David Beckham necesita ayuda
El sue?o del futbolista de montar un equipo de f¨²tbol en Miami se eterniza por la falta de socios para construir un estadio
El muy anunciado equipo de f¨²tbol de David Beckham en Miami empieza a ser motivo de burla por su retraso, debido a la falta de socios capitalistas. El columnista Tim Elfrink lo comparaba hace unos d¨ªas a la b¨²squeda del cuerpo de Jimmy Hoffa, un sindicalista vinculado con la mafia que desapareci¨® en 1975.
Beckham anunci¨® el proyecto en 2014. Tres a?os despu¨¦s sigue sin tener el dinero necesario para levantar el estadio. Se calcula que costar¨¢ unos 300 millones de d¨®lares. Hasta ahora no se ha concretado ninguno de los posibles socios que se han rumoreado: el magnate del Chelsea Roman Abramovich, un fondo de inversores chino o, el que m¨¢s cuerpo parece tener, los propietarios del Paris Saint Germain, el Qatar Sports Investments. La demora del exfutbolista en concretar sus negocios ha llevado a la queja p¨²blica del dirigente de la Major League Soccer, Don Garber, que ha insinuado que el pelotero rubio deber¨ªa pensar en abandonar su sue?o de esf¨¦ricos y palmeras: ¡°Yo he aprendido que no todo lo que quieres se puede hacer. A veces tienes que dar un paso atr¨¢s¡±.
El Miami Beckham United, nombre de la empresa creada para este proyecto y probablemente del equipo si al final se realiza, ya ha comprado dos tercios de las casi cuatro hect¨¢reas que ocupar¨ªa el estadio, con capacidad para 25.000 espectadores. Beckham, un hombre acostumbrado al lujo y a la primera l¨ªnea del consumo, se ha encontrado con la aterradora realidad de los alt¨ªsimos precios del suelo en Miami, uno de los m¨¢s caros de Estados Unidos. Empez¨® con idea de hacer su estadio al borde de la bah¨ªa pero luego opt¨® por hacerse un poco tierra adentro y comprar en Overtown, el tradicional barrio negro del centro de Miami, un ¨¢rea todav¨ªa marginal, actualmente azotada por un abundante consumo de hero¨ªna, pero que ha iniciado su regeneraci¨®n.
Entre el terreno y la licencia de club, la empresa ha invertido de momento unos 45 millones de d¨®lares, menos de una cuarta parte de lo que podr¨ªa costar todo, incluidos los salarios de los jugadores. ¡°Quiero crear un equipo que sea muy personal¡±, dijo en 2014 Beckham. En los diarios de Miami se suspira por los astros que podr¨ªa atraer el ingl¨¦s para jubilarse en Florida. Ibrahimovic, al que conoci¨® en el PSG, Gerard Piqu¨¦, con su esposa Shakira ligada a la industria musical de Miami, o su paisano Wayne Rooney. Antoine Griezmann ha dicho que le gustar¨ªa terminar su carrera en Miami con Beckham: ¡°?Por qu¨¦ no? Ser¨ªa genial¡±.
La empresa del deportista ingl¨¦s ya ha comprado dos tercios del terreno
La f¨®rmula m¨¢s probable para desatascar la situaci¨®n es un acuerdo con el fondo qatar¨ª, que adem¨¢s de dinero podr¨ªa aportar una valiosa asociaci¨®n de marca entre Beckham y el Paris Saint Germain. A los directivos de la Major Soccer League les interesa desdoblar en casa prestigiosas marcas del f¨²tbol europeo, como han hecho ya con el New York City FC, el equipo de David Villa y de Andrea Pirlo, creado a medias entre el Manchester City y los New York Yankees de b¨¦isbol.
La presi¨®n de la liga americana a Beckham se debe a la p¨¦rdida potencial de ingresos que implica mantener una franquicia congelada. La MLS quiere conectarse con la cultura latina de Miami, pero David Beckham no encuentra los d¨®lares suficientes y la impaciencia de los jefes del negocio llama a su puerta.
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