Alfombra blanca para el Real Madrid en Beverly Hills
El equipo blanco conecta en Estados Unidos con un p¨²blico entregado que a pesar de que muchos nunca lo han visto en directo


Luis Mendoza es de los que tienen suerte. Y dinero. Tiene una entrada para ir a ver el cl¨¢sico entre el Real Madrid y el Barcelona en Miami el pr¨®ximo 29 de julio. Le ha costado 300 d¨®lares a trav¨¦s de la pe?a madridista de Los ?ngeles, California, que se re¨²ne en el bar Tom¡¯s Urban del centro de la ciudad para ver los partidos. Para Espa?a, el encuentro de Miami es un calentamiento de la temporada. Con morbo, pero calentamiento. Para la afici¨®n de estos equipos en Estados Unidos es el partido del a?o.
Los aficionados que esperaban una ma?ana de esta semana a los jugadores a las puertas del campo de entrenamiento de la Universidad de California en Los ?ngeles no son como los de Valdebebas. Son parte de una afici¨®n global que sigue apasionadamente a los equipos grandes de las ligas europeas sin tener apenas ninguna posibilidad de verlos jugar en directo. Esos 20 segundos de gritos cuando Zidane o Bale desfilan camino del entrenamiento son el equivalente a ver una estrella de Hollywood en un estreno en Madrid. En Los ?ngeles, no es tan raro.
Una alfombra blanca se junta cada ma?ana para ver a los jugadores entrar a las 9.30 y salir unas dos horas despu¨¦s. Christopher Rodr¨ªguez, de 14 a?os, se hab¨ªa saltado unas clases el mi¨¦rcoles para conseguir la firma de Navas en la camiseta y la de Ramos en unas zapatillas. A su lado, Ricardo Espinosa, de 13, espera con la misma pasi¨®n sin ninguna posibilidad de ir a un estadio.
El Real Madrid empez¨® a realizar pretemporadas en 2010 y desde entonces ha venido todos los a?os menos 2015. Este a?o, como los anteriores, la excusa es una competici¨®n llamada International Champions Club en la que participan adem¨¢s del club blanco, el FC Barcelona, Juventus, Paris Saint Germain, Manchester United, Manchester City, Tottenham y Roma. El partido que va a recrear el cl¨¢sico en Miami es el plato fuerte. El Madrid debuta el domingo 23 ante el Manchester United, equipo de Jos¨¦ Mourinho y su rival en la Supercopa de Europa, en San Francisco. Todos estos equipos est¨¢n aqu¨ª porque el mercado estadounidense es probablemente el ¨²ltimo en crecimiento del mundo, adem¨¢s de China.
Estados Unidos es el segundo pa¨ªs donde m¨¢s gente juega al f¨²tbol (24,5 millones, por detr¨¢s de China) y el segundo con m¨¢s jugadores federados (4,2 millones, por detr¨¢s de Alemania). Pero ese mercado es alimentado principalmente por las grandes ligas europeas. La gente es del Madrid o del Barcelona, del Manchester o del Bayern. La liga estadounidense, la Major League Soccer (MLS), es solo la manera que tienen de ver f¨²tbol cada semana los aficionados.

Como Luis Ben¨ªtez, de 21 a?os. Nacido en Los ?ngeles, su padre es peruano y un apasionado del f¨²tbol que empez¨® a llevarle a partidos del Galaxy porque era lo que hab¨ªa para poder pasar una tarde de f¨²tbol con su hijo. ¡°Vamos al Galaxy porque es el equipo local, pero soy del Real Madrid¡±, dec¨ªa mientras esperaba para cazar un aut¨®grafo. Su hermano se hizo del Barcelona ¡°para llevar la contraria¡±.
El mi¨¦rcoles estaba gritando por un aut¨®grafo George Aguilar, de 27 a?os, con su hijo Jackson, de 3, en brazos. Jackson lleva un mo?o como el de Bale. Aguilar trabaja de chef en un restaurante de Fullerton, a 50 kil¨®metros de Los ?ngeles, y ha venido solo para esto. Est¨¢ esperando a cobrar la semana que viene para ver si puede llevar a su hijo mayor, de 7 a?os, a ver por primera vez al Madrid frente al Manchester en San Francisco.
La pasi¨®n por los grandes equipos est¨¢ haciendo que a su vez haya ya una generaci¨®n acostumbrada a ir al f¨²tbol con sus padres, aunque sea yendo a ver al LA Galaxy o al New York City FC. Eso ha creado ya una afici¨®n propia para estos equipos, con sus tradiciones, chavales que han crecido sintiendo los colores de equipos de la MLS, aunque su sue?o sea ver alg¨²n d¨ªa los grandes duelos espa?oles, italianos e ingleses. La liga de 2016 la vieron 25,7 millones de personas, un 8% m¨¢s que la anterior, y el 55% de esa audiencia tiene menos de 50 a?os. La venta de mercadotecnia de equipos de la MLS creci¨® un 21% entre 2015 y 2016.
En el club reconocen la importancia de este mercado y admiten que sigue en aumento. En la pretemporada de 2014, el partido entre el Real Madrid y el Manchester United en Michigan bati¨® el r¨¦cord de asistencia a un partido de f¨²tbol en Estados Unidos (109.000 espectadores), superando a la final ol¨ªmpica de 1984 en el Rose Bowl de Los ?ngeles.
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