Las ausencias retratan a Espa?a el d¨ªa de su descalabro

El d¨ªa de su tremenda y fat¨ªdica derrota ante Eslovenia (72-92), Espa?a descubri¨® lo que ech¨® de menos Scariolo desde el d¨ªa que configur¨® la lista definitiva para el Eurobasket. La escuadra espa?ola a?or¨® sobre todo los r¨¦ditos defensivos de jugadores que no pudieron ser reclutados por el seleccionador, desde los lesionados Llull, Claver y Pau Ribas, hasta los que renunciaron como Rudy Fern¨¢ndez y Felipe Reyes, pasando por las aportaciones en ataque que hubieran podido brindar el propio Llull, Mirotic y Abrines, que apenas jug¨® unos minutos en el primer partido del torneo antes de tener que abandonar la selecci¨®n durante la fase de grupos en Ruman¨ªa.

Piernas y vivacidad. Al equipo espa?ol le faltaron ambas cosas para defender a un rival mucho m¨¢s entero y fresco, con un fuelle enorme. Dragic y Doncic propulsaron el juego a una velocidad a la que no pudo responder Espa?a ni en defensa ni en las transiciones. ¡°Han llevado el ritmo durante todo el partido¡±, afirm¨® Sergio Rodr¨ªguez. Cada p¨¦rdida de bal¨®n de Espa?a fue castigada con canasta por el cuadro esloveno, que sac¨® 14 puntos de esa forma, por solo 9 Espa?a. El cuadro de Igor Kokoskov tambi¨¦n sum¨® tres puntos m¨¢s que el de Scariolo en acciones de contraataque.

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La sangr¨ªa de los triples. Los n¨²meros lo dicen casi todo sobre la punter¨ªa eslovena, aunque muchos de esos triples lanzaron sin gran oposici¨®n, cuando no liberados. La defensa espa?ola se desbarat¨® ya en la transici¨®n y a menudo se embroll¨® en est¨¢tico. Ese 56% de efectividad, con un 14 de 25 desde la m¨¢xima distancia de los eslovenos, repartidos adem¨¢s entre siete jugadores, hicieron mella en la escuadra espa?ola. Sirva la comparaci¨®n: Espa?a solo encaj¨® tres triples en octavos ante Turqu¨ªa, seis en cuartos, ante Alemania, y nueve en el partido m¨¢s exigente de la fase de grupos, ante Croacia. ¡°La diferencia la han marcado los triples y ha sido sangrienta. Los han metidos liberados, muy contestados, a final de posesi¨®n, a tablero. Probablemente ese nivel de acierto ha hecho mella en nuestra moral y nos hemos precipitado¡±, convino Scariolo.

La zona fue verde. En la pintura, cerca del aro, el dominio tambi¨¦n fue esloveno. La estad¨ªstica de rebotes acab¨® en empate, 35 para cada equipo. Pero la efectividad de los eslovenos en el interior de la zona fue superior y les permiti¨® anotar 36 puntos, 8 m¨¢s que Espa?a. Muchos los anotaron de manera f¨¢cil, tras quedar desguarnecida la posici¨®n de p¨ªvot debido a las ayudas defensivas que se arriesgaban a realizar Marc y Pau o bien porque Randolph y Zagorac jugaban muy abiertos.

No sirvi¨® la te¨®rica ventaja de los p¨ªvots espa?oles. A los 25 rebotes que capturaron entre los hermanos Gasol y los Hernang¨®mez, respondieron los eslovenos gracias a las acciones de sus metr¨®nomos, Dragic y Doncic, que aportaron entre ambos 18 rebotes a su equipo y superaron en esa faceta a sus propios p¨ªvots, Vidmar y Randolph. Pau y Marc no acabaron de encontrar los espacios adecuados para combinarse y conseguir una mayor efectividad tanto en defensa como en ataque.

Sucesi¨®n de malos tiros. El ataque espa?ol no solo careci¨® de la efectividad habitual, sino que acumul¨® fallos consecutivos que permitieron que Eslovenia se escapara en el marcador. Hubo un momento especialmente cr¨ªtico. Despu¨¦s de que Espa?a saliera viva del primer tiempo (45-49), se descompuso por completo en el inicio del tercer cuarto. Fall¨® sus cinco primeros ataques y perdi¨® un bal¨®n, mientras conced¨ªa m¨¢s que nunca en defensa.

A partir de ah¨ª, Eslovenia puso la directa (55-73). Espa?a ech¨® de menos alg¨²n jugador que fuera capaz de anotar con m¨¢s continuidad especialmente desde el exterior, como hac¨ªa por ejemplo otros a?os Navarro, inadvertido este, o como consegu¨ªan, tirando o penetrando, Llull y Rudy. La alternativa de los dos bases, Ricky y Sergio Rodr¨ªguez, funcion¨® alg¨²n d¨ªa, pero no contra Eslovenia.

Banquillo de m¨¢s a menos. El banquillo espa?ol o la segunda unidad, como se les quiera llamar, hab¨ªan respondido satisfactoriamente en partidos anteriores. Sergio Rodr¨ªguez, Sastre, Oriola y los Hernang¨®mez hab¨ªan cambiado el ritmo de juego en ocasiones y hab¨ªa aportado chispa, justo de los que tambi¨¦n carecieron en esta ocasi¨®n. El engranaje de los relevos eslovenos pareci¨® estar mucho m¨¢s engrasado y el resultado fue que tambi¨¦n en las aportaciones desde los banquillos fue superior Eslovenia. Entre Prepelic, Nikolic, Zagorac y Dimec sumaron 32 puntos, siete m¨¢s que el banquillo espa?ol.