Guardiola: ¡°Es hora de poner el alma¡±
El catal¨¢n afronta su estreno en la Premier consciente de que le juzgar¨¢n los resultados
Harry bebe pintas de cerveza turbia en The Old Monkey, un pub que programa mon¨®logos de humoristas en la planta superior, muy cerca del Ayuntamiento de Manchester. Ha terminado el trago y la camarera le pregunta si quiere otra ronda. Harry debe pasar de los 80 a?os, le tiembla el pulso y busca monedas en su vieja rebeca desgastada. No las encuentra y le invita un parroquiano. Harry agradece el detalle llev¨¢ndose la mano a la visera de su vieja gorra, coronada por un escudo del City y sonriendo. ¡°Bueno, Guardiola me gusta a veces y otras no. Hoy me gust¨® lo que dijo. Eso de poner el alma y de que el City no solo es dinero¡± dice cuando fluye la conversaci¨®n. ¡°Es la hora de poner el alma en el campo¡± acababa de decir Guardiola apenas a un kil¨®metro y medio, en la sala de prensa del Etihad, el d¨ªa antes de sentarse por vez primera en un banquillo como un entrenador de un equipo de la Premier Legue. ¡°Estoy excitado, claro, para m¨ª es importante. Pero no es la prueba m¨¢s dura de mi carrera. La m¨¢s dura fue demostrarme en el filial del Barcelona que pod¨ªa ser entrenador. Es un d¨ªa especial para m¨ª, claro, eso s¨ª¡±.
A Pep y al City les encara el Sunderland, duelo que tiene algo de simb¨®lico. Los Black Cats fueron los ¨²ltimos que encajaron un gol en el Main Road, el viejo estadio del City. All¨ª estuvo Harry, claro. ¡°Llevo cincuenta a?os viendo jugar a mi equipo¡±, dice el anciano. ¡°Veremos que tal nos va con Pep¡±. ¡°Me juzgaran los resultados¡±, admite el catal¨¢n. ¡°Hay seis o siete equipos que pretenden lo mismo que nosotros, que quieren ganar la Premier, ya veremos como nos va¡±. Sabe que el sesenta por ciento de los aficionados del City dan por hecho que ganar¨¢n la Liga. Sabe que no ser¨¢ f¨¢cil. Pero tambi¨¦n sabe que ha terminado emocionado algunos entrenamientos al ver como se han comportado sus jugadores. Al menos en cinco ocasiones durante los 38 entrenamientos que lleva en el City ha terminado la sesi¨®n preparatoria d¨¢ndole las gracias a sus pupilos por su entrega y su esfuerzo. ¡°Quiz¨¢ no juguemos bien contra el Sunderland pero la pasi¨®n no se negocia. Para jugar bien, a¨²n necesitamos m¨¢s tiempo. Si tenemos que jugar feo lo haremos, ya habr¨¢ tiempo para mejorar, lo que no se negocia es la pasi¨®n¡±. Y sus jugadores la han puesto. ¡°He visto un equipo que me ha impresionado por su calidad. Ha trabajado como me gusta. No tengo ninguna queja. Ninguna. Necesito tiempo y lo s¨¦. Pero ha llegado el momento de poner el alma en el campo¡±.
El sesenta por ciento de los seguidores del City, piensan que ganar¨¢n la Premier
No dio pistas sobre el equipo, como suele ser su costumbre, pero lo tiene bien pensado, ¡°en un ochenta o noventa por ciento¡±. Descart¨® a San¨¦, que apenas ha entrenador con el equipo, parece que Kompany y Otamendi no llegan a tiempo ¨C¡°he de pensar en el Steaua¡±, asegur¨® en referencia al primer partido de la eliminatoria de la previa de la Champions que disputa el martes en Bucarest- y es duda Zabaleta, que sale de una operaci¨®n en el tobillo. Pero se espera en el equipo a Stones, aunque se incorpor¨® esta misma semana procedente del Everton. ¡°Viene de trabajar bien con Ronald Koeman y me gusta, sabe siempre tomar decisiones correctas. Necesito dormir esta noche para pulir la alineaci¨®n, que ya est¨¢ pensada¡± sostuvo Pep, que la pasada semana cen¨® con Ronald.
Koeman, fue uno de sus hermanos mayores en el Bar?a, le dio su punto de vista sobre la Premier, como hacen a diario Brian Kidd o Mikel Arteta, sus ayudantes en el cuerpo t¨¦cnico, y ha escuchado a Quique S¨¢nchez Flores, ex del Watdford, y a Pochettino, y a tantos y tantas cosas, que cabe pensar que debe tener idea formada de lo que le espera, pero no: ¡°Al final, hasta que no lo sienta no sabr¨¦. Me han dado muchos consejos, he escuchado muchas cosas, pero hay que vivirlo. No quiero prejuicios ¡±, dijo ayer. ¡°Est¨¢ loco por ver qu¨¦ es, por experimentarlo¡±, admiten sus colaboradores, que se remiten a la experiencia en el Bayern. ¡°Lleg¨® con una idea y cuando descubri¨® la verdad, tuvo que cambiar muchas cosas¡±.
Los que le han acompa?ado en el camino desde Barcelona sostienen que en ese sentido, es otro. ¡°Este mucho m¨¢s maduro, m¨¢s hecho como entrenador. Tiene muy claros tres o cuatro principios, en el resto es mucho m¨¢s moldeable, depende m¨¢s de los jugadores que antes¡±, aseguran. ¡°Eso s¨ª, igual que cuando llegamos al Bayern, ha cambiado mucho su idea sobre algunos futbolistas, unos para bien, otros para mal¡±. Los conceptos hablan de tener la pelota, atacar con sentido y orden para encontrar espacios, presionar r¨¢pido al perderla. Nada nuevo. La novedad la impondr¨¢ el juego propio de la Premier.
Lo que no ha menguado es su exigencia para los que le rodean, el cuerpo t¨¦cnico y sus jugadores, y su capacidad de trabajo: ¡°No para. Sigue llegando el primero y se va el ¨²ltimo y necesita tener controlados hasta el ¨²ltimo detalle. Ayer empezamos a preparar el partido contra el Stoke¡±, explican desde las entra?as de la Academia, la incre¨ªble Ciudad Deportiva que construy¨® el jeque Mansour bin Zayed Al Nahyan a kil¨®metro y medio de Picadilly Gardens, el coraz¨®n de la ciudad. Con ¨¦l comi¨® ayer Guardiola, ser¨¢ para agradecerle en privado las muestras de gratitud que dio a los due?os del club por la oportunidad que le han dado de tener disfrutar de un club que, seg¨²n dijo, es mucho m¨¢s que dinero. ¡°Siempre que se habla del City se habla de lo que se gastan en fichajes, pero ha ganado todos los campeonatos en las divisiones inferiores por lo bien que se trabaja. Estoy encantado de la pasi¨®n con las que se vive en la Academia y como se cuida el talento¡±.
Guardiola, que el d¨ªa de su presentaci¨®n dijo que necesitaba conocer a sus futbolistas, abarzarles y tal vez, darles una patada en el culo, lo ha hecho. Se la dio a Nasri y a Yay¨¢ Tour¨¦, a los que apart¨® del equipo, por gordos. El portugu¨¦s ha bajado ocho kilos, y dicen en los despachos que al marfile?o no le hab¨ªan visto tan delgado desde que lleg¨® al club. Tambi¨¦n dijo que llegaba para aprender, y lleva un mes haci¨¦ndolo, porque otra cosa no, pero predispuesto estaba. Confes¨® haber descubierto ¡°la disponibilidad humana de los empleados¡±. Y los empleados le han descubierto a ¨¦l.
"La Premier hay que vivirla. No quiero prejuicios", dijo Guardiola
Ma?ana, en presencia de su padre, que lleg¨® ayer de Santpedor, y de su familia, que se ha instalado en un piso del coraz¨®n de la ciudad, presentar¨¢ credenciales en el Etihad. El equipo no est¨¢ cerrado, porque sobran jugadores ¨Cma?ana se va Zinchenco al PSV, cedido¨C?y al cuerpo t¨¦cnico le falta un dietista y un galeno ¨Cest¨¢ a punto de fichar el doctor Edu Mauri, que fuera delantero del Espanyol- y sobre todo, le falta a Guardiola tiempo y le sobra ilusi¨®n. ¡°Queremos jugar bien¡±, insiste Pep a quien se le ha visto hablar mucho con el equipo. ¡°Raro el d¨ªa que no les ha dado una charla buscando cosas que en los entrenamientos hemos visto m¨¢s que en los partidos¡± admiten sus colaboradores de paseo por la calle Dean.
La hora ha llegado. Por tercera vez, Guardiola se reta a s¨ª mismo, se pone a prueba. Sabe que le est¨¢n esperando. Se invent¨® un Bar?a de autor, y descubri¨® que no pod¨ªa repetirlo en el Bayern as¨ª que le dio una vuelta al estilo que hered¨®; ahora pide la pelota en Inglaterra. Le espera un pa¨ªs que gan¨® un mundial hace justo cincuenta veranos, en el de 1966, y que desde entonces, se busca sin encontrarse.
Harry bebe despacio las pintas de Bitter sentado en una ventana del pub. ¡°Pep me gusta a veces y otras no, veremos¡±, sostiene desde la incredulidad que dan los a?os. Ya no canta como cuando ten¨ªa dientes y viv¨ªa los partidos de pie, en las gradas de Main Road. Pero su alma sigue siendo azul, como la camiseta del City. Es hora de ponerla en el campo.
Mourinho no podr¨¢ contar con Pogba
Jos¨¦ Mourinho debuta tambi¨¦n el domingo al frente del United, en Bournemouth. El t¨¦cnico portugu¨¦s no podr¨¢ El t¨¦cnico portugu¨¦s no podr¨¢ con Pogba, al que la federaci¨®n inglesa no permite jugar en el primer partido del campeonato al considerar que debe cumplir la sanci¨®n que arrastra de Italia. Paul Pogba fue sancionado por acumulaci¨®n de tarjetas amarillas en su ¨²ltimo encuentro con la Juventus. El franc¨¦s protagoniz¨® el jueves por la noche una escabrosa escena al escapar de un c¨¦ntrico restaurante de Manchester por la puerta de la cocina tratando de escapar de una decena de fot¨®grafos que le esperaban en la puerta, lo que finalmente consigui¨®. Mourinho, que logr¨® finalmente que Adnan Januzaj abandonar¨¢ la disciplina del United para integrarse al Sunderland y juegue all¨ª cedido por una temporada, presiona ahora para despredenrse de Schwesteiger, entre otros, mientras afronta lleno de optimismo una temporada en la que seg¨²n dijo ayer Gary Neville est¨¢ ¡°obligado¡± a ganar la Premier tras haber invertido 185 millones en tres futbolistas.
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