El Sevilla mantiene su leyenda europea ante el Athletic
Los andaluces se imponen a un gran rival en la tanda de penaltis en un choque emocionante
No pudo ser m¨¢s igualada y emocionante la eliminatoria entre el Sevilla y el Athletic. La casta y el buen f¨²tbol del conjunto vasco acogotaron al equipo andaluz, al que igual¨® el 1-2 de la ida para forzar la pr¨®rroga con goles de Aduriz y Ra¨²l Garc¨ªa. Estupendo el Athletic, capaz de profanar un templo como Nervi¨®n, que acumulaba 11 triunfos seguidos en la Liga Europa. En un choque que fue un carrusel de emociones, lo mismo Susaeta perdonaba en la pr¨®rroga (tremendo pase de Be?at) que San Jos¨¦ sacaba bajo palos una chilena de Coke. Un emotivo ejercicio que se resolvi¨® en los penaltis. Ah¨ª surgieron los ¨²ltimos h¨¦roes de este fant¨¢stico duelo. Fall¨® Be?at, ex b¨¦tico, y par¨® David Soria. No err¨® Gameiro y el Sevilla pas¨® en los penaltis para mantener su leyenda europea.
Emotivo y fuerte, lleno de intensidad, como corresponde a dos equipos bien trabajados y rudos, el partido entre el Sevilla y el Athletic fue un continuo duelo en todas las zonas del campo. La presi¨®n insistente del Athletic iluminaba el juego vasco, al que Valverde dot¨® de m¨¢s m¨²sculo con Lekue y Ra¨²l Garc¨ªa por detr¨¢s de Aduriz. El manual del Sevila, sin Banega, era m¨¢s rudimentario que de costumbre, con el bal¨®n en largo a Iborra como argumento m¨¢s utilizado. En un choque sin respiro, jugado con fuerza en cada palmo de terreno, los dos equipos penalizaron una barbaridad cada error del contrario. En especial el Athletic. Primero, un pase de Susaeta dej¨® solo a Aduriz. Kolo salv¨® bajo palos despu¨¦s de que el goleador internacional driblara a David Soria tras su lenta salida.
Del mismo modo, el Sevilla tuvo su gran ocasi¨®n en un centro perfecto de Krohn-Dheli que Rami fall¨® con todo a favor. La defensa vasco sali¨® tarde y mal. Le costaba un mundo sacar el bal¨®n al conjunto de Emery, castigado por la agresividad del Athletic. Nzonzi, bien tapado, no entraba en juego, con lo que Krychowiak ten¨ªa que tocar y defender. Trabajo doble para el polaco, como para sus compa?eros, incapaces de encontrar las galopadas de Gameiro, sin el socorro de las conducciones de Vitolo. Perdido el juego con tanto choque y tanta disputa, de nuevo un error le pudo costar caro al Sevilla. Kolo intent¨® un regate como ¨²ltimo hombre ante Ra¨²l Garc¨ªa. El navarro, con el colmillo afilado, le adivin¨® la intenci¨®n y puso a prueba a David Soria. Por ocasiones, ganaba el Athletic. Pero pasaba el Sevilla haciendo bueno el 1-2 de la ida.
El Athletic no se descompuso. Sigui¨® jugando con paciencia, presionando una barbaridad al Sevilla. El segundo tiempo fue una bendita locura. Marc¨® Aduriz en un error de David Soria y respondi¨® el Sevilla con un fant¨¢stico gol a la contra de Gameiro. Entonces, Emery fue algo cobarde y decidi¨® aguantar el 1-1 ante un rival que perd¨ªa a Aduriz por lesi¨®n. El Sevilla recul¨® demasiado y Ra¨²l Garc¨ªa castig¨® el paso atr¨¢s de los sevillistas, que desaprovecharon, eso s¨ª, tres claras ocasiones por mediaci¨®n de Iborra, Gameiro y Nzonzi. El Athletic, por fin, hab¨ªa encontrado su momento en la eliminatoria para forzar la pr¨®rroga. Llegaron ocasiones, pero el marcador no se movi¨® hasta los penaltis. Y pas¨® el Sevilla.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.