Los fondos de la discordia ya est¨¢n prohibidos

Al futbolista colombiano Brayan Angulo, en palabras de Pedro Bravo, presidente de los agentes FIFA espa?oles, los fondos de inversi¨®n (TPO/TPI) ¡°le arruinaron la vida¡±. Su caso fue el paradigma de la esclavitud al que esta herramienta de captaci¨®n y financiaci¨®n de traspasos, puede llegar a someter a un futbolista. Angulo, a cambio de un contrato que le garantizaba un m¨ªnimo de 48.000 euros al a?o, tuvo que jugar entre 2007 y 2012 donde Investfootball, la empresa poseedora de sus derechos econ¨®micos, decid¨ªa. En cambio, para Miguel ?ngel Gil, accionista mayoritario del Atl¨¦tico, no se pueden entender los siete t¨ªtulos conquistados por su club en el ¨²ltimo lustro sin la ayuda de este instrumento financiero. Falcao, Diego Costa, Miranda o Arda Turan llegaron al Atl¨¦tico por esta v¨ªa.

El caso del Atl¨¦tico y de Angulo son los extremos de una controversia que afecta de lleno a la l¨ªnea de flotaci¨®n de los planes de financiaci¨®n del f¨²tbol espa?ol tras la entrada en vigor, a partir de hoy, de la prohibici¨®n de su uso legislada por la FIFA. ¡°Hemos calculado que hasta ahora los fondos de inversi¨®n le han supuesto unos ingresos de 100 millones de euros al f¨²tbol espa?ol y el objetivo es triplicar esa cifra en dos temporadas porque con esa entrada de dinero mantendr¨ªamos talento y podr¨ªamos fichar jugadores de primer nivel. Queremos que los fondos se regulen¡±, defiende Javier Tebas, presidente de la Liga de F¨²tbol Profesional (LFP). ¡°Ahora mismo en Espa?a puede haber entre 40 o 50 jugadores que tiene relaci¨®n con fondos de inversi¨®n¡±, dice Javier G¨®mez, director financiero de la LFP.

Las patronales de los campeonatos espa?ol y portugu¨¦s, donde la penetraci¨®n de los TPO/TPI es mayor y va en progresi¨®n, tienen denunciada la prohibici¨®n ya vigente ante la Direcci¨®n General de la Competencia de la Comisi¨®n Europea. Consideran ambas organizaciones que la prohibici¨®n vulnera las normas de defensa de la competencia del Tratado de Funcionamiento de la Uni¨®n Europea (TFUE), adem¨¢s de las libertades fundamentales de establecimiento, prestaci¨®n de servicios, trabajo y circulaci¨®n de capitales.

Si los actores a favor de su existencia hablan de un instrumento financiero legitimado por el sistema de libre mercado al que los clubes pueden acudir para mantener su competitividad ante el cierre del grifo crediticio de los bancos, sus detractores los describen como motores de pr¨¢cticas que convierten al futbolista en una mera mercanc¨ªa, que descapitaliza a los clubes por la costosa financiaci¨®n que conlleva su uso y por las suspicacias que pueden levantar en la competici¨®n o en la toma de decisiones de un entrenador a la hora de hacer las alineaciones. Cada punto de divergencia es contrarrestado desde uno y otro bando.

¡°Hemos hecho una propuesta por escrito detallada y aprobada por los clubes, por la que no se podr¨ªan utilizar con menores de edad, que el m¨¢ximo del porcentaje que pueda tener un TPO sobre los derechos econ¨®micos de un jugador no sea mayor de un 50%, o que un club no pueda tener m¨¢s de seis jugadores bajo esa condici¨®n¡±, mantiene Javier G¨®mez.

¡°No apoyamos los fondos de inversi¨®n porque lo que queremos es una relaci¨®n directa y clara entre el trabajador, en este caso el futbolista, y el empleador, sin participaci¨®n de terceros en las decisiones del futuro inmediato de los derechos econ¨®micos del futbolista, evitando a la vez la descapitalizaci¨®n de los clubes en beneficio de terceras entidades privadas¡±, explica Luis Rubiales, presidente del sindicato espa?ol de futbolistas (AFE).

¡°Los fondos de inversi¨®n generan esclavitud, el coste de financiaci¨®n para los clubes es muy alto y puede provocar problemas de integridad en la competici¨®n¡±, argumentan desde la UEFA. ¡°?Y cuando un representante tiene varios jugadores en un equipo, y un entrenador en otro, no puede influir?¡±, replica Javier G¨®mez, que tambi¨¦n apunta a que la regularizaci¨®n tambi¨¦n dar¨ªa lugar a mayor seguridad jur¨ªdica, lo que atraer¨ªa a un tipo de inversor menos dudoso. ¡°El dinero es muy miedoso, el inversor quiere garant¨ªas. Hay inversores privados rusos, de Canad¨¢, de Luxemburgo... este sector es atractivo. Hace poco vinieron de Estados Unidos inversores que han trabajado con la NBA y quieren estudiar la posibilidad de invertir en la Liga. Esto empieza a moverse, pero tenemos que dar una seguridad jur¨ªdica. Si no, no van a entrar¡±.

Si para Espa?a, Portugal y algunos pa¨ªses del Este es fundamental este modo de financiaci¨®n, en Inglaterra y Francia est¨¢ prohibido. En Sudam¨¦rica, sin embargo, su implantaci¨®n es pionera y muy mayoritaria. ¡°All¨ª se instalaron como ahora aqu¨ª, con la excusa de que pod¨ªan ser una fuente de financiaci¨®n. Una vez fui a por un jugador a Talleres de C¨®rdoba para el Numancia. Hablamos con el jugador y fuimos a ver al gerente del club. ¡®Voy a ver el libro¡¯, dijo. Aquello parec¨ªa el registro de la propiedad. Ten¨ªa una hoja escrita a mano, con 14 ¨® 15 anotaciones¡±.

¡°Es esa selva la que queremos evitar con la regularizaci¨®n¡±, concluye Tebas.