Los pellizcos de Simeone

La madrugada del martes, la sala de prensa del Santiago Bernab¨¦u fue el escenario de una batalla psicol¨®gica curiosa. All¨ª se present¨® Diego Pablo Simeone con una sonrisa abierta, congratulado con el desempe?o de los suyos y el empate (1-1). Antes de responder a las preguntas, mir¨® el reloj un par de veces con cierta sorna para explicar de manera soterrada que no eran horas ni para terminar un partido ni para hablar. Acomodado ya, dispuesto para lanzar la andanada de la noche, las pantallas del habit¨¢culo, no se sabe si intencionadamente o por pura casualidad, reproduc¨ªan las im¨¢genes de la ¨²ltima final de la Liga de Campeones. Mientras Simeone se dispon¨ªa a decir que ¡°Di Mar¨ªa es el mejor jugador del Madrid¡±, las televisiones de la sala de prensa recordaban su desquiciado affairecon Varane y su invasi¨®n de la hierba del Estadio de la Luz lisboeta.

¡°Di Mar¨ªa es jugador del Real Madrid y lo utilizo como quiero y como pienso que debo hacerlo. Simeone se ha olvidado del Bal¨®n de Oro [Cristiano], y de Bale, que marc¨® en la final de Lisboa...¡±, respondi¨® con cierto resquemor Carlo Ancelotti. La sentencia de Simeone sobre su compatriota tuvo una onda expansiva generalizada. La prensa presente qued¨® ojipl¨¢tica, consciente de que el t¨¦cnico del Atl¨¦tico hab¨ªa disparado a la l¨ªnea de flotaci¨®n del punto de mayor controversia que domina la actualidad del Madrid. Di Mar¨ªa ha solicitado un aumento salarial y con lo que se ha encontrado es con la negativa de Florentino P¨¦rez a conced¨¦rselo.

Hicimos un encuentro largo, que era lo que nos conven¨ªa¡± Ra¨²l Garc¨ªa

La andanada de Simeone fue a la primera pregunta, en la que simplemente fue inquirido sobre una valoraci¨®n del partido. Se intuy¨® en su respuesta tanto corporativismo por paisanaje como conciencia de lo que supon¨ªa esa frase para el madridismo y sus dirigentes.

Simeone abandon¨® el Bernab¨¦u con un empate en el marcador y una victoria psicol¨®gica. Ya hab¨ªa dado un paso adelante en la batalla dial¨¦ctica en la previa del partido cuando ironiz¨® con las inversiones de uno y otro club este verano. ¡°Nosotros hemos gastado 95 millones en ocho jugadores y ellos en dos. Hay una peque?a diferencia, ?no?¡±. Canchero como jugador, como t¨¦cnico tambi¨¦n trata de sacar ventaja de las batallas dial¨¦cticas. No se entiende al Simeone entrenador sin el dominio del escenario medi¨¢tico desde sus mensajes. No ha habido un lema m¨¢s cacareado en los ¨²ltimos a?os en el f¨²tbol espa?ol que el ¡°partido a partido¡±. Puede haber ganado una Liga, haber roto un duopolio que parec¨ªa inabordable y haber disputado una final de la Copa de Europa que ¨¦l no abandonar¨¢ el perfil bajo en sus discursos.

Cristiano, con problemas musculares, es duda para la vuelta de ma?ana

El primer partido de ida de la final fue un espaldarazo para Simeone. Gan¨® tiempo para que sus futbolistas tomen confianza a la espera de que los nuevos se vayan acoplando. Desde que se hizo cargo del Atl¨¦tico, ni el once titular ni el grupo hab¨ªan tenido tantas alteraciones. Y eso le genera dudas. Plante¨® uno de esos duelos en los que parecen que suceden muchas cosas, pero en su ¨¢rea no pasa nada o casi nada. ¡°Hicimos un partido largo, que era lo que nos conven¨ªa¡±, analiza Ra¨²l Garc¨ªa. ¡°Trabajamos para llevar el partido donde quer¨ªamos¡±, matiza Juanfran.

Al Madrid, la resaca de la ida le dej¨® los problemas musculares de Cristiano, que le obligaron a abandonar el partido en el descanso. El astro portugu¨¦s es duda para la vuelta de ma?ana.

Los pellizcos de Simeone