?Fuego!
Han pasado tantas cosas en los poco m¨¢s de 150 kil¨®metros de la etapa ¡ªmenos mal que ya han pasado, pensar¨¢ la mayor¨ªa¡ª que resulta dif¨ªcil ponerse a escribir y centrar la atenci¨®n
Han pasado tantas cosas en los poco m¨¢s de 150 kil¨®metros de la etapa ¡ªmenos mal que ya han pasado, pensar¨¢ la gran mayor¨ªa¡ª que resulta dif¨ªcil ponerse a escribir y centrar la atenci¨®n en algo en concreto. Y en todo es imposible, dar¨ªa para muchas m¨¢s l¨ªneas de las que tiene esta columna.
Haciendo un juego f¨¢cil de palabras con el nombre del ganador de la etapa, la carrera ha hecho Boom. Me alegro mucho por la victoria de mi excompa?ero Lars Boom. Como ¨¦l ha dicho: ¡°Esta es la victoria que necesitaba para mi carrera¡±. Enhorabuena Lars, has hecho honor a tu apellido onomatop¨¦yico ganando una etapa en la que, como era de prever, la carrera ha reventado por varias partes debido a m¨²ltiples explosiones inesperadas.
Como era de prever, la carrera ha reventado por varias partes debido a m¨²ltiples explosiones inesperadas
Todos sabemos que uno de los mejores remedios para apagar un fuego es rociarlo con agua. Este mi¨¦rcoles ocurri¨® precisamente lo contrario, el agua fue el ingrediente catalizador para generar una hoguera incontrolable de la que cada uno sali¨® vivo como pudo. Y eso los que pudieron salir vivos. Algunos indemnes, otros con leves heridas, la gran mayor¨ªa con quemaduras de tercer grado de mayor o menor importancia, y tambi¨¦n hubo v¨ªctimas.
Y la v¨ªctima m¨¢s destacada fue sin duda Chris Froome, ¨²ltimo ganador en Par¨ªs, el corredor m¨¢s fuerte de los dos ¨²ltimos Tours, que ya sabemos que no ganar¨¢ en 2014. En el kil¨®metro 68, lejos a¨²n de los temidos nueve tramos de pav¨¦ que finalmente fueron siete, Froome dio de nuevo con sus huesos en el suelo. La segunda vez en este d¨ªa, la tercera si incluimos la etapa del d¨ªa anterior; y las pocas fuerzas que le quedaban las emple¨® para hacer un gesto de negaci¨®n con su cabeza marcando el fin del martirio. Se subi¨® al coche totalmente derrotado y entregado ante la mirada de respeto de su compa?ero Xabi Zandio y los auxiliares del equipo. Poco se puede decir en esas circunstancias, un silencio dice m¨¢s que algunas palabras; solo ¨¦l sabe el trabajo que hay detr¨¢s y las emociones que quedaron tiradas en aquella curva a derechas.
El tri¨¢ngulo del fuego dice que para que exista, se tienen que dar tres elementos: combustible, ox¨ªgeno y calor. Cuando hay suficiente calor, el combustible reacciona con el ox¨ªgeno y el fuego prende. El propio calor de la combusti¨®n realimenta a¨²n m¨¢s el fuego, y para que se apague tiene que faltar o el combustible o el ox¨ªgeno.
El combustible fue el pav¨¦s. El calor lleg¨® cuando se lleg¨® al terreno adoquinado
Este mi¨¦rcoles el combustible era el pav¨¦. Y ox¨ªgeno no faltaba por circunstancias del gui¨®n. El calor lleg¨® por inercia cuando los corredores se aproximaron al Carrefour de L¡¯Arbre, primer tramo de pav¨¦ capado en poco m¨¢s de un kil¨®metro, pero suficiente para que prendiese la hoguera que no se apagar¨ªa hasta la l¨ªnea de meta. Y el agua, que es extintora porque es incombustible, invirti¨® este mi¨¦rcoles su naturaleza con ocasi¨®n del Tour de Francia y en vez de apagar la hoguera la aviv¨® a¨²n con m¨¢s fuerza. En ese momento Froome rumiaba su derrota en la parte trasera del coche del Sky abrasado ya cuando a¨²n el verdadero fuego ni siquiera hab¨ªa comenzado.
Nibali, que aspiraba a salir indemne del incendio, no s¨®lo lo hizo sino que sali¨® de ¨¦l beneficiado. El triunfador del d¨ªa, obviando a Boom. Valverde cedi¨® 2m 09s con respecto a Nibali; no est¨¢ nada mal para lo que pod¨ªa haber sido, pues tambi¨¦n bes¨® el suelo. Y Contador, muy bien asistido por su equipo, cruz¨® la meta a 2m 35s del italiano tras sufrir unos problemas mec¨¢nicos en los ¨²ltimos kil¨®metros por el barro acumulado en los pi?ones.
Tiempo habr¨¢ de hablar de c¨®mo queda la carrera, de momento s¨®lo me queda una l¨ªnea para decir que el fuego sigue vivo, muy vivo.
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