Holanda vuelve al aula con Van Gaal

El color naranja ha perdido fuerza incluso en Amsterdam. Hubo un tiempo en que se sab¨ªa del inicio de un campeonato de selecciones por la exhibici¨®n de los desacomplejados y pintados hinchas de Holanda. No es de momento el caso de Brasil. Ya solo falta que alg¨²n equipo incorpore la zamarra oranje para que Holanda quede desnuda y sea irreconocible despu¨¦s que sus adversarios hayan evolucionado el estilo de Rinus Michels y Johan Cruyff hasta alcanzar la victoria como pas¨® con Espa?a en Johanesburgo. Incluso Chile, tercer equipo del grupo B, parece futbol¨ªsticamente m¨¢s holand¨¦s que Holanda por la influencia que tuvo el paso de un t¨¦cnico como Marcelo Bielsa. ¡°El know-how [saber c¨®mo] que hizo ¨²nico al f¨²tbol holand¨¦s es ahora propiedad del mundo¡±, sentencia un periodista tan reconocido como Simon Kuper.

Ya no se cuestiona la apuesta por el doble pivote ni la renuncia a los extremos

Holanda se desti?e en la calle al tiempo que pierde identidad en la cancha y se divierte en Ipanema. Muy desacomplejados y despreocupados despu¨¦s de un exigente entrenamiento matinal protagonizado por Robben, peleado siempre con sus marcadores, especialmente con el defensa Martins Indy, los futbolistas jugaron el lunes a las palas y al voleibol en la playa, como si fueran brasile?os, y se dieron un ba?o que a punto estuvo de acabar malamente por culpa de un kitesurf cuyo cometa de tracci¨®n casi alcanz¨® a Van Persie y Janmaat.

¡°Me pas¨® a dos dedos de la cabeza¡±, confes¨® el delantero del Manchester United. Van Persie y Robben, dos treinta?eros, son con Sneijder, los l¨ªderes de un grupo muy escolar comandado por el maestro de escuela perfecto, Louis Van Gaal, un t¨¦cnico con fecha de caducidad porque el pr¨®ximo curso entrenar¨¢ al United, como confirmaron los diablos rojos el pasado 19 de mayo, para enderezar el rumbo de un equipo que con la pizarra de David Moyes firm¨® sus peores resultados en las ¨²ltimas d¨¦cadas y qued¨® fuera de las plazas europeas.

Se procura olvidar la final de Johanesburgo, la patada de De Jong, el fallo de Robben...

Especialmente t¨¢ctico, riguroso y reiterativo en el juego de posici¨®n, Van Gaal tiene un plan para cada partido del Mundial, y muy bien podr¨ªa ser que en el estreno este viernes contra Espa?a dispusiera de una defensa de cinco, un planteamiento que ya ha utilizado en los ¨²ltimos amistosos y del que no se ten¨ªan noticias en Holanda desde un amistoso contra Espa?a en 2001. ¡°Yo soy el que toma las decisiones y mi trabajo es sacar el m¨¢ximo rendimiento del equipo¡±, ha argumentado el seleccionador holand¨¦s. ¡°Es un sistema contra el que se hace dif¨ªcil jugar¡±, a?adi¨®, consciente por otra parte, de la debilidad hist¨®rica de la defensa, el punto d¨¦bil de Holanda, agravado ¨²ltimamente por la juventud de sus zagueros y tambi¨¦n por la falta de competitividad de la Liga. Van Gaal siempre tuvo obsesi¨®n por el sistema, tambi¨¦n en el Bar?a.

Acusado a veces de fabricar aut¨®matas, el seleccionador holand¨¦s siempre aspir¨® a que cualquier movimiento t¨¢ctico se pueda entrenar a fin de que un equipo con menos calidad individual pueda derrotar a un rival con futbolistas de un nivel superior. ¡°Si no se ejecuta bien la t¨¢ctica estar¨¢s muerto, porque entonces resuelven los mejores jugadores", ha explicado en una entrevista al diario Algemeen Dagblad. ¡°Seguramente ser¨ªa mejor para Holanda que me quedara despu¨¦s de la Copa del Mundo¡±, agreg¨®, ¡°pero el f¨²tbol de mi pa¨ªs ya no es prioritario incluso para m¨ª¡±. As¨ª que antes de dejar su puesto a Guus Hiddink ¡ªque vivir¨¢ su segunda etapa como seleccionador holand¨¦s tras dirigir a la oranje entre 1994 y 1998¡ª, Van Gaal intentar¨¢ convencer a sus livianos muchachos de que pueden ser protagonistas si se esmeran en el campo de pr¨¢cticas y ayudan a que los delanteros marquen las diferencias en Brasil.

Hay m¨¢s dudas sobre la competitividad holandesa que respecto al m¨¦todo Van Gaal. ¡°Hay calidad, pero los jugadores son demasiado j¨®venes para exigirles victorias¡±, ha proclamado Johan Cruyff, al que ¨²ltimamente se ha visto m¨¢s en el estadio del Ajax que en el del Camp Nou. El equipo de Frank De Boer le dio una aut¨¦ntica lecci¨®n al Barcelona en la Champions ¡ª(2-1) en el Amsterdam Arena en la quinta jornada de la fase de grupos¡ª y ya se sabe de la capacidad de Van Gaal para armar excelentes equipos con nuevas figuras: ya pas¨® en el Ajax de Kluivert, despu¨¦s en el Barcelona con Xavi, Puyol y V¨ªctor Vald¨¦s, y m¨¢s tarde en un Bayern M¨²nich rejuvenecido con M¨¹ller, Badstuber o Schweinsteiger.

Ausentes ahora por lesi¨®n Strootman y Van der Vaart, se impone el sentido de equipo, a veces destruido por los egos y las disputas tribales de los jugadores en funci¨®n de su club de procedencia y origen.

Ahora ya no se cuentan conflictos raciales, ni se cuestiona que se haya prescindido de la figura del 4 en favor del doble pivote, de la misma manera que no parece pecado quitar a los extremos por los carrileros y se procura olvidar la final de Johanesburgo de hace cuatro a?os en la que la patada de De Jong a Xabi Alonso se mezcl¨® con las paradas de Iker Casillas contra Robben. Ya no est¨¢ en el banquillo Marwijk, ni Van Basten, y el juego de posici¨®n y combinaci¨®n ha menguado tanto como la excitaci¨®n oranje en la Copa del Mundo. Ahora manda Van Gaal.

Quiz¨¢ el secreto del renacer holand¨¦s est¨¢ en un buen magisterio, y ya se sabe de la capacidad de persuasi¨®n del actual seleccionador, un t¨¦cnico especialmente aplicado, capaz de triunfar por sistema, insensible a las presiones, al ruido y al silencio, siempre en el aula, hoy m¨¢s universal que Holanda.