Dulce empate entre Espanyol y Athletic

Hay empates dulces. No importa que el marcador haya quedado trabado en cero ni que las porter¨ªas hayan pasado pr¨¢cticamente por desapercibidas. El Espanyol y el Athletic se quedaron mudos de goles en Cornell¨¤ y nadie se inmut¨®. Para los blanquiazules signific¨® plantarle cara a un hueso duro como el conjunto vasco y para los muchachos de Valverde simboliz¨® terminar entero una semana agitada en el calendario. No le import¨® a la hinchada del Espanyol que todav¨ªa no vio ganar a su equipo en el RCDE Stadium en lo que va de campa?a ni tampoco le afect¨® al Athletic que ya suma 18 a?os sin llevarse los tres puntos de la casa blanquiazul.

Al partido le cost¨® un cuarto de hora largo para arrancar. El Athletic no quiso apretar la salida del Espanyol ni morder en las pelotas divididas; los blanquiazules, acostumbrados a jugar al duelo de la paciencia, disfrutaban del respiro. La pelota cambiada de due?o, porque ni Mikel Rico ni el gigant¨®n Vesga en el Athletic, ni Javi Fuego ni Jurado en el Espanyol se animaban a tomar el mando. Entonces apareci¨® Jurado, un futbolista fino, cari?oso con el bal¨®n, que comenz¨® a hacer memoria. Despert¨® el f¨²tbol del exvolante del Watford y a su ritmo se engancharon sus compa?eros, sobre todo Piatti, un pu?al en la banda. La tuvo Hern¨¢n P¨¦rez, tras un jugad¨®n entre el argentino y gaditano; tambi¨¦n Gerard Moreno, despu¨¦s de un pase entre l¨ªneas de Javi Fuego. Pero el paraguayo se olvid¨® de pegarle a la pelota y Moreno le dio tan fuerte que lo agradecieron los ni?os de la RCDE Escola, ubicados en el Gol Cornell¨¤, en el lugar donde habitualmente el grupo de animaci¨®n La 1900, hoy en penitencia por sus reiterados enfrentamientos.

El Athletic parec¨ªa adormecido, quiz¨¢ con las piernas aturdidas despu¨¦s del traj¨ªn del jueves pasado en la Europa League. No termina de carburar cuadro rojiblanco en lo que va de campa?a, no le ayudan las rotaciones (hasta siete respecto del ¨²ltimo partido ante Osasuna) ni la timidez de algunos de sus muchachos ayer en Cornell¨¤. I?aki Williams andaba perezoso y Aduriz, empachado de goles ante Genk, no dijo ni p¨ªo en Cornell¨¤. El 20, un tipo que parece vivir una situaci¨®n similar a la de Brad Pitt en El curioso caso de Benjamin Button, cada d¨ªa parece m¨¢s joven, no pudo culminar su semana perfecta, en la que fue padre y se abroch¨® por primera vez en la Liga el brazalete de capit¨¢n, en la red.

Busc¨® agitar al Athletic Valverde a partir del banquillo, adentr¨® Muniain y Ra¨²l Garc¨ªa por Merino y Aduriz. Pero el conjunto vasco se contagi¨® del fr¨ªo en Cornell¨¤ y no pudo encontrar los puentes para atorar a la bien plantada defensa blanquiazul. Y cuando en el Espanyol se comenz¨® a apagar la pausa de Jurado, S¨¢nchez Flores apost¨® por el v¨¦rtigo. Mand¨® al indultado Caicedo (en el ¨²ltimo duelo ante el Eibar dur¨® 10 minutos en el partido por doble amonestaci¨®n y se gan¨® el reproche p¨²blico de Quique) y a Reyes al campo. Pero el partido ya estaba encallado. Ni el remate final de Gerard Moreno pudo romper el tablero.

El Athletic recupera fuerzas y el Espanyol autoestima, todos contentos.