El Atl¨¦tico no reconoce al Atl¨¦tico

La disposici¨®n de la zona mixta del estadio Ol¨ªmpico de Bak¨² permiti¨® a los jugadores del Atl¨¦tico elegir entre pasar por delante de c¨¢maras y micr¨®fonos o sortearlos caminando por detr¨¢s de los paneles de publicidad. Muchos de ellos optaron por recorrer el trecho hasta el autob¨²s sin que pudieran atisbarse sus rostros. Fue un desfile funerario, rumiando en silencio el traspi¨¦s que ha complicado mucho la supervivencia del club en la Liga de Campeones. Ansiedad, nervios y precipitaci¨®n fueron los t¨¦rminos empleados por Sa¨²l y God¨ªn para explicar un tropiezo que ha puesto en evidencia los problemas que agobian al Atl¨¦tico.

Sin l¨ªderes en el campo

En Bak¨² aflor¨® una alarmante falta de liderazgo en el terreno de juego que aplacara esa ansiedad. No hubo un futbolista capaz de imponerse, de hacer el partido suyo ante la imperiosa necesidad de ganar a un rival inferior. Ni los pesos pesados (God¨ªn y Gabi), ni los m¨¢s j¨®venes (Sa¨²l), ni los jugadores llamados a desequilibrar (Gait¨¢n, Carrasco, Griezmann) dieron un paso adelante convincente para templar a un equipo que disputaba un partido trascendental.

Problemas con la pelota

Desde hace tiempo, los rivales del Atl¨¦tico manejan la dificultad del equipo de Diego Pablo Simeone para mover la pelota cuando ataca en est¨¢tico. El cuerpo t¨¦cnico del Qarabag tampoco fue ajeno a ello. ¡°Sab¨ªamos que ellos tienen problemas para atacar, que no son fluidos cuando no pueden desplegar su contragolpe. Pusimos a Garayev por dentro y tapamos los pasillos interiores para que Carrasco y Gait¨¢n no recibieran c¨®modos. Tambi¨¦n esto val¨ªa para cuando Griezmann bajaba a recibir al centro del campo¡±, explica Rub¨¦n Sell¨¦s, asistente del t¨¦cnico del Qarabag, Gurban Gurbanov. Con esa f¨®rmula, el Atl¨¦tico tard¨® m¨¢s de 20 minutos en realizar su primer disparo a puerta y no pudo desplegar una salida imponente en el segundo tiempo. ¡°Esper¨¢bamos un acoso mayor en el inicio del segundo tiempo y de hecho tuvieron m¨¢s la pelota, pero les controlamos bien. Sobre Griezmann, tambi¨¦n presion¨¢bamos en su primera recepci¨®n cuando intentaban salir a la contra¡±, abunda Sell¨¦s. El Atl¨¦tico fue un equipo muy impreciso con la pelota una vez m¨¢s.

La losa del Chelsea?

De la derrota con el Chelsea, el equipo sali¨® muy tocado. Hasta ese partido, el sistema de rotaciones emprendido por Simeone hab¨ªa dado resultado. Ese duelo dej¨® la sensaci¨®n de que a algunos jugadores les faltan horas de vuelo para determinados partidos. Thomas jug¨® en Legan¨¦s, pero ya no fue titular ni ante el Barcelona ni en Bak¨². La derrota con el campe¨®n ingl¨¦s provoc¨® que ante el Barcelona el equipo se refugiara en lo que mejor sabe hacer: esperar atr¨¢s y contragolpear. Este recurso, cuando el equipo no se siente seguro, es una constante en la era Simeone. Sin resultados y con una imagen como la de Bak¨², las rotaciones tambi¨¦n cuestionan la conveniencia de no apostar fuerte por jugadores que conforman el espinazo de cualquier equipo: no hay una pareja de centrales fija ni un acompa?ante de Griezmann.