Algoritmos
La tradici¨®n de los onces ideales es vieja y tiene una importancia fundamental: no existen y no valen para nada
Despu¨¦s de la primera jornada de la Eurocopa la UEFA public¨® un once ideal. La tradici¨®n de los onces ideales es vieja y tiene una importancia fundamental: no existen y no valen para nada, y por tanto es lo que m¨¢s pol¨¦mica levanta. El f¨²tbol es un deporte que atiende a sus consumidores de manera muy sutil organizando actividades extraescolares como el once ideal, el Bal¨®n de Oro o la propia Eurocopa. En el caso del primero se ha generado una gran pol¨¦mica en Espa?a por la ausencia de un espa?ol: todos llevamos un once ideal dentro salvo la UEFA, que lo lleva fuera. Y decidi¨® no incluir a Andr¨¦s Iniesta, justific¨¢ndolo con un algoritmo. Un algoritmo entrenador, un algoritmo que hace las alineaciones. De primer entrenador Lillo hablando de la poes¨ªa del 4-4-2 y detr¨¢s un algoritmo corrigi¨¦ndole como las supertaca?onas. El algoritmo saliendo a la rueda de prensa a dar explicaciones, y comi¨¦ndoselas.
Este algoritmo procesa cuestiones oscur¨ªsimas del juego que se han puesto de moda, como los kil¨®metros recorridos (curiosamente se usa este dato para ensalzar al que m¨¢s corre, y no al contrario), el n¨²mero de controles de bal¨®n con el exterior cuando el bal¨®n se recibe a media altura y los pases hacia atr¨¢s. No s¨¦ si se contabilizan los goles o las paradas: es probable que se les haya pasado. Lo que es seguro es que el algoritmo no detecta el momento en que en el ¨²ltimo partido Iniesta, paseando con el bal¨®n como un invasor por sus conquistas, ve el desmarque de Alba y le hace con la mano un gesto de director de orquesta. Hay m¨¢s f¨²tbol en ese ¡°d¨¦jalo estar¡± que en un rondo.
El algoritmo no ha considerado que Iniesta deba estar en el once ideal y seguro que tiene raz¨®n. El once ideal es como el hombre ideal y la mujer ideal: un invento de Cosmopolitan. Los n¨²meros nunca fallan, el socio siempre tiene raz¨®n y en el campo tienen que jugar los mejores: tres frases que han dejado al Madrid sin veinte ligas, como aquella en la que se ech¨® a Antic porque iba primero pero jug¨¢bamos mal (sic) y la gente se aburr¨ªa (sic, lol). El an¨¢lisis futbol¨ªstico se ha sofisticado, se disponen de nuevos n¨²meros, muchos de ellos prestigiosos, con los que conocerlo todo y explicarle mejor a la gente un partido o una temporada. Fuera del papel no hay una ecuaci¨®n que descifre el miedo, la ambici¨®n, el riesgo o la imaginaci¨®n, materiales todos ellos con los que se fabrica un juego m¨¢s valioso que el ideal, el real.
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