La portuguesa In¨ºs Henriques, primera campeona mundial de 50km marcha
Las mujeres debutaban en Londres en la ¨²ltima distancia que ten¨ªan vedada. El legendario franc¨¦s Diniz consigue por fin, a los 39 a?os, su primer t¨ªtulo mundial
Ha sido una ma?ana extraordinaria en Londres. Con el sol dominical y todas las tumbonas en la hierba de Saint Jame¡¯s Park ocupadas. Tambi¨¦n ha sido una ma?ana extraordinaria en el Mall, donde se disput¨® la marcha. Sobre el asfalto rojo, la mujer, representada por In¨ºs Henriques, ha conquistado el ¨²ltimo escal¨®n para lograr la completa equidad del programa del atletismo. Y un atleta ¨²nico, Yohan Diniz, un franc¨¦s con abuela portuguesa que a los 39 a?os ha conseguido, al fin, un oro mundial, ha renunciado a un r¨¦cord del mundo y el premio aparejado de 100.000 d¨®lares a cambio de la alegr¨ªa ¨²nica de una ¨²ltima vuelta de celebraci¨®n y gozo. Todo ha ocurrido en la prueba de los 50 kil¨®metros marcha.
Ante el palacio de Buckingham, donde vive desde hace 75 a?os la misma reina, Isabel, un r¨¦cord de resistencia en el poder, una portuguesa de 39 a?os del Ribatejo, ha probado a tantos esc¨¦pticos a¨²n que f¨ªsicamente tambi¨¦n las mujeres resisten tanto o m¨¢s que los hombres. Henriques, portuguesa como Rosa Mota, una de las pioneras del marat¨®n femenino, es la primera mujer campeona del mundo de 50 kil¨®metros, todo un logro. Tard¨® en recorrerlos 4h 5m 46s (a un ritmo de 4m 54s por kil¨®metro, equivalentes a correr un marat¨®n en 3h 26m, y luego ocho kil¨®metros de propina), r¨¦cord del mundo de la prueba. Detr¨¢s de ella llegaron las chinas Hang Yin y Shinqing Yang, plata y bronce. Terminaron cuatro de las seis que comenzaron la prueba, un n¨²mero escaso de participantes debido a la negligencia de la IAAF, que solo incluy¨® la prueba que iguala a 26 el programa masculino con el femenino con unas semanas de antelaci¨®n. ¡°Si hubieran incluido los 50 kil¨®metros con tiempo, algunas espa?olas se habr¨ªan preparado y habr¨ªan participado¡±, dice Jos¨¦ Antonio Carrillo, el entrenador de Miguel ?ngel L¨®pez.
La IAAF solo lo hizo cuando la marchadora norteamericana Erin Talcott amenaz¨® con denunciarla ante los tribunales por comportamiento sexista. ¡°Las mujeres merecen las mismas oportunidades de las que gozan los hombres¡±, dice Talcott, que fue eliminada por marcha irregular en la prueba del debut. ¡°Pero ha sido fabulosos tener esta oportunidad, ser una de las primeras mujeres compitiendo en un Mundial de 50 kil¨®metros¡±.
La consecuci¨®n de la completa igualdad de g¨¦neros en el programa de atletismo ha sido un camino lento que ha necesitado casi 100 a?os para completarse. Hasta los Juegos Ol¨ªmpicos de 1928 no se admitieron mujeres en las pruebas de atletismo, y no en todas, por miedo, dec¨ªan entonces los jerarcas, a que la pr¨¢ctica de disciplinas de resistencia pusiera en peligro su capacidad de reproducir, su ¨²nico fin en el mundo. Hasta los Juegos de 1984 no se incorporaron al programa el marat¨®n y los 400 metros vallas; los 10.000m llegaron en Se¨²l 88 y los 5.000m solo en Atlanta 96. El lanzamiento de martillo y el salto con p¨¦rtiga entraron rozando el siglo XXI, en Sidney 2000, y los 3.000m obst¨¢culos, la pen¨²ltima prueba, en Pek¨ªn 2008.
Henriques recibir¨¢ 100.000 d¨®lares por su r¨¦cord mundial, cantidad a la que pr¨¢cticamente renunci¨® Diniz, militante de la Liga Comunista Revolucionaria cuando m¨¢s joven, que hab¨ªa llegado media hora antes con un tiempo de 3h 33m 11s. Por 38s no bati¨® el r¨¦cord del mundo, que ¨¦l mismo hab¨ªa fijado en 3h 32m 33s hace tres a?os, cuando en Z¨²rich gan¨® su tercer campeonato de Europa de la distancia. Festej¨® entonces su triunfo bajo la lluvia de la ciudad calvinista agitando las banderas de Francia y Portugal. ¡°Soy franco-portugu¨¦s¡±, dijo entonces, en homenaje a su abuela fallecida hac¨ªa poco. En el aristocr¨¢tico parque de Londres, m¨¢s sobrio exteriormente, solo se abroch¨® como una capa la tricolor al cuello y march¨® feliz los ¨²ltimos dos kil¨®metros. Su elecci¨®n revela, aparte de su car¨¢cter ¨²nico, la agon¨ªa que supone la prueba de marcha. La espa?ola Mar¨ªa P¨¦rez, de 21 a?os, cuenta que ella renunci¨® a luchar por el oro en los campeonatos de Europa sub 23 a cambio de poder disfrutar en los ¨²ltimos 500m de su prueba de la alegr¨ªa de haber ganado la medalla de plata. Diniz, un marchador capaz de seguir su cabeza hasta la extenuaci¨®n y el desmayo, como le ocurri¨® en los Juegos de R¨ªo.
Henriques y Diniz coincidieron codo con codo en una de las vueltas por el Mall, y el franc¨¦s, cuenta la portuguesa, le dijo lo importante que era para toda la marcha, no solo para las mujeres, que por fin ellas hicieran los 50 kil¨®metros. "Me dijo que la distancia corr¨ªa peligro en el programa ol¨ªmpico de Tokio 2020", explic¨® la campeona. "Pero que ahora, siendo una prueba disputada por los dos g¨¦neros, ser¨ªa mucho m¨¢s dif¨ªcil que la borraran. La supervivencia, al parecer, depende de las mujeres".
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