M¨¢s que un t¨ªtulo, Espa?a defiende un estilo
A partir de hoy, ante una Holanda que ha perdido de vista su academia de siempre, La Roja podr¨¢ ganar o perder, pero lo segundo no puede suponer una catarsis, tan solo una desilusi¨®n
Los resultados son fugaces. Lo que conviene que prevalezca es la idea. Espa?a la tiene, con ella se ha hecho universal y es tan venerada por sus t¨ªtulos como por su l¨ªrica. Por eso, a partir de hoy ante Holanda, en Brasil defender¨¢ algo m¨¢s que un t¨ªtulo: el sustento de su encomiable prop¨®sito desde 2008. Espa?a podr¨¢ ganar o perder, pero lo segundo no deber¨ªa suponer una catarsis, tan solo una desilusi¨®n. Pase lo que pase, el f¨²tbol espa?ol deber¨ªa mantener su etiqueta, fondo de armario tiene para ello, y no hay motivos para que a Espa?a se le mire con escepticismo, sean los resultados que sean. Conviene escuchar el mensaje de los m¨¢s ilustres del f¨²tbol espa?ol: ¡°Ganaremos o moriremos con nuestro estilo, cambiar ser¨ªa un error¡±, sostuvo ayer Xavi. A su lado, Casillas dio la receta: ¡°Ideas claras, ambici¨®n y humildad¡±. ¡°No le tengo miedo al futuro, lo que viene por detr¨¢s nos lo asegura¡±, enfatiz¨® Vicente del Bosque. Estilo, idea, humildad. Esos son los preceptos que han fortalecido al campe¨®n.
Del Bosque no ha desvelado si envidar¨¢ con Diego Costa o camuflar¨¢ a Cesc
Antes de que los marcadores dicten sentencia, a la mejor Espa?a de la historia le ir¨ªa bien rebobinar. Como m¨ªnimo, hasta M¨¦xico 86. Espa?a acudi¨® a aquel Mundial con una brillante generaci¨®n de futbolistas abanderados por una quinta maravillosa, una v¨ªa perfecta para explorar un rasgo diferenciador que pusiera el sello a una selecci¨®n sin estilo, cargada de pesadumbres hist¨®ricas. El Buitre y sus compa?eros ofrec¨ªan la posibilidad de que Espa?a por fin tuviera un cat¨¢logo que le sirviera de punto de partida. Una fat¨ªdica tanda de penaltis con B¨¦lgica hizo que, en un pa¨ªs donde la selecci¨®n era incapaz de vertebrar a los clubes, de nuevo, como siempre, sonaran los ca?ones. Otra vez los parias. Los resultados pueden ser tan corrosivos que, pese a los notables indicios de que sobre aquellos pilares podr¨ªa construirse algo grande, nada se hizo porque la idea esponjara. Parad¨®jico: deleitaba el Real Madrid, pero el traje no le cab¨ªa a Espa?a.
A la segunda oportunidad, tampoco. Llegados los noventa, con Johan Cruyff en plena arquitectura del dream team, otra marca a la que agarrarse, Espa?a, que entonces ni era Roja ni era nada, se decant¨® por la senda de Javier Clemente, que siempre consider¨® que la creatividad conspiraba contra la eficacia, as¨ª que el equipo se hizo de hormig¨®n y fue in¨²til. Parad¨®jico: el exitoso molde azulgrana, tan brillante como eficaz, no ten¨ªa lugar en Espa?a. No hab¨ªa forma de que la selecci¨®n fuera permeable al auge de sus clubes.
Hubo que esperar a 2008, cuando otra quinta, la de los bajitos, tuvo un flechazo tal que Espa?a pas¨® a ser una selecci¨®n civil en la que los clubes por fin encontraron amparo. Hoy, La Roja es un equipo con un guion innegociable. A eso se aferra salga como salga de Brasil. Ello tambi¨¦n formar¨¢ una parte capital de su legado. Puede que la actual selecci¨®n brasile?a antinatura sea la excepci¨®n y lidere este Mundial con su nuevo bosquejo, pero cuando se ha estado ya en la cima no suele ser recomendable un cambio de ruta, por mucho que llegue un par¨¦ntesis sin ¨¦xitos. Hasta puede que confunda un imprevisto despegue. Holanda, rival de la Roja hoy, es un claro ejemplo.
Con una selecci¨®n irreconocible como holandesa, la oranje logr¨® un atajo hasta la final de Sud¨¢frica. Pareci¨® un espejismo. Se olvid¨® de la patente que le hizo ser embriagadora y hoy anda algo extraviada, con Van Gaal a la b¨²squeda de cinco zagueros con los que taparse. Ha perdido de vista su academia de toda la vida desde los setenta y su f¨²tbol se ha vuelto improductivo. Con todo, es el subcampe¨®n y se ancla en gente como Sneijder, Robben y Van Persie, que en un buen d¨ªa pueden tironear a cualquiera. El resto es un grupo tan juvenil que entre Casillas y Xavi suman m¨¢s partidos internacionales que 17 de los reclutados por Van Gaal. M¨¢s contundente a¨²n: 11 de los 23 espa?oles en Brasil han hecho bingo en Mundiales, Eurocopas y Champions.
Espa?a tendr¨¢ que tirar de experiencia para abrirse paso en la trinchera holandesa. Arrancar en los grandes campeonatos nunca resulta f¨¢cil y, de alg¨²n modo, cabe vislumbrar que Holanda se perfile como la Suiza que le hizo patinar en el estreno en Sud¨¢frica. Con la diferencia de que la contra de los de Van Gaal puede resultar mucho m¨¢s da?ina.
Frente a un adversario bajo techo, Del Bosque no dio pistas sobre el ataque espa?ol, donde hay m¨¢s inc¨®gnitas. ¡°Nos ha ido bien cuando hemos jugado con un delantero de referencia que con alguien que llegue entre l¨ªneas¡±, dijo el salmantino, del que se desconoce si envidar¨¢ con Diego Costa o se inclinar¨¢ por camuflar a Cesc o incluso Silva. Cuestiones de matiz para una selecci¨®n que el propio t¨¦cnico defini¨® con ¡°estable y madura¡±. Y en boca de todos, la idea, el estilo como eje sustancial de lo que hay en juego.
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