El Madrid crece por dentro

En la cuarta temporada de Laso, tras seis t¨ªtulos y 10 finales de las 13 posibles en el camino, la evoluci¨®n del Madrid, entre otras cosas, pasa por la progresividad y el equilibrio. Anal¨ªstas acreditados y aficionados de paisano constataron que la parad¨®jica ense?anza que dej¨® la temporada pasada fue que el conjunto blanco debi¨® de ganar menos partidos para ganar m¨¢s t¨ªtulos. Que debi¨® desgastarse menos y seleccionar mejor sus esfuerzos. Que en los cuatro primeros meses de curso coleccion¨® r¨¦cords para el ¨¢lbum, pero en los dos ¨²ltimos no abri¨® las vitrinas. En nueve meses de competici¨®n, el Madrid disput¨® 80 partidos con un balance de 68 victorias y 12 derrotas (11 de ellas en los ¨²ltimos tres meses del curso), logr¨® 24 triunfos por m¨¢s de 20 puntos (11 de ellos por m¨¢s de 30), y alcanz¨® 11 veces la frontera de los 100 puntos. Llev¨® a sus aficionados a abrazar el s¨ªndrome de Stendhal antes de sucumbir al estr¨¦s postraum¨¢tico y termin¨® abocado al div¨¢n. Esta temporada, por reestructuraci¨®n y hoja de ruta, el equipo parece dispuesto a tomarse las cosas con m¨¢s calma. Con menos m¨ªstica y m¨¢s pragmatismo, diversificando el foco. Mucho por fuera, pero bastante m¨¢s por dentro. Algo est¨¢ cambiando.

En el primer partido de Liga, en el Madrid se lucieron los p¨ªvots. Bourousis (14 puntos, siete rebotes y 22 de valoraci¨®n) y Ay¨®n (10 puntos, 13 rebotes y 19 de valoraci¨®n) lideraron al conjunto de Laso que, tras un primer tiempo de apreturas y rodaje, super¨® sin dificultades al Gran Canaria de A¨ªto. Mientras Laso encuentra las proporciones de la mezcla, el estreno liguero sirvi¨® para descubrir su primer quinteto: Sergio Rodr¨ªguez, Llull, Maciulis, Bourousis y Ay¨®n; para evidenciar la mayor vocaci¨®n interior de los blancos con Ay¨®n midiendo su nueva parcela; y para refrendar el efervescente estado de forma de Llull y Bourousis bajo la estela del Mundial y el impulso de la Supercopa y para que el Palacio abrazara el carisma del menudo base argentino Facundo Campazzo (1,79m). Faltaron a la cita ante el Gran Canaria Rudy Fern¨¢ndez, con una sobrecarga muscular en los isquiotibiales de la pierna derecha, y Marcus Slaughter, por la rotaci¨®n de extracomunitarios (Ay¨®n y Campazzo ocuparon las dos licencias que permite la norma). Pese a tener una plantilla de 13 fichas esta temporada, Laso tuvo que sustituir a Rudy con el canterano Santiago Yusta, que ya debut¨® el a?o pasado, por la obligaci¨®n de contar con un m¨ªnimo de cuatro jugadores nacionales. Con la salida en verano de Dani D¨ªez, el Madrid los tiene justos (Sergio, Llull, Rudy y Reyes) por eso tir¨® del j¨²nior de 17 a?os.

Faltaron a la cita Rudy Fern¨¢ndez, con una sobrecarga muscular y Marcus Slaughter, por la rotaci¨®n de extracomunitarios

As¨ª transcurr¨ªa la ma?ana, entre c¨¢balas y probaturas, con Campazzo y Nocioni anunciando la conexi¨®n argentina, con Mejri y Tavares cortocircuit¨¢ndose en su duelo de gigantismo, con el Chapu ensayando de tres (compartiendo cinco junto a Felipe y Mejri), con el Madrid estirando su secuencia de cambios y con el Gran Canaria penalizando su inconsistencia inicial con la vibrante direcci¨®n de Bellas y los puntos de Urtasun y Summers. Desde el segundo cuarto, los de A¨ªto asumieron la iniciativa y opositaron a la victoria con orden y aplicaci¨®n en defensa y una paciente selecci¨®n de tiro en ataque. Del 17-16 del primer parcial se pas¨® al 21-30 a favor de los visitantes, que despu¨¦s equilibraron los blancos con las primeras dianas de Carroll (32-32). Pero, dominando el rebote y los porcentajes, los amarillos se marcharon con ventaja al descanso (38-43, m. 20).

A la vuelta de la caseta, con Campazzo ejerciendo de agitador y Ay¨®n y Bourousis hinch¨¢ndose a rescatar balones bajo los aros (cogieron 20 rebotes de los 44 del equipo), y Rivers y Llull apretando las tuercas, el Madrid retom¨® su plan fundacional de defensa, rebote y contraataque. Nadie secund¨® a Bellas, se apag¨® el Gran Canaria (14 puntos en los ¨²ltimos 20 minutos) y los de Laso se pusieron por delante en el marcador con solvencia gracias a una exhibici¨®n defensiva en el tercer cuarto, que concluy¨® con el contundente parcial de 16-2. La pelea por el rebote en ese tramo reflej¨® una estad¨ªstica de 21 capturas a favor de los blancos (13 de ellas en defensa) por 9 de los amarillos. Ya no perdieron el mando los locales, que con sus p¨ªvots al frente gestionaron la renta en una tranquila maniobra de aterrizaje.