El Mundial de Budapest amenaza la supremac¨ªa de Estados Unidos

El medallero de los Juegos de R¨ªo situ¨® a Hungr¨ªa como primera potencia europea de la nataci¨®n con tres oros y un total de siete medallas. Este pa¨ªs de menos de diez millones de habitantes es, hist¨®ricamente, un vivero de gigantes de los deportes acu¨¢ticos, verdadera afici¨®n de su pueblo. Los Mundiales de Nataci¨®n que se celebran en Budapest desde ayer y hasta el 30 de julio rinden homenaje a esta especie de fervor h¨²ngaro. Saltos de trampol¨ªn, plataforma y gran altura; nataci¨®n sincronizada; nataci¨®n de aguas abiertas en el lago Balat¨®n; waterpolo y nataci¨®n en l¨ªnea, son las cinco disciplinas de la reuni¨®n. Se mantiene el formato de Kaz¨¢n 2015 y se prev¨¦ la cl¨¢sica regeneraci¨®n de los a?os postol¨ªmpicos. Los deportes acu¨¢ticos precisan de mayores proyecciones. A orillas del Danubio los grandes equipos comienzan a ejecutar su plan de asalto a los Juegos de 2020. La retirada de Michael Phelps, la baja de Ryan Lochte tras diez meses de sanci¨®n y el declive de Missy Franklin producen un cambio radical en el concierto internacional. Australia, Hungr¨ªa, China y Jap¨®n toman posiciones en un intento de aprovechar el presumible debilitamiento de Estados Unidos.

El alto rendimiento no es inmune a los estados de ¨¢nimo. A la euforia de los Juegos suele suceder un estado de depresi¨®n. El a?o postol¨ªmpico presenta grandes inc¨®gnitas para la mayor¨ªa. No es el caso de Mireia Belmonte, que tiene la certeza de que en Budapest prolongar¨¢ su cosecha. La nadadora de Badalona se ha propuesto avanzar hacia metas nuevas. Quiere su primer oro mundial y siente que si se encuentra fuerte puede repetir o mejorar el tiempo que le permiti¨® hacerse con el oro en R¨ªo en 200 metros mariposa. Lleva nueve meses acumulando energ¨ªa y recursos para recortar esos 2 minutos 4,84 segundos. A sus 26 a?os este prop¨®sito raya lo inconcebible. La longevidad tambi¨¦n es una novedad en la nataci¨®n. La hero¨ªna local en Budapest, Katinka Hosszu, tiene 28 a?os y se muestra inaccesible en las pruebas de estilos.

Michael Phelps, el pionero de los largos recorridos, se retir¨® con 31 haciendo una exhibici¨®n de cualidades. Su retirada en 2016 inaugura un mundo nuevo. Un mundo de dudas para los responsables de la nataci¨®n estadounidense, que deben encontrar sucesores. En la categor¨ªa femenina, Katie Ledecky es la referencia que trasciende las particularidades del estilo. Se la espera como un seguro de vida en los relevos y en todas las pruebas de nado libre salvo en el 100. Amparadas en el liderazgo de Ledecky, las esperanzas estadounidenses para Tokio recaen sobre j¨®venes como la espaldista Kathleen Baker o la velocista Mallory Comerford. En el campo masculino, en cambio, se busca un anclaje del nivel de Phelps o de Lochte. Caeleb Dressel y Ryan Murphy tienen mucho que demostrar en este aspecto. En Budapest descubrir¨¢n una competencia implacable.

Malik, el prematuro

El chino Xu Jiayu, de 21 a?os, ha estado a una cent¨¦sima del r¨¦cord del mundo de 100 espalda esta temporada (51,86s). En las pruebas de estilos y mariposa emergen figuras juveniles como el formidable h¨²ngaro Kristof Malik, que con solo 17 a?os ha nadado el 100 mariposa en 51,98 segundos y el 200 en 1m 53,79s.

El cuadro femenino promete tantas emociones como en R¨ªo, con Sarah Str?j?m obstinada en agrandar su colecci¨®n de r¨¦cords de velocidad en libre y mariposa; la australiana Kylie Masse desatada en la espalda (58,21s en 100); y un pu?ado de adolescentes japonesas de 17 a?os que nadan en tiempos adultos. Rikako Ikee en el 100 mariposa (56,89s), y Susuka Hasegawa y Hiroko Makino en 200 mariposa (2m 6,29s y 2m 6,92s respectivamente), pueden ser el punto de partida de un tsunami orientado a los Juegos de Tokio.