Mourinho apuesta por el Manchester United y se aleja del Madrid

La separaci¨®n del Real Madrid y Jos¨¦ Mourinho fue un caso at¨ªpico. Pocas veces el presidente de un club de f¨²tbol lament¨® m¨¢s la marcha de un entrenador que Florentino P¨¦rez en mayo de 2013. El m¨¢ximo responsable madridista nunca dej¨® de acariciar la posibilidad de recuperar al portugu¨¦s. Este invierno, la destituci¨®n de Mourinho como t¨¦cnico del Chelsea abri¨® una ventana de esperanza. Una posibilidad que cada d¨ªa se cierra un poco m¨¢s, a la vista de las ¨²ltimas averiguaciones de los administradores de Chamart¨ªn y seg¨²n confirman fuentes pr¨®ximas a Gestifute, la empresa de representaci¨®n de Jorge Mendes, intermediario del t¨¦cnico. Todos coinciden en que Mourinho ha firmado un precontrato con el Manchester United para sustituir a Louis van Gaal.

Agentes pr¨®ximos al club ingl¨¦s se?alan que el documento que une al United y a Mourinho es un instrumento jur¨ªdico habitual en la industria del f¨²tbol. Al United le garantiza el derecho a hacerse con los servicios del t¨¦cnico para las pr¨®ximas temporadas mientras que a Mourinho le asegura el cobro de una indemnizaci¨®n en caso de que finalmente su nuevo empleador desista de consumar la relaci¨®n con la r¨²brica de un acuerdo definitivo. El United se reserva la onerosa posibilidad de rescindir el acuerdo si en los pr¨®ximos meses encuentra un entrenador que le parezca m¨¢s adecuado. Si esto sucede, Mourinho gozar¨ªa de dos plazos para cobrar una contraprestaci¨®n creciente. Si el United no le firma el contrato definitivo antes del 1 de mayo, deber¨¢ pagarle cinco millones de libras esterlinas (unos 6,5 millones de euros); si a 1 de junio sigue sin firmarle, deber¨¢ abonarle otros diez millones de libras (unos 13 millones de euros). Mayo es la clave, entendido como el mes en el que se cierran la inmensa mayor¨ªa de los fichajes de jugadores y se dise?a la estrategia deportiva de las instituciones m¨¢s solventes.

Esta figura jur¨ªdica condicionada revela dos cosas. Primero, la voluntad de Mourinho de comprometerse con el United, un club al que siempre so?¨® con dirigir. Segundo, las dudas que abriga el seno de la direcci¨®n del United, que, en lugar de sellar un acuerdo incondicional, se ha dado un margen para sondear el mercado en busca de otras alternativas.

El consejo del club brit¨¢nico, el m¨¢s rico del mundo tras la firma de los nuevos contratos de televisi¨®n de la Premier, lleva tiempo debatiendo la conveniencia de contratar al exentrenador del Chelsea y el Madrid. Entre los valedores del portugu¨¦s se encuentra el contable que ejerce la vicepresidencia, Ed Woodward. M¨¢s reticentes se manifiestan los veteranos como sir Bobby Charlton, o el que fuera m¨¢nager hasta 2013, sir Alex Ferguson, que en su d¨ªa descart¨® a Mourinho y apost¨® por David Moyes. Ante la falta de acuerdo, los dirigentes han optado por la v¨ªa intermedia del precontrato. Tienen atado a Mourinho y mientras tanto esperan que se les presente una opci¨®n mejor. La prensa inglesa habla de Mauricio Pochettino, m¨¢nager del Tottenham, de Ryan Giggs, ayudante de Van Gaal,? o de Thomas Tuchel, entrenador del Dortmund.

Para evitar 'faroles'

Altos cargos del Madrid han conversado con Jorge Mendes durante meses para sentar las bases de un acuerdo. Para negociar con toda la informaci¨®n disponible, y para evitar faroles por parte del representante, un dirigente madridista asegura que el club investig¨® con detenimiento la situaci¨®n exacta de Mourinho. El resultado fue la confirmaci¨®n de que sus derechos pertenecen al United desde febrero.

Mourinho se ha mostrado muy reacio a regresar al Madrid cada vez que le han deslizado la sugerencia. Se justifica diciendo que el club espa?ol est¨¢ mediatizado por decisiones pol¨ªticas, que su relaci¨®n con la prensa es p¨¦sima y que no puede liderar a un vestuario en el que permanecen Ramos, Cristiano, Marcelo y Pepe, con los que mantuvo agrios enfrentamientos. Fuentes pr¨®ximas al entrenador advierten, sin embargo, que la verdadera causa de su cautela a la hora de valorar el regreso es la extrema sofisticaci¨®n de los entrenadores espa?oles, capaces de convertir a equipos de retales y debutantes, como la Uni¨®n Deportiva, el M¨¢laga o el ?ibar, en temibles unidades competitivas. El Bar?a es solo la ¨²ltima pesadilla. La Liga espa?ola, en su opini¨®n, es la m¨¢s peligrosa.

Maestro del oportunismo como pocos, Mourinho es el entrenador m¨¢s h¨¢bil que existe a la hora de medir las consecuencias mercantiles de cada uno de sus pasos. Sus socios aseguran que le preocupa la ca¨ªda que supuso su ¨²ltima temporada en el Chelsea para su prestigio profesional. Cada vez son m¨¢s las secretar¨ªas t¨¦cnicas que comienzan a creer que el m¨¦todo del portugu¨¦s, vanguardista hace una d¨¦cada, ha quedado algo desfasado en 2016. La peor Liga para ponerlo a prueba es la espa?ola, en donde, seg¨²n el entorno del t¨¦cnico, la escuela de entrenadores ha creado un caldo de cultivo ¨²nico para la innovaci¨®n. Mourinho entiende que su fama resultar¨ªa mucho menos da?ada si fracasa perdiendo partidos contra equipos de grandes presupuestos, como los de la Premier, que si queda expuesto ante los numerosos equipos sin apenas recursos que en Espa?a pueden complicarle la vida a cualquiera.

?

?