Decisiones impulsivas

Al empezar cada temporada de la NBA, hay dos cosas que me preocupan. La primera, me pregunto si este peri¨®dico me volver¨¢ a contratar para que escriba sobre la NBA. (Por ahora, todo bien). Y la segunda, tengo miedo de quedarme sin nada sobre lo que escribir. Ya ver¨¢s, me digo, como este a?o no habr¨¢ ni discusi¨®n, ni disparates, ni intercambios chapuceros, ni contratos cutres. En una ¨¦poca en la que las estad¨ªsticas est¨¢n en todas partes, y en la que hay alguien esperando para hacerte pedazos si pones una falta de ortograf¨ªa en un tuit, parece como si cada vez m¨¢s gente la estuviese fastidiando menos.

Pero entonces empieza la temporada y me recuerda lo tonto que soy.

Hace una semana, al amparo de la oscuridad de un domingo por la noche, los Kings de Sacramento despidieron a Mike Malone, entrenador del equipo durante una temporada y cuarto. La jugada conmocion¨® a la mayor¨ªa de los observadores del campeonato. Los Kings de Malone hab¨ªan superado las expectativas en los 24 partidos de este a?o en los que le fue permitido actuar como entrenador, llegando a la carrera a un arranque 9 a 6 en la brutal Conferencia Oeste antes de que una meningitis viral apartase de la cancha a DeMarcus Cousins, el central estrella del equipo.

En general se acepta que la decisi¨®n de despedir a Malone vino de Vivek Ranadive, el principal propietario de los Kings, que en una ocasi¨®n insinu¨® que el entrenador intentaba jugar con cuatro defensas, dejando a un hombre atr¨¢s en el ataque. Ranadive tambi¨¦n fue el tema de un ensayo de Malcolm Gladwell, el soci¨®logo pop favorito de todos; Ranadive se dio cuenta de que el equipo de baloncesto del colegio de su hija probablemente saldr¨ªa beneficiado si ejerc¨ªa presi¨®n en toda la cancha. A continuaci¨®n, el conjunto lleg¨® a obtener un gran ¨¦xito nacional en el despiadado mundo del baloncesto de las chicas de 13 a?os.

Este es el hombre a cargo de uno de uno de los 30 mejores equipos de baloncesto del mundo, que ¨¦l contribuy¨® a comprar se dice que por 534 millones de d¨®lares. Y, actualmente, un equipo cuyo entrenador es Tyrone Corbine, que en cuatro temporadas a la cabeza de los Jazz de Utah registr¨® un deslumbrante porcentaje de victorias del 0,434%.

Habr¨ªa que recordar, por supuesto, que este comportamiento es una prerrogativa de Ranadive, igual que lo es la suya hacer lo que le parezca con la batidora que le regalar¨¢n este a?o por Navidad. Si quiere poner grava en sus batidos, adelante. Tambi¨¦n existe la posibilidad de que Ranadive tenga raz¨®n. A lo mejor el problema era Mike Malone, y a lo mejor Tyron Corbin es la soluci¨®n, tal vez porque sepa c¨®mo curar la meningitis viral.

Todav¨ªa no s¨¦ qu¨¦ va a pasar con los Kings de Sacramento de Vivek Ranadive. (?Ser¨¢n los campeones de la Conferencia Oeste de 2016?). Lo que s¨ª s¨¦ es que sus maniobras me han dado ¨¢nimos. Es estupendo ver que la gente rica es propensa a tomar decisiones impulsivas, exactamente igual que el resto de nosotros (?A alguien le apetece un batido de grava?).

Y todav¨ªa es mejor saber que, en lo que respecta a la NBA, nunca me quedar¨¦ sin nada sobre lo que escribir. Al menos no mientras haya seres humanos involucrados.