Tigres deja a Pumas al borde del KO

Pumas vivi¨® una noche de espanto en Monterrey. Tigres lo someti¨® de principio a fin en el partido de ida de la final de la Liga mexicana y les hizo tres goles que pudieron ser cuatro o cinco si a ¨²ltima hora el cansancio no hubiera nublado las ideas de los delanteros regios. Gignac y Sobis, dos veteranos a la caza de cualquier bal¨®n que rondara el ¨¢rea, se lo pasaron de lo lindo y dejaron claro que no hay otra dupla igual en el campeonato local. Los del Tuca Ferretti ya han agarrado una de las asas del trofeo.

Si Gignac fuera un tienda, el eslogan de la entrada podr¨ªa decir: "haciendo goles desde hace una d¨¦cada". El ariete franc¨¦s, que suma 14 goles, tiene m¨¢s posibilidades que nunca de ir a la Eurocopa en junio del a?o pr¨®ximo tras la sanci¨®n que la federaci¨®n le ha impuesto al madridista Benzema. Esta noche?fue un incordio para la defensa de Pumas. Dario Ver¨®n, descentrado por las acusaciones de racismo que le ha lanzado durante toda la semana el colombiano Quintero, sufri¨® con los continuos desmarques de Gignac, y en ocasiones Sobis, a la espalda.

En una de esas, el brasile?o demostr¨® oficio. Aguant¨® en el ¨¢rea, de espaldas, la ca¨ªda de un bal¨®n que ven¨ªa del cielo. El defensa Javier Cort¨¦s no midi¨® y se lo llev¨® por delante, o eso le pareci¨® al ¨¢rbitro. Gignac se encarg¨® de marcar el penalti a un Pikol¨ªn Palacios que se tir¨® demasiado pronto. Era el minuto 14 y los Pumas comenzaban a intuir que no era su noche. En el 28, Javier Aquino control¨® con el pecho un bal¨®n que le llegaba de la banda derecha, la baj¨® y la coloc¨® en el palo contrario.

Pumas intent¨® estirarse pero no se lo permitieron. Tigres ten¨ªa m¨¢s de todo lo que hace falta para ganar una final. Llegado el descanso, la mejor noticia es que solo iban perdiendo por dos. Los primeros minutos de la segunda parte fueron un espejismo. Mat¨ªas Britos intent¨® agitar a su equipo con un par de jugadas de m¨¦rito, pero acabaron en nada. Sosa estaba desaparecido. Eduardo Herrera estaba abandonado a su suerte. El chaparr¨®n estaba por llegar.

A la contra, con Jurgen Damm y Aquino en los costados, Ferretti quiso dejar sentenciada la final. Tigres comenz¨® a llegar en tromba. Las tuvieron de todos los colores. De nuevo Sobis demostr¨® que es el m¨¢s listo, no por nada cuando jugaba en el Betis marc¨® en el Camp Nou un gol que le cost¨® una liga al Barcelona. Esta noche en El Volc¨¢n, le cay¨® otro bal¨®n del aire. Sab¨ªa que no pod¨ªa rematarlo y se limit¨® a estorbar al defensa. El tipo cay¨® en la trampa. Despej¨® de mala manera y se la dej¨® a Gignac, que empalm¨®. El bal¨®n sali¨® rebotado de las manos de Pikol¨ªn y Sobis solo tuvo que empujarla.?

Dami¨¢n ?lvarez le dio otro resuello a los norte?os. Los de la UNAM solo esperaban a que aquello no acabara en una goleada m¨¢s abultada. El marcador no se movi¨® m¨¢s. El resultado (3-0) es contundente, pero no definitivo. Sin ir m¨¢s lejos, en junio los Gallos Blancos de Quer¨¦taro, donde jugaba Ronaldinho, estuvieron a punto de levantar un 5-0 en la vuelta a Santos Laguna en otra final de Liga. La sensaci¨®n, no obstante, es que Tigres tiene toda la pinta de un equipo campe¨®n.