Un rival para un nuevo rumbo
Zidane, que mantiene el optimismo pese a la desventaja en la Liga, cree que al Madrid solo le falta gol y que si vuelven a marcar hoy al Apoel empezar¨¢ a cambiar la inercia
Las derrotas contra Girona y Tottenham, el empate en el derbi y los diez puntos de diferencia respecto al Barcelona en la Liga, hacen que el Real Madrid viva cada partido como una prueba. Prueba para sus delanteros, para ver si se termina la sequ¨ªa, prueba para el estado de ¨¢nimo, para ver cu¨¢nto influyen las derrotas y las malas sensaciones. Prueba, sobre todo, para medir el pulso del equipo y ver si consigue cambiar el chip y, por fin, vuelve a parecerse al Madrid que arras¨® al Manchester United y al Barcelona en agosto en las Supercopas. La temporada empez¨® con dos trofeos, pero el efecto se desvaneci¨® en cuanto empez¨® la Liga. El equipo, aunque fuera de forma inconsciente, baj¨® el pist¨®n. Se amodorr¨® pensando que seguir¨ªa sumando puntos jugando a medio gas. Que no le har¨ªa falta m¨¢s y pod¨ªa tomarse un respiro. Y no fue as¨ª.
En el vestuario son conscientes de que dejar atr¨¢s esa inercia no ser¨¢ inmediato ni se conseguir¨¢ por arte de magia, sino que ser¨¢ un proceso lento y no uniforme. Contra el Tottenham celebraron la reacci¨®n de los ¨²ltimos diez minutos pese a la derrota, as¨ª como Zidane celebr¨® lo que consider¨® un buen partido contra el Atl¨¦tico pese al empate. En Nicosia ¡ªdonde el Madrid se cruz¨® en su hotel con el presidente egipcio Abdel Fattah El Sisi, en la capital para reunirse con su hom¨®logo local y con el primer ministro griego Alexis Tsipras para reforzar la alianza mediterr¨¢nea entre las tres naciones¡ª el equipo puede cerrar hoy (20.45, Antena 3) el pase a octavos con una victoria y clasificarse as¨ª por 15? temporada consecutiva para la siguiente ronda. Un empate le podr¨ªa valer tambi¨¦n, pero no est¨¢ el equipo para especulaciones.
Necesita golear, despejar las dudas y recuperar sensaciones y sonrisas. Sobre todo la de Cristiano Ronaldo, seco en la Liga (una diana en ocho partidos). ¡°Hemos venido aqu¨ª a ganar el partido. Y Cristiano siempre vuelve y volver¨¢ a los n¨²meros a los que nos tiene acostumbrados¡±, afirm¨® Asensio media hora antes de saltar al c¨¦sped del GSP Stadium, en una noche cerrada y con mucha humedad.
En la Champions suena otra m¨²sica para Cristiano, que lleva 16 tantos en los ¨²ltimos nueve partidos y es pichichi de esta edici¨®n con seis. Benzema, una diana en la Liga, ni se ha estrenado todav¨ªa en Europa (s¨®lo le marc¨® al Bar?a en la Supercopa de Espa?a).
Hasta ahora, Zidane ha seguido apostando por ¨¦l contra viento y marea. ¡°Karim es el primero que quiere dar m¨¢s y que sabe que puede dar m¨¢s¡ Yo estoy aqu¨ª para ayudar a todos mis jugadores, no s¨®lo a ¨¦l. Y estamos mejor todos. Falta la confianza del gol. En el juego no podemos decir que estamos mal, estamos creciendo. Hay que meter uno, hay que meter dos y luego la racha cambia. Esperemos que ma?ana sea un d¨ªa para cambiarla¡±, dijo el t¨¦cnico franc¨¦s con su optimismo de siempre.
Confianza en los recursos
Le preguntaron a Zidane qu¨¦ le hace ser siempre tan optimista. Incluso m¨¢s que sus jugadores que s¨ª tildan, como Carvajal, de ¡°considerable¡± la distancia con el Barcelona. Para Zidane siempre hay luz al final del t¨²nel. ¡°Tengo una suerte enorme, primero de estar con salud y luego de hacer lo que me apasiona. Eso me hace disfrutar. Hay otros trabajos que no son f¨¢ciles, yo siempre soy optimista, en todos los momentos y pase lo que pase: estoy convencido de los recursos que tenemos, hay momentos de la temporada, como el a?o pasado, en los que alguno puede estar preocupado. Yo no¡±, asegur¨®.
Ayer pidi¨® que el equipo salga esta noche con la misma determinaci¨®n con la que disput¨® el derbi en el Wanda. All¨ª se empez¨® a ver la mejor versi¨®n de Kroos, a Modric ir de menos a m¨¢s, a Casemiro sin apenas p¨¦rdidas, a Isco un pelda?o por encima del resto, a un Carvajal centrado y recuperado y a Marcelo ¡ªpese a los errores de entrega y las numerosas p¨¦rdidas¡ª con m¨¢s chispa que en las ¨²ltimas semanas. A ese crecimiento se aferra Zidane. Falta que la delantera recupere p¨®lvora.
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