Derrota y humillaci¨®n en la r¨ªa
El franc¨¦s Mekhissi pierde el oro en los 3.000 obst¨¢culos por quitarse la camiseta en la ¨²ltima recta, lo que indigna a sus rivales y da el bronce a Mullera
Pablo Torrijos lucha contra un inicio de catarro, la nariz colorada, la capucha del ch¨¢ndal hasta los ojos entre salto y salto, mientras unos 100 metros m¨¢s all¨¢, al otro lado del estadio, en la ¨²ltima recta de los 3.000 metros obst¨¢culos, el franc¨¦s Mekhissi, en un gesto ins¨®lito, se quita la camiseta, salta con ella de la mano el ¨²ltimo obst¨¢culo, aquel que tanto le duele a¨²n a V¨ªctor Garc¨ªa, y entra fanfarr¨®n, soberbiamente sobrado, el primero, tan superior. Era el gran favorito. A nadie sorprendi¨® la victoria del mejor obstaculista europeo de la historia, y menos que a nadie a los dos espa?oles, ?ngel Mullera y Sebasti¨¢n Martos, que lucharon hasta la ¨²ltima r¨ªa por las medallas con un polaco, Krystian Zalewski, y otro franc¨¦s, el rubito Yoann Kowal, que llega del 1.500m y tiene un final impresionante, y terminaron, respectivamente, cuarto y quinto.
¡°Es un buen chico. El problema es que a veces se le cruzan los cables¡± Sebasti¨¢n Martos. Corredor
Y estaban pese a todo tan contentos que pese a todas las historias pasadas -Martos debi¨® de irse de Londres por la repesca de Mullera, inicialmente sancionado por el asunto de unos emails en los que ped¨ªa informaci¨®n sobre productos dopantes-, hasta se abrazaron, a instancias del catal¨¢n, en la zona mixta, unidos por el sudor y la indignaci¨®n. "Lo de Londres me hizo m¨¢s fuerte", dijo Martos, que es de Huelma (Ja¨¦n), pero se ha subido a entrenarse a Le¨®n, fr¨ªa y h¨²meda, atra¨ªdo por el buen ambiente que se respira en el grupo de Jos¨¦ Enrique Villacorta, en el que tambi¨¦n est¨¢ Roberto Alaiz, carani?o, que correr¨¢ los 5.000m, y que se hacen llamar La Ovejas Asesinas cuando salen de conquista. Pero anoche, noche fr¨ªa de verdad, fue oveja asesinada, por el instinto de Mekhissi y por lo que Martos calific¨® de "falta de respeto".
La federaci¨®n europea de atletismo, m¨¢s que falta de respeto lo consider¨® conducta antirreglamentaria y a petici¨®n de la delegaci¨®n espa?ola, que reclam¨® porque el dorsal de un atleta debe ser visible en todo momento, lo que no fue el caso, aplic¨® el art¨ªculo 143.1 y 143.7 del reglamento ("los atletas deben competir con su uniforme nacional" y "el dorsal debe ser siempre visible", dicen) y descalific¨® al franc¨¦s de la que habr¨ªa sido su tercer oro europeo consecutivo. La primera reclamaci¨®n espa?ola hab¨ªa sido rechazada por el juez ¨¢rbitro de la prueba quien junto al nombre del estelar Mekhissi estamp¨® una tarjeta amarilla y el n¨²mero del art¨ªculo del reglamento infringido (125.5).
"Me he sentido humillado. Si hago yo eso en un campeonato de Catalu?a, donde podr¨ªa hacerlo porque puedo ganar f¨¢cil, me descalificar¨ªan, seguro", dijo Mullera, quien pele¨® hasta el final por la medalla. "Mekhissi es un buen chico y le he saludado y animado en la c¨¢mara de llamadas", dijo Martos. "El problema es que a veces se le cruzan los cables, como cuando se peg¨® con su compatriota Baala despu¨¦s de un 1.500 en el mitin de M¨®naco o como cuando se peg¨® hasta con la mascota de los Europeos de Helsinki". "No ser¨ªa una bonita forma de ganar una medalla", a?ad¨ªa Mullera, quien corri¨® m¨¢s conservador, guardando fuerzas para la ¨²ltima vuelta, que con la descalificaci¨®n del franc¨¦s, el ¨²nico europeo que ha rozado la barrera de los 8m (8m 0,09s es su r¨¦cord europeo), el ¨²nico que resiste a los kenianos, acab¨® subiendo al podio.
La descalificaci¨®n, aparte de suponer la tercera medalla en tres d¨ªas para el atletismo espa?ol, no impedir¨¢ que vuelva a sonar La Marsellesa en el Letzigrund, pues el t¨ªtulo pasa a Kowal, quien super¨® en la ¨²ltima recta a Zulewski por lo que en un principio era solo la plata. A Mekhissi se le espera el viernes, pues est¨¢ inscrito en el 1.500m.
"Que lo descalifiquen. El atletismo es un deporte de juego limpio y la falta de respeto a los 14 rivales no lo es", hab¨ªa dicho antes Martos, quien hizo una carrera muy valiente, entre los primeros hasta que no pudo m¨¢s en un final demasiado explosivo.
Calentado quiz¨¢s por el final de los 3.000m obst¨¢culos, Torrijos, en su primera final, y pese a sus 22 a?os y el fr¨ªo, hizo del tercero su mejor salto (16,56m), con lo que pas¨® a la mejora como octavo. Ten¨ªa el larguirucho de Castell¨®n antes de comenzar un triple desaf¨ªo, como los botes de su especialidad: pasar de los 17 metros, batir el r¨¦cord de Espa?a y el diploma. El ¨²ltimo ya lo hab¨ªa logrado. Para los dos primeros necesitaba trepar ante viejas glorias como su admirado Donato, el portugu¨¦s Evora y el rumano Oprea, que arrastraban su clase detr¨¢s del inalcanzable franc¨¦s Compaor¨¦, amigo de Tamgho, al que tanto se echa de menos, de quien hered¨® el entrenador y quien con su primer salto magn¨ªfico de 17,46m dej¨® claro qui¨¦n mandaba. Aunque demostr¨® que sabe competir y super¨® el embotamiento y los nervios iniciales, no volvi¨® Torrijos a superar los 16,56m.
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