El imperio contra Bolt

Siete a?os despu¨¦s, los rascacielos estramb¨®ticos que rodeaban el anillo ol¨ªmpico no son una excepci¨®n en la l¨ªnea borrosa del horizonte pequin¨¦s, sino una plaga multiplicada como la contaminaci¨®n que todo lo asfixia; la piscina de Michael Phelps sigue en pie y tambi¨¦n el Nido en el que todo comenz¨® para Bolt, el estadio, aunque no la pista de tart¨¢n, renovada por Mondo.

Todo cambia, pero poco, tambi¨¦n en el atletismo, que tiene un nuevo presidente (Sebastian Coe, solo el sexto de su historia centenaria, solo el primero que ha sido campe¨®n ol¨ªmpico y recordman mundial) y unos problemas antiguos (el dopaje, el envejecimiento de su audiencia), que tiene siempre a Usain Bolt, el jamaicano que lleg¨® a los Juegos de 2008 como un casi adolescente de 21 a?os y regresa a Pek¨ªn para el Mundial como un casi adulto de 29 que ha madurado y adelgazado hasta ser capaz de no comer m¨¢s pollo empanado y llega con una larga lista de peticiones a los Reyes Magos para terminar de ser el m¨¢s grande.

Antes de sellar para siempre su historial ol¨ªmpico en R¨ªo 2016, donde intentar¨¢ convertirse en el primero de la historia que gana tres oros en los 100m (y, de propina, en los 200m), Bolt intentar¨¢ ser ¨²nico en los Mundiales, una competici¨®n m¨¢s joven (naci¨® en 1983) y frecuente (bienal, la de Pek¨ªn es la 15? edici¨®n ya) que los Juegos. Si, como espera, el jamaicano logra en la nueva pista del nido, su tercer oro mundial en 100m y el cuarto en 200m, no solo romper¨¢ el empate a 10 medallas (incluidas las de relevos) que mantiene en la cabeza del ranking con otro velocista de ¨¦poca, Carl Lewis, sino que, con siete oros individuales, adelantar¨¢ a Sergu¨¦i Bubka, el pertiguista sovi¨¦tico-ucraniano, quien desde 1997 se mantiene l¨ªder de la tabla con seis.

No ser¨¢ f¨¢cil para Bolt, m¨¢s viejo, m¨¢s dolorido, m¨¢s amenazado que nunca. Contra el tiempo, el declive, la edad y las lesiones que le machacan la espalda, el jamaicano puede luchar solo, lo lleva haciendo toda su carrera. Contra el imperio al norte del r¨ªo Grande, que se quiere inmenso entre ¨¦l sus objetivos, quiz¨¢s lo tenga m¨¢s complicado.

El imperio tiene un nombre, una actitud de pistolero y un rostro desafiante. Se llama Justin Gatlin, de 33 a?os, y 10 a?os despu¨¦s de su doble victoria en los 100m y los 200m en los Mundiales de Helsinki, llega a Pek¨ªn despu¨¦s de dos temporadas invicto en las pistas y reclamando el trono de Bolt, que le desprecia. Esta temporada, Gatlin ha corrido cuatro veces por debajo de 9,80s los 100m (mejor marca mundial del a?o con 9,74s) y cuatro veces por debajo de los 20s los 200m (19,57s, su mejor registro). Bolt, por su parte, solo ha corrido dos 100m en serio (9,87s en ambos) y varios 200m, su prueba amada, sin bajar de los 20s. ¡°?Y qu¨¦?¡±, dice el jamaicano. ¡°Estoy preparado. Que nadie olvide que yo soy el hombre de las grandes ocasiones. Siempre he ganado las grandes finales bajando de 9,70s, y Gatlin, si me quiere ganar el domingo, tendr¨¢ que bajar de 9,70s¡­¡± Aparte de Bolt, solo dos atletas, Tyson Gay y el jamaicano Yohan Blake, han bajado alguna vez de 9,70s: en la carrera de su vida ambos marcaron 9,69s. Despu¨¦s de batir por primera vez el r¨¦cord de los 100m en un mitin en Nueva York en 2008, el jamaicano lo super¨® dos veces y otras dos el de 200m, hasta dejarlos en 958s y 19,19s, respectivamente. En ambas ocasiones lo consigui¨® en grandes finales, en los Juegos de Pek¨ªn 2008 y en las Mundiales de Berl¨ªn 2009.

¡°Doping, doping, doping¡±, grita Bolt, fingiendo aburrimiento y hast¨ªo, el jueves, v¨ªspera de su 29? cumplea?os, en la conferencia de prensa de presentaci¨®n a Pek¨ªn. Le recuerdan al jamaicano que no solo Gatlin, que ha pasado cinco a?os de su carrera suspendido por dopaje y ha vuelto corriendo m¨¢s r¨¢pido a¨²n que cuando lleg¨® a ser recordman mundial, sino otros presuntos rivales como el otro estadounidense que le ha hecho sudar, Tyson Gay, y tambi¨¦n su compatriota Asafa Powell, los mejores de su generaci¨®n, han sufrido sanciones por dopaje. ¡°Yo solo no puedo con todo¡±, responde cuando la prensa le sigue recordando que ¨¦l es ¨²nico de los grandes velocistas que nunca ha dado positivo y que simb¨®licamente la final ser¨ªa una de un bueno contra muchos malos peleando por el alma pura del atletismo. ¡°Hay m¨¢s atletas limpios ah¨ª afuera. Es la responsabilidad de todos dejar fuera a los tramposos¡±.