Moyes ya tiene su equipo
El escoc¨¦s refuerza la zaga y la delantera para ser m¨¢s competitivo
Hay entrenadores que cuando llegan a un equipo hacen lo que pueden con lo que tienen. Ocurre cuando sustituyen a un colega en plena temporada. Y hay entrenadores que cuando llegan a un equipo hacen lo que quieren con lo que pueden econ¨®micamente.
La potencia y el gol de Jonathas
Altas: Diego Reyes (Oporto), Bruma (Galatasaray), David Concha (Racing de Santander) y Jonathas (Elche).
Bajas: Finnbogason (Olympiacos), Estrada (Alav¨¦s), Elustondo (Athletic), Ifr¨¢n (Pe?arol), Gazta?aga (Numancia), Cadamuro, Zubikarai (sin equipo).
David Moyes, con su prestigio labrado en el Everton, y herido en el Manchester United, vivi¨® la primera de las situaciones cuando lleg¨® a la Real en plena temporada sustituyendo a Jagoba Arrasate. Nunca se quej¨® de lo que hab¨ªa, pero no le gustaba del todo lo que se encontr¨®. En circunstancias coyunturales salv¨® la temporada con un balance gris: ni cayeron chuzos de punta, ni sali¨® el sol. El equipo se reblandeci¨® en todas las franjas del campo sin que Moyes diera con la tecla adecuada para afinar el concierto de la tropa. Lo prob¨® casi todo, pero la sinfon¨ªa tuvo muchas fases de monoton¨ªa.
El escoc¨¦s vive ahora la segunda de las situaciones. No tiene todo lo que querr¨ªa, pero quiere todo lo que tiene. Por fin es la plantilla y el equipo de Moyes de principio a fin. El laberinto del portero Rulli ¡ªque tanto le salv¨® la pasada campa?a¡ª se resolvi¨® de forma favorable. Sus propietarios ¡ªun fondo de inversi¨®n¡ª lo quer¨ªan vender a toda costa (en el traspaso est¨¢ siempre el negocio), pero la Real los persuadi¨® para que siguiera. ?C¨®mo?...
La defensa era otro quebradero de cabeza. Todos los laterales de la Real juegan con billete de ida y vuelta, Carlos Mart¨ªnez y Zaldua, por la derecha, y Yuri y De la Bella por la izquierda. Unos usan m¨¢s el de ida que el de vuelta. Cuando las cosas iban bien, los veteranos tiraban de colocaci¨®n para cuidarles las maletas, caso de Bergara en el centro del campo o de Ansotegi o Mikel Gonz¨¢lez, en el eje de la defensa.
Clave defensiva
??igo Mart¨ªnez, emperador y vasallo, al mismo tiempo, ha pecado de irregularidad. Si ¨¦l funciona, el equipo es una roca, si flaquea, la arena puede al cemento. Moyes lo intenta corregir con el fichaje del mexicano Diego Reyes, cedido por el Oporto, y la repesca de Ra¨²l Navas, que jugaba cedido en el Eibar. M¨¢s potencia, m¨¢s juego a¨¦reo, m¨¢s salida de bal¨®n. El centro del campo permanece inalterable en espera de las mejores prestaciones de jugadores como Rub¨¦n Pardo, Canales, Granero o Xabi Prieto, en la faceta creativa. Ah¨ª parece que Moyes mantiene su confianza.
La delantera es la zona m¨¢s alterada. Ah¨ª la Real ha combinado todas las facetas. Ha fichado la potencia de Jonathas, un futbolista imprevisible que convierte su confianza en el gol (14 con el Elche en la pasada Liga) en un juego muchas veces ego¨ªsta. Junto a esa potencia, combina la velocidad del guineano-portugu¨¦s Bruma, cedido por el Galatasaray, otro futbolista an¨¢rquico, pero de notable talento. El tercero en discordia es el jovenc¨ªsimo David Concha (19 a?os) fichado al Racing, otro extremo habilidoso y profundo que a¨²n no tiene destino fijo. Junto a ellos, sobresaldr¨¢ sin duda la figura inalcanzable de Carlos Vela y el pundonor, no carente de t¨¦cnica, de Agirretxe, guardamuebles en tantos y tantos partidos. Finnbogason, la promesa incumplida del norte m¨¢s g¨¦lido, jugar¨¢ cedido en el Olympiacos. En San Sebasti¨¢n gast¨® todas sus balas y las que le prestaron.
La Real, en cualquier caso, ha conseguido la estabilidad que perdi¨® muchos a?os cuando prefiri¨® la cirug¨ªa a los tratamientos conservadores. La ¨²ltima p¨¢gina de su manual de autoestima dice que quiz¨¢s sus objetivos est¨¢n m¨¢s a su alcance de lo que cree.
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