contrato hasta 2016. Martino ha contribuido al desconcierto porque ha jugado con Xavi, relegado a la suplencia en el decisivo partido contra el Atl¨¦tico en el Camp Nou. Nadie defendi¨® m¨¢s el sello Bar?a ante Martino que Xavi: posesi¨®n, posici¨®n y presi¨®n. Aseguran en en el Camp Nou que apuestan por la continuidad de volante una temporada m¨¢s en tanto que s¨ªmbolo identitario del Barcelona. No se tratar¨ªa de una concesi¨®n populista sino de una necesidad futbol¨ªstica a la espera de la decisi¨®n del propio Xavi, afectado tambi¨¦n por el adi¨®s de Puyol y la partida de Vald¨¦s.
Al Bar?a le toca decidir por donde quiere que salga el juego despu¨¦s que Xavi lo hiciera desde el puesto de 8 y Guardiola del 4. Han sido los medios los que han definido la velocidad de bal¨®n y precisi¨®n para que definiera Messi hasta que por primera vez en los ¨²ltimos seis a?os se cierra el curso en blanco si se except¨²a la Supercopa. La inc¨®gnita es hasta qu¨¦ punto el fin de ciclo afecta a Xavi. Nadie ha dado con un recambio del volante; sin ¨¦l, el Bar?a juega a otra cosa y su no alineaci¨®n alimenta la confusi¨®n.
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