Cargando pilas en China
Ya hemos llegado a Sanya, terminando a tercera etapa de esta Volvo Ocean Race, que nos ha tra¨ªdo de Abu Dabi a Sanya. Al final conseguimos un cuarto puesto que valoramos muy positivamente, ya que tal y como se dio la etapa, como hemos ido contando, se nos hizo bastante complicado: muy poquito viento, muchos cambio de posiciones, momentos en los que nos hemos ido quedando atr¨¢s y luego hemos recuperado mucho. La sensaci¨®n es que hemos navegado bastante bien, hemos mejorado un poquito desde la segunda etapa y es con lo que nos quedamos. Sigue habiendo una progresi¨®n positiva y esperamos que para la cuarta etapa todav¨ªa estemos un poquito mejor.
En resumen, no empezamos muy bien; a mitad de etapa mejoramos mucho y estuvimos en segunda posici¨®n gran parte de ella, y despu¨¦s, por varios errores que cometimos ¡ªsobre todo en Malaca, con ciertas confusiones con redes de pescadores y dem¨¢s¡ª, nos quedamos atr¨¢s. Por eso despu¨¦s, estando quintos, el poder conseguir un puesto que era del Brunel, uno de los barcos m¨¢s punteros de esta etapa, nos da razones para estar contentos. Hemos vuelto a pelear y hemos ganado a uno de los barcos que est¨¢ compitiendo desde el primer momento por la regata.
A partir de Nueva Zelanda, la regata pasa muy r¨¢pido. Por eso hay que reponer fuerzas, ahora que podemos. Cuando haya que apretar, apretaremos
Una vez aqu¨ª, en China, un poco lo de siempre: intentar descansar lo m¨¢ximo posible, comer, ducharse, descansar, dormir. Paralelamente, el equipo de tierra trabaja a tope. El barco est¨¢ fuera del agua desde ayer y est¨¢ todo el mundo aplic¨¢ndose para ponerlo lo m¨¢s a punto posible.
Ha sido una etapa tan tranquila que la verdad es que hemos tenido muy pocos problemas t¨¦cnicos y eso hace que el barco, m¨¢s que arreglarlo, simplemente haya que arreglar un par de detalles. Son buenas noticias.
Estamos otra vez aqu¨ª, en China ¡ªdesde la ¨²ltima Volvo Ocean no volv¨ªamos al pa¨ªs, a Sanya en concreto¡ª y todos sabemos que es un lugar diferente. Un mundo diferente dir¨ªa yo. Estamos intentado, como he dicho antes, descansar lo m¨¢ximo posible. Y disfrutar, tambi¨¦n. De su clima tropical, que nos viene de f¨¢bula ya que esta vez no da tiempo de volver a casa, como hace un a?o. En cuatro d¨ªas volvemos a estar liados, por lo que casi todos nos hemos quedado. Alg¨²n miembro del equipo se ha ido por razones personales. El resto intentaremos, un poco en grupo, coger pilas para lo que nos espera.
Durante la etapa hemos tenido a Anthony Marchand enfermo. Es uno de nuestros menores de 30 a?os y ha sido una pena. El chaval lo ha pasado bastante mal con una infecci¨®n que se le complic¨® un poquito y tuvo que estar en cama casi una semana. Fue ?eti, el m¨¦dico a bordo, quien realmente se ocup¨® de ¨¦l. A pesar del ambiente, con este calor terror¨ªfico y mucha humedad, se ha recuperado. Ahora est¨¢ en Francia para operarse y estar de nuevo a disposici¨®n del equipo lo antes posible.
A bordo el equipo est¨¢ motivado, con muchas ganas de descansar y desconectar, pero tambi¨¦n de empezar la cuarta etapa. Esperamos que sea una m¨¢s din¨¢mica, m¨¢s bonita, que tengamos viento ¡ªno como en las tres primeras etapas¡ª y podamos disfrutar tambi¨¦n de lo que es navegar en estos veleros. Al fin y al cabo, es por lo que hacemos la Volvo; porque navegar en estos barcos es divertido, es r¨¢pido, es emocionante.
Embarcamos el pr¨®ximo d¨ªa 8 con rumbo a Auckland. Tardaremos otros 25 d¨ªas. Es una etapa larga y, aunque no en puntos, en distancia supone llegar a la mitad de la vuelta al mundo: salimos de Alicante y llegamos a Australia. Creo que ah¨ª empezar¨¢ la parte m¨¢s divertida de la regata, con la etapa del Sur, que es la que m¨¢s nos gusta a todos; luego, el tramo entre Brasil y EE.UU; el cruce del Atl¨¢ntico¡ La Volvo, a partir de Nueva Zelanda, pasa muy r¨¢pido. Por eso hay que reponer fuerzas, ahora que podemos. Cuando haya que apretar, apretaremos.
A bordo hay que ir al 100% siempre y es lo que estamos haciendo. Esperemos que con las peque?as mejoras podamos por fin estar en situaciones de p¨®dium lo antes posible y ?por qu¨¦ no en Nueva Zelanda? Intentaresmos darle la vuelta a la Volvo para llegar un poco mas arriba, donde el Mapfre se merece.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.