Colombia sufre para ganar a Bolivia

Cuentan que su madre le quer¨ªa llamar Marlon, por Brando, la leyenda del cine, pero un error en el registro dej¨® en su c¨¦dula de identidad Marlos Moreno. Sea como fuere, este chico de 19 a?os tuvo un debut de pel¨ªcula con Colombia. Su salida al campo, cuando el empate pesaba como una losa para los de P¨¦kerman, fue decisiva para la victoria final.

Colombia necesitaba el triunfo para no quedar descolgado despu¨¦s de un arranque de clasificaci¨®n muy pobre, con una sola victoria (Per¨²) y un punto en los tres duelos con selecciones que se le suponen a su altura (empate ante Chile y derrotas contra Uruguay y Argentina, en casa). El escenario, los 3.600 metros de La Paz, no era el ideal para el lucimiento, pero los de P¨¦kerman consiguieron recuperar cierto cr¨¦dito y confianza en la carrera hacia Rusia.

Muy superior sobre el papel el cuadro cafetero, Bolivia trat¨® desde el saque inicial de ahogar a la selecci¨®n colombiana como ¨²nico ant¨ªdoto para paliar la abismal diferencia de calidad entre los jugadores de ambos equipos. Los de Baldivieso buscaron impregnar un ritmo alto al partido desde el saque inicial, presionar en cuanto Colombia tuviese el cuero y hacer correr a los cafeteros para que se quedaran sin aire. La teor¨ªa no fue suficiente. Los de P¨¦kerman mostraron en la primera mitad una solidez defensiva como no hab¨ªan logrado en los cuatro encuentros anteriores, con la salvedad de la categor¨ªa de los rivales.

James se encarg¨® muy pronto de desbaratar los planes bolivianos. El 10 de Colombia aprovech¨® un centro de Bacca, descolgado hacia el extremo izquierdo, para armar un zapatazo que se col¨® por el palo largo de Qui?onez. Centenario gol como profesional del capit¨¢n colombiano. Inmerso en una convulsa temporada, cuestionado por su rendimiento en el Madrid, encuentra James en Colombia el cari?o y el respaldo de compa?eros y afici¨®n. Se siente c¨®modo el 10 en La Paz, donde debut¨® con la selecci¨®n en 2011, en la ¨²ltima victoria de los cafeteros en Bolivia. Desde entonces, ha disputado 41 partidos y ha anotado 14 goles; 6 le convirtieron en m¨¢ximo goleador de un Mundial de Brasil de ensue?o, a¨²n presente en el imaginario de Colombia, aunque poco tenga que ver este equipo con aquel.

Clamaba P¨¦kerman en la previa lo necesario que para su equipo era recuperar la mejor versi¨®n de James. Pero no solo. Cuadrado, extraviado en los primeros partidos clasificatorios despu¨¦s de una p¨¦sima Copa Am¨¦rica, confirm¨® el buen momento por el que atraviesa con la Juventus. El medio fue la piedra angular sobre la que gir¨® Colombia en el Hernando Siles. Manej¨® el tempo del juego en la primera mitad como hac¨ªa tiempo no consegu¨ªa. Un pase largo hacia James acab¨® en las botas de Bacca, que anot¨® su primer gol oficial con Colombia en el mismo escenario en el que, durante un amistoso, logr¨® el primer tanto con la selecci¨®n.

El partido parec¨ªa encarrilado para los de P¨¦kerman, pero el descanso cortocircuit¨® a los colombianos. Faltos de aire, pero sobre todo de juego, se complicaron un encuentro que ten¨ªan claramente a su favor. Un penalti tras un rechace en la mano de Murillo, al poco de iniciarse la segunda mitad, permiti¨® a Bolivia acercarse en el marcador. Arce gan¨® la partida desde los 11 metros a un Ospina que fue providencial para Colombia tras el posterior empate de Chumacero. El arquero del Arsenal salv¨® un disparo a bocajarro que pudo acabar con las aspiraciones mundialistas de la selecci¨®n.

Cuestionado tras la Copa Am¨¦rica, P¨¦kerman, que hab¨ªa dejado fuera de la convocatoria a Te¨®filo Mart¨ªnez, fetiche para ¨¦l, y a Jackson Mart¨ªnez, al que advirti¨® que la liga china no ten¨ªa nivel suficiente, conf¨ªo el final del partido a Marlos Moreno, un pelado de 19 a?os, en la jerga colombiana, por el que, dicen, suspiran los petrod¨®lares del PSG.

En apenas 10 minutos, el delantero del Nacional de Medell¨ªn meti¨® al partido una velocidad que descoloc¨® al cuadro boliviano. Un centro suyo acab¨® en las botas de Muriel que, a bocajarro, estrell¨® el bal¨®n en el cuerpo de Qui?onez cuando media Colombia cantaba ya gol. Ya en el descuento, tras un centro de James, Moreno asisti¨® desde la izquierda a Cardona que, esta vez s¨ª, perfor¨® la metra boliviana.

Las botas del ni?o al que su madre quer¨ªa llamar Marlon fueron decisivas en La Paz. El lugar que vio debutar a James encumbr¨® a la nueva promesa cafetera. Un final feliz para esta pel¨ªcula de suspense en la que se ha convertido la selecci¨®n de Colombia.