¡°Los entrenadores aprendemos de LeBron James¡±
Jordi Fern¨¢ndez, el espa?ol que dirige al equipo vinculado y trabaja para los Cavaliers, analiza al finalista de la NBA
Jordi Fern¨¢ndez (Badalona, 32 a?os), concluida su primera y exitosa temporada como entrenador jefe en la D-League con los Canton Charge, equipo vinculado de los Cavaliers, se ha integrado en el staff de David Blatt durante las finales de la NBA. El entrenador catal¨¢n, que lleva seis a?os trabajando en Cleveland, adonde lleg¨® de la mano de Mike Brown en 2009, analiza algunos aspectos destacados del equipo de Ohio que dirige David Blatt, en pleno desarrollo de la final contra Golden State.
Lebron James. La percepci¨®n de la gente es que se trata de un s¨²per humano. Es una persona normal, amable, inteligente. Es admirable no s¨®lo c¨®mo se prepara para jugar, sino para recuperarse, y el tiempo que le dedica. Mentalmente es el jugador m¨¢s duro y fuerte que he visto. Es tan inteligente que tambi¨¦n como entrenador puedes aprender de ¨¦l. ?l es el l¨ªder. No porque la gente lo diga, sino porque act¨²a como tal. Da ejemplo en todo. Ha jugado las ¨²ltimas cinco finales y sigue siendo el primero en llegar a la cancha. Tiene mucho m¨¦rito y sus compa?eros conf¨ªan en ¨¦l porque no se arruga, nunca tiene miedo. Eso, siempre nos da opciones de ganar. ?l sabe que a veces en la cancha tienes que apretar al compa?ero. Cuando grita a alguien en la cancha, todos lo asimilan sabiendo que lo hace por el bien del equipo. Hace mejorar a los dem¨¢s. Es su manera de ser l¨ªder. Se le da muy bien. Sabe muy bien qui¨¦n es y sabe muy bien qu¨¦ hacer para mejorar a sus compa?eros.
Cuando James grita a alguien en la cancha, todos lo asimilan sabiendo que lo hace por el bien del equipo¡±
David Blatt. Tengo muy buena relaci¨®n profesional y personal con ¨¦l. La comunicaci¨®n ha sido muy buena y constante, sobre todo cuando han enviado a jugadores del primer equipo a jugar con el equipo vinculado que dirijo yo, caso de Harris y Kirk. Blatt y yo vimos la Final Four de la Euroliga, junto a los ojeadores, en la sala de v¨ªdeos. Ha sabido hacer frente a una enorme presi¨®n. Pasamos por momentos complicados y cuando entrenas a uno de los mejores, est¨¢s siempre expuesto a la cr¨ªtica. El caso es que fue cuestionado desde fuera. Su adaptaci¨®n a la Liga tuvo que ser m¨¢s r¨¢pida que la de cualquier otro entrenador. Pero al final, tambi¨¦n por resultados, ha demostrado lo valioso que es y su capacidad para dirigir y liderar al equipo.
Errores en el banquillo. (Durante los playoffs se reproch¨® a Blatt por intentar pedir un tiempo muerto cuando se le hab¨ªan acabado y, en otro partido, porque intent¨® que LeBron sacara de banda en la ¨²ltima jugada). A veces esos detalles se malinterpretan. Los jugadores aprenden de ti, pero son ellos quienes definen la jugada. No s¨¦ si ocurri¨® como se dijo, pero s¨ª puedo afirmar que aquella jugada acab¨® saliendo bien (LeBron anot¨® en el ¨²ltimo segundo la canasta de la victoria que sirvi¨® para empatar a dos la semifinal del Este contra Chicago) y que los jugadores conf¨ªan mucho en ¨¦l. Y en cuanto al tiempo muerto, para eso tienes ayudantes. Tal vez se produjo alg¨²n fallo de comunicaci¨®n, pero se solvent¨®.
Lo que est¨¢ haciendo Dellavedova es de pel¨ªcula. Su coraz¨®n, su esfuerzo y su mentalidad son superiores¡±
Dellavedova. Se merece cada segundo de todo lo bueno que le est¨¢ pasando. Probablemente sus condiciones f¨ªsicas no son las m¨¢s id¨®neas comparadas con las de muchos otros, pero su coraz¨®n, su esfuerzo y su mentalidad son superiores. Lo que est¨¢ haciendo es muy especial, casi de pel¨ªcula. De ser un jugador con minutos limitados, ha sido clave para ayudar al equipo a pasar rondas en los playoffs. Pod¨ªa pensarse que era flor de un d¨ªa, pero ahora ya se ve que su impacto, sobre todo en la defensa, y su intensidad, han cambiado el juego. Cuando ha tenido la instrucci¨®n de tirar, no se ha arrugado. De todas formas, ya ten¨ªa r¨¦cords de anotaci¨®n en su universidad y ha sido el n¨²mero uno con la selecci¨®n australiana en un Mundial. La gente se quedaba con la percepci¨®n de que es un chico peque?o, no muy dotado f¨ªsicamente. Pero siempre ha defendido a un nivel muy alto y cuando est¨¢ abierto tira de tres con un porcentaje excelente, aunque su estilo no sea muy ortodoxo.
Nuestro ¨¦xito es el impacto que han tenido en el juego jugadores que vinieron en enero y febrero como Mozgov, Shumpert y JR Smith¡±
Cavaliers. A veces los medios y lo que se dice influye en los jugadores. Hemos de ser conscientes de nuestras virtudes y de que tenemos una plantilla limitada, no solo en talento, sino en cantidad de jugadores. Del cinco titular que empez¨® la temporada solo sobrevive LeBron. Nuestro ¨¦xito es el impacto que han tenido en el juego jugadores que vinieron en en enero y febrero como Mozgov, Shumpert y JR Smith y el papel que han sabido asumir cada uno de ellos. A lo que hay que a?adir el fen¨®meno de Dellavedova. Hemos sufrido muchas adversidades, sobre todo en forma de lesiones y bajas. Eso hizo que perdi¨¦ramos algunos partidos, pero tambi¨¦n nos ha hecho m¨¢s fuertes. Hemos evitado el victimismo y estamos explotando al m¨¢ximo el hecho de contar con un jugador como LeBron y otros que tambi¨¦n poseen experiencia.
?xito de Jordi en la D-League
¡°Hemos conseguido el r¨¦cord de victorias de la franquicia (31 en 50 partidos). Llegamos a la final de la Conferencia. Cinco jugadores nuestros firmaron contratos en la NBA¡±, cuenta, orgulloso, Jordi Fern¨¢ndez. Los jugadores en cuesti¨®n son Cherry, Harris y Kirk (Cleveland), Gutierrez (Milwaukee) y Onuaku (Minnesota). La D-League est¨¢ concebida como una Liga de filiales. ¡°Ha sido una temporada muy buena para nosotros. Para m¨ª, ha sido importante porque, como primer entrenador del equipo, he tenido que tomar decisiones¡±, cuenta el t¨¦cnico de Badalona. Un 40% de los jugadores de la NBA han competido en la D-League. Algunos de los casos m¨¢s sonados son los de Danny Green (Spurs), Jeremy Lin (Rockets) o Shaun Livingston (Warriors).
¡°Empleamos la misma filosof¨ªa de juego que los Cavaliers. Lo tenemos todo organizado para que, cuando jugadores del primer equipo juegan con nosotros, como han sido los casos de Harris o Kirk, se puedan adaptar de manera inmediata. No premiamos las actuaciones individuales, sino el trabajo en equipo y el poder desarrollar tu rol. En la D-League hay muy pocos jugadores estrella, uno o dos como mucho por equipo. Si tienen la mentalidad de ser anotadores y estrellas, se equivocan. Porque si metes 50 puntos en la D-League no te va a fichar un equipo de la NBA. Los equipos de la NBA te fichar¨¢n si eres capaz de demostrar que puedes realizar acertadamente un papel determinado en favor del equipo¡±, explica el t¨¦cnico espa?ol.
La pasada temporada, Jordi Fern¨¢ndez colabor¨® con la selecci¨®n espa?ola que disput¨® el Mundial y un a?o antes trabaj¨® con la selecci¨®n que compiti¨® en el Mundial Sub-19. ¡°Me gustar¨ªa seguir vinculado con la selecci¨®n porque me ha aportado mucho personal y profesionalmente¡±, explica.
Despu¨¦s de seis a?os en Estados Unidos empieza a costarle m¨¢s impartir instrucciones en espa?ol que en ingl¨¦s. ¡°No nac¨ª hablando ingl¨¦s. Fui a vivir a Holanda cuando ten¨ªa 20 a?os. Despu¨¦s pas¨¦ por Noruega. Tras entrenar alg¨²n verano con Rudy Fern¨¢ndez y algunos jugadores espa?oles, fui a Estados Unidos. All¨ª trabaj¨¦ con algunas figuras como Billups o Garnett. Fue cuando me conoci¨® Mike Brown. La comunicaci¨®n es muy importante y por eso contin¨²o aprendiendo ingl¨¦s, porque tienes que hablar en momentos muy cr¨ªticos con los jugadores, ser muy preciso en los tiempos muertos, tambi¨¦n dirigirte a la prensa. Y aqu¨ª los t¨¦rminos de baloncesto son muy claros y espec¨ªficos. Eso te fuerza a trabajar y a sobrevivir. Es un doble reto¡±, concluye el entrenador que se sienta en las finales tras el banquillo en el que LeBron James, a veces, se toma un respiro.
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