Cavani, dos veces m¨¢s de 100 goles

Hace a?os que los grandes clubes europeos esconden a sus equipos para que nadie ¡ªni los socios¡ª puedan ver al equipo entrenarse. Cuando abren las puertas suelen hacerlo unos pocos minutos y solo para exhibir ante las c¨¢maras alg¨²n ritual preconcebido con fines propagand¨ªsticos. As¨ª lo hizo el PSG el 26 de septiembre, en v¨ªsperas de recibir al Bayern en la segunda jornada de la Champions. El club parisino dej¨® entrar a las televisiones para que rodaran los instantes del calentamiento con la esperanza de que las im¨¢genes desmintieran las filtraciones que apuntaban a un clima tenso en el seno de un vestuario dividido. Consciente de la necesidad de mostrar su autoridad, Unai Emery, el entrenador, se par¨® en el centro de la escena y tendi¨® la mano a los jugadores mientras iban saliendo del camerino: Rabiot, Marquinhos, Verratti, Draxler, Alves, Neymar... Todos le dieron la mano menos Cavani. El uruguayo pas¨® de largo con la mirada perdida en el horizonte. Como si Emery fuese una pica.

Ayer, en el peque?o estadio Jean-Bouin de Agners, en uno de esos campos en los que tantas estrellas encuentran poco estimulante jugar un partido, Edinson Cavani se convirti¨® en el tercer futbolista en la historia en meter m¨¢s de 100 goles en dos grandes campeonatos europeos.

¡°?He!¡±, le grit¨® a Mbapp¨¦, ¡°?he!¡±. Corr¨ªa el minuto 30 del partido que enfren¨® al Angers con el PSG y Cavani parec¨ªa desesperado por meter un gol. Mbapp¨¦, que iba lanzado por el carril derecho, lo escuch¨® a su izquierda y en plena carrera, cuando enfrentaba al portero, le dej¨® el bal¨®n de tac¨®n. El nueve lo mand¨® a la red junto al primer palo. Media hora despu¨¦s meti¨® su segundo gol (0-4), de chanfle, como dicen en Uruguay, peg¨¢ndole con el exterior para darle velocidad y efecto, otra vez al primer palo, y enga?ando al portero. Cuando Emery lo sustituy¨® por Lucas en el minuto 73 se march¨® contrariado. El PSG ganar¨ªa por 0-5. Cavani hizo su tanto n¨²mero 101 en Ligue 1 y se qued¨® con ganas de m¨¢s.

Sumados a los 112 goles que reparti¨® entre el Palermo y el N¨¢poles, en la Liga italiana, la gesta sit¨²a a Cavani junto a Ibrahimovic e Higua¨ªn en el podio de los goleadores trashumantes m¨¢s prol¨ªficos de Europa. Ibrahimovic, que se alist¨® en clubes m¨¢s poderosos, meti¨® 70 goles en la Juve, 88 en el Inter, 61 en el Milan y 122 en el PSG; Higua¨ªn hizo 107 con el Madrid, 71 con el N¨¢poles y 30 con la Juve.

El rol de Cavani como delantero centro del PSG fue puesto en cuesti¨®n por la pol¨ªtica deportiva del club cuando este verano invirti¨® 400 millones de euros en contratar a Neymar ¡ªel jugador m¨¢s caro de todos los tiempos¡ª y Mbapp¨¦ ¡ªel talento m¨¢s rutilante que produce Francia desde Zidane¡ª. Tres meses despu¨¦s las inc¨®gnitas se disipan. Cavani es el m¨¢ximo goleador del equipo con 17 tantos y dos asistencias, por delante de Neymar (11-9) y Mbapp¨¦ (6-6). Adem¨¢s, solo se ha perdido un partido de los 16 encuentros oficiales disputados, y por causa mayor. Lo comprometi¨® la selecci¨®n en la ¨²ltima jornada de clasificaci¨®n mundialista.

Molestias de Neymar

Hay jugadores que pasan horas en el fisioterapeuta, lamentando dolores o se?alando molestias. En v¨ªsperas de los partidos inc¨®modos, o sencillamente poco relevantes, redoblan el celo por su condici¨®n f¨ªsica. La Ligue 1 es un torneo propicio a estas melancol¨ªas: las visitas a campos como el de Montpellier o el de Angers resultan desasosegantes para muchas figuras. Neymar ha estado de baja precisamente en estas salidas, alegando secuelas de golpes recibidos. El brasile?o no juega en Ligue 1 desde hace tres jornadas, cuando se hizo expulsar en Marsella. Desde entonces el PSG ha defendido el liderato con los goles (cinco) y la garra del nueve.

¡°Yo amo el f¨²tbol¡±, fue lo primero que le dijo Cavani a Emery, cuando en el verano de 2016 el entrenador lo llam¨® por tel¨¦fono para anunciarle que se har¨ªa cargo del PSG. El t¨¦cnico se qued¨® impresionado. En el negocio del f¨²tbol que un profesional hable de ¡°amor¡± para hablar de su oficio es, como poco, algo muy raro.

Cavani no es fiable si de lo que se trata es de interpretar un papel para las c¨¢maras. No se puede contar con ¨¦l para organizar fiestas de confraternizaci¨®n porque prefiere irse al campo a mirar p¨¢jaros ¡ªes aficionado a la ornitolog¨ªa¡ª o a cuidar caballos.

Edinson Cavani, de 30 a?os, es inepto para la vida social. Pero ser¨¢ el ¨²ltimo en abandonar a sus compa?eros en el campo de juego: donde m¨¢s lo necesitan.