¡°Es un error comparar el f¨²tbol masculino con el femenino¡±
Laura R¨¤fols y Anair Lomba, portera del Bar?a y delantera del Espanyol, analizan la evoluci¨®n de su deporte
¡°?Acaso alguien compara el tenis de Rafa Nadal con el de Carla Su¨¢rez?¡±. La pregunta ret¨®rica la suelta Laura R¨¤fols (Villafranca, 26 a?os). La portera del Barcelona conversa con Anair Lomba (Pontevedra, 28 a?os), delantera del Espanyol. Sin renegar del pasado, cuentan historias de vestuarios, recuerdan campos para el olvido, analizan t¨¢cticas e imaginan un futuro mejor. Hablan de f¨²tbol femenino. ¡°El estilo y la filosof¨ªa son los mismos. Pero no se juega igual por una cuesti¨®n de caracter¨ªsticas: no tenemos la misma fuerza y velocidad que los chicos. El error es cuando se compara el f¨²tbol masculino con el femenino. No tiene ning¨²n sentido comparar a Anair con Caicedo ni a m¨ª con Ter Stegen¡±, subraya R¨¤fols. ¡°Y eso que t¨² la tocas con los pies¡±, interviene Lomba. ¡°Y hasta mejor que Marc¡±, bromea la portera azulgrana.
No son amigas, pero se admiran y se respetan. De camino al Parque de la Ciudadela, donde se prestan para una divertida sesi¨®n de fotos, Anair y Laura se distancian unos metros del resto de la expedici¨®n y se meten en su mundo. ¡°?C¨®mo vienen en la Champions?¡±, pregunta Lomba. ¡°Bien, ahora nos toca el Twente, m¨¢s complicado de lo que parece; ?vosotras c¨®mo est¨¢is?¡±, se interesa R¨¤fols.
Aunque admiten que el f¨²tbol femenino ha crecido mucho, creen que todav¨ªa le queda mucho camino por recorrer. ¡°No puede ser que no exista un sueldo m¨ªnimo en la Liga¡±, reivindica la arquera del Bar?a. Y suma Lomba: ¡°Tambi¨¦n hay muchas deficiencias en las instalaciones: campos artificiales que son lamentables, vestuarios en los que hay cuatro sillas de playa y lavabos con agujeros en las puertas y sin agua caliente¡±. Entiende Anair que les falta visibilidad. Y Laura va un paso m¨¢s all¨¢: ¡°Me gustar¨ªa saber si realmente todas quieren ser profesionales; porque, si de verdad lo quieren, que se suban al carro¡±. Han visto de todo: chicas comiendo hamburguesas antes de un partido, jugadoras que llegan trasnochadas a los encuentros y hasta alguna futbolista que se apareci¨® con su perro en el vestuario.
En el Barcelona hace dos temporadas que est¨¢n sumergidas en el mundo profesional. Las chicas comenzaron a abrir las vitrinas del club y el club ha empezado a apoyar al equipo de Xavi Llorens. El Espanyol, en cambio, hizo el camino inverso. Y Anair conoce muy bien la historia. ¡°Mi ¨²ltimo a?o en el Bar?a fue en la primera temporada de Xavi Llorens. En ese momento el Barcelona era lo que hoy es Espanyol, un proyecto por el que nadie hab¨ªa apostado. Y cuando el Bar?a comenz¨® a hacerlo a nosotras se nos acab¨® el dinero o las ganas. Me acuerdo de ir a jugar a Sant Adri¨¤ y volverme con cinco o seis goles. Ahora es al rev¨¦s¡±, explica Lomba. El pr¨®ximo mi¨¦rcoles, en la Ciudad Deportiva Dani Jarque, el Espanyol y el Barcelona se medir¨¢n por la Liga Iberdrola. Diferencias econ¨®micas al margen, el derbi guarda la vieja disputa del cl¨¢sico del barrio.
¡°Nosotras les tenemos m¨¢s ganas a ellas, que ellas a nosotras. El a?o pasado conseguimos empatarles y la afici¨®n se volvi¨® loca. Ese d¨ªa fuimos hero¨ªnas¡±, cuenta Lomba. ¡°La gente que es culer de toda la vida, como yo, y que recuerdan cuando nos han metido muchos goles, tenemos ganas de derbi. A las nuevas les explicamos como podemos, en ingl¨¦s, lo que significa el Bar?a-Espanyol¡±, tercia R¨¤fols. Y remata Anair: ¡°Tenemos compa?eras nuevas que se sorprenden cuando ven jugar a Jenni, a Alexia o a Andressa. Yo les digo: ¡®ohhh, nada. Esto es el Bar?a y hay que ganarles¡±.
El f¨²tbol femenino no para de crecer: de 21.396 licencias en 2005 a 40.524 en 2015. R¨¤fols y Lomba han sido parte viva de su desarrollo. ¡°Nos hemos entrenado en campos de tierra, nos hemos sacrificado combinando el f¨²tbol con los estudios¡±, subraya la portera, que est¨¢ realizando el doctorado en Educaci¨®n y Deporte. ¡°No s¨¦ si las chicas de hoy llegan con las ganas que ten¨ªamos nosotras. Son muy buenas t¨¦cnicamente y t¨¢cticamente, est¨¢n mejor preparadas, pero no s¨¦ si lo viven con nuestra pasi¨®n¡±, afirma Anair, que por las ma?anas realiza el curso de t¨¦cnico, por la tarde entrena en el f¨²tbol formativo blanquiazul y por la noche se ejercita con el Femenino A. ¡°Lo que es seguro, es que ellas no tendr¨¢n que pagar el costo social que pagamos nosotras¡±, remata la azulgrana.
Sin rencor, recuerdan cuando tuvieron que regatear los prejuicios de quienes las tildaban de ¡°marimachos¡± o de que ¡°el f¨²tbol femenino no era ni f¨²tbol ni femenino¡±. ¡°Yo no entend¨ªa nada, ven¨ªan a ver un partido y nos dec¨ªan esas cosas. Yo pensaba: ¡®T¨ªo, si no te gusta vete a tu casa¡±, explica Anair. Su generaci¨®n comienza a barrer estereotipos, aunque todav¨ªa siguen luchando por hacerse un lugar en un mundo hist¨®ricamente dominado por los hombres.
¡°En el curso de entrenador, nunca te van a elegir primera para hacer un ejercicio pr¨¢ctico. Ya puedes jugar t¨² en Primera y ¨¦l en el equipo de su pueblo, con todo respeto, que lo eligen a ¨¦l¡±, mantiene Lomba. ¡°No entiendo¡±, tercia Laura; ¡°no s¨¦ qu¨¦ les molesta. No s¨¦ si creen que es su terreno, si les molesta que les ense?e una mujer¡±. ¡°Por suerte¡±, dice R¨¤fols; ¡°ya no se escuchan esas frases de que ten¨ªamos que estar en la cocina¡±. Y remata Lomba: ¡°Si eso vuelve a pasar, apaga y v¨¢monos¡±.
Un derbi con todas las de la ley
En el Barcelona hace dos temporadas que est¨¢n sumergidas en el mundo profesional. Las chicas comenzaron a abrir las vitrinas del club y el club ha empezado a apoyarles. El Espanyol hizo el camino inverso. Anair conoce bien la historia. ¡°Mi ¨²ltimo a?o en el Bar?a fue en la primera temporada de Xavi Llorens. Entonces el Barcelona era lo que hoy es Espanyol, un proyecto por el que nadie hab¨ªa apostado. Cuando el Bar?a comenz¨® a hacerlo a nosotras se nos acab¨® el dinero o las ganas. Me acuerdo de ir a Sant Adri¨¤ y volverme con cinco o seis goles. Ahora es al rev¨¦s¡±, explica Lomba. El mi¨¦rcoles, en la Ciudad Deportiva Dani Jarque, el Espanyol y el Bar?a se medir¨¢n en la Liga Iberdrola. El derbi guarda la vieja disputa del cl¨¢sico del barrio.
¡°Nosotras les tenemos m¨¢s ganas a ellas. El a?o pasado conseguimos empatarles y la afici¨®n se volvi¨® loca. Ese d¨ªa fuimos hero¨ªnas¡±, cuenta Lomba. ¡°La gente culer, como yo, y que recuerda cuando nos han metido muchos goles, tenemos ganas de derbi. A las nuevas les explicamos como podemos, en ingl¨¦s, lo que significa el Bar?a-Espanyol¡±, tercia R¨¤fols. Y remata Anair: ¡°Tenemos compa?eras nuevas que se sorprenden cuando ven jugar a Jenni, Alexia o Andressa. Yo les digo: ¡®ohhh, nada. Esto es el Bar?a y hay que ganarles¡±.
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