Messi se la juega en casa de Maradona
Argentina, embargada por las dudas, escasa de gol y de juego, recibe a Per¨² en un duelo vital para llegar al Mundial
Argentina se olvid¨® de jugar al f¨²tbol y, sin embargo, es prisionera de la memoria, de sus dos t¨ªtulos de campeona del mundo y del recuerdo de Maradona. Ahora mismo le puede tal ansiedad que considera m¨¢s dif¨ªcil clasificarse que ganar la pr¨®xima Copa del Mundo. As¨ª de presionada se siente la Albiceleste ante el partido que hoy le enfrenta a Per¨² (madrugada del jueves al viernes en Espa?a, 1.00, Tdp). Necesita la victoria para despu¨¦s certificar su pase en el ¨²ltimo encuentro contra Ecuador en Quito, y tampoco parece f¨¢cil, m¨¢s que nada por la altura del Ol¨ªmpico Atahualpa.
No es un dato cualquiera sino que los detalles son ahora decisivos en el intento de que el equipo recupere su mejor versi¨®n para optar a los logros que se daban por descontados con los goles de Messi. Aunque L¨ªo no es Maradona, no es casual tampoco que el encuentro se dispute en la Bombonera y no en el Monumental de River. Hoy se apuesta por el v¨¦rtigo de las gradas de Boca, necesita el equipo el calor de la hinchada, y precisa Messi de la mano de Sampaoli, el t¨¦cnico que derrot¨® a la Albiceleste cuando dirig¨ªa a Chile.
Sampaoli sabe que el ¨¦xito de los entrenadores del Bar?a se edific¨® a partir de la posici¨®n de Messi
Argentina repara en cualquier c¨¢bala, en el sortilegio m¨¢s banal, para romper el maleficio de equipo derrotista y recuperar la senda de la victoria, convencido de que el suyo no es un problema de f¨²tbol ni de jugadores y menos de seleccionadores, despu¨¦s de entregarse a t¨¦cnicos de distinta condici¨®n hasta dar con Sampaoli, entregado a la tarea de armar un equipo y encontrar el puesto ideal de Messi, si es que ambas propuestas no son lo mismo en la compleja Albiceleste.
Sampaoli se desvive con Messi y Messi solo tiene parabienes para Sampaoli. El 10 incluso atendi¨® al seleccionador en su casa de Castelldefels. El t¨¦cnico sabe que el ¨¦xito de los entrenadores del Bar?a se edific¨® a partir de la posici¨®n de Messi. Rijkaard le situ¨® como falso extremo, Guardiola descubri¨® que era un falso nueve, Luis Enrique dej¨® que manejara un tridente con Luis Su¨¢rez y Neymar y Valverde le ha acercado al arco con el escudo del 9.
M¨¢ximo realizador
Y a Messi le salen los goles por las orejas, hasta el punto de que ha completado su mejor arranque de temporada en el Bar?a: suma 11 tantos en la Liga, 15 en todas las competiciones, despu¨¦s de disputar al completo los primeros 11 partidos ¡ªsiete de Liga, dos de Supercopa y otros dos de la Champions¡ª y dos con Argentina. Absorbe el juego y los goles con una determinaci¨®n ins¨®lita, consciente de que tiene que marcar su cuota de tantos y la de Neymar.
No hay dudas de que pronto alcanzar¨¢ un nuevo reto, el de m¨¢ximo goleador de las grandes Ligas en Europa, en poder del alem¨¢n Gerd M¨¹ller, el artillero del Bayern M¨²nich que totaliz¨® 365 tantos, cinco menos de los que lleva Messi en el Barcelona. Nadie dir¨ªa que envejece, ya cumplidos los 30 a?os, y su productividad anuncia incluso la posibilidad de que la de Rusia no sea su ¨²ltima Copa del Mundo, la mejor manera quiz¨¢ de rebajar el apremio que siente por clasificarse.
La cuesti¨®n es si Messi tiene que jugar con Argentina de la misma manera que en el Bar?a para que recupere la efectividad perdida desde que anot¨® el 24 de marzo contra Chile. No marca el azulgrana y no mete un gol Argentina: el ¨²ltimo lo anot¨® en propia porter¨ªa Venezuela y la clasificaci¨®n le sit¨²a en el pen¨²ltimo lugar realizador por delante solo de Bolivia: 16 tantos frente a 14 por los 38 de Brasil. Los males son contagiosos en Argentina, sin que se sepa muy bien si es culpa de la selecci¨®n o de Messi. Ocurre con los goles, pasa con el juego, se constata en el ¨¢nimo, sin que nadie lo remedie, dependientes el uno del otro, centro de atenci¨®n de la FIFA y de su presidente Gianni Infantino, quien anda por Buenos Aires para bendecir la candidatura de Argentina, Uruguay y Paraguay para la Copa 2030.
El contexto exige un acto de rebeld¨ªa que no necesariamente corresponde a Messi
Sampaoli ha probado ya con cuatro alineaciones en dos entrenamientos y parece que optar¨¢ por situar tambi¨¦n a Messi a tiro de gol. As¨ª que volver¨ªa a ser m¨¢s delantero que asistente para seguir el guion del Bar?a. Al azulgrana ya no le tiran tantos desmarques en el Camp Nou desde la partida de Neymar y por tanto en la Albiceleste se impone tambi¨¦n una nueva formaci¨®n de la que podr¨ªa saltar Dybala, el artillero de la Juve (10 tantos) y un jugador que ha expresado tambi¨¦n su incomodidad porque en la cancha se mueve por la misma zona que Messi.
El reto de Sampaoli es armar sociedades, encontrar asociaciones, saber qui¨¦n es compatible con qui¨¦n, montar una alineaci¨®n que acabe con la ansiedad, el miedo, la adversidad y la par¨¢lisis que atenaza al colectivo desde que se falla la primera ocasi¨®n y se rinden los once, del portero hasta Messi. Todos los goleadores, futbolistas entrenados por los mejores t¨¦cnicos de Europa, se quedan mudos cuando llegan a la Albiceleste, tambi¨¦n Leo, capaz de golear a puerta cerrada en el Camp Nou. Los rivales juegan con los nervios de Argentina, la desquician, y bien que lo sabe Per¨², que aspira a ganar para volver 35 a?os despu¨¦s a un Mundial.
El contexto exige un acto de rebeld¨ªa que no necesariamente corresponde a Messi. No fue Maradona quien clasific¨® a Argentina para M¨¦xico 86 sino que los h¨¦roes contra Per¨² fueron Pasarella y Ricardo Gareca, precisamente el seleccionador hoy del rival de Argentina. Un gui?o m¨¢s en una jornada de tah¨²res, presa Argentina de su historia, con Messi en casa de Maradona.
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