El juego con la foto de Messi
El delantero, que maneja los tiempos de la instant¨¢nea con Bartomeu, sigue sin estampar la firma de su nuevo contrato y mantiene en alerta a la directiva del Bar?a
La vida de Messi es un ¨¢lbum de fotos, y si se quiere tambi¨¦n de v¨ªdeos, im¨¢genes que permiten recrear y visualizar silenciosamente la carrera de n¨²mero 1. El ¨²ltimo icono es la figura del delantero del Bar?a sentado en el banquillo del Juventus Stadium. Hoy habr¨¢ un nuevo retrato del argentino cuando reciba su cuarta Bota de Oro, las mismas que tiene Cristiano Ronaldo, por los 37 goles que marc¨® en la Liga 2016-2017. Y despu¨¦s, seguramente muy pronto, el rosarino reaparecer¨¢ en escena con un galard¨®n que le acreditar¨¢ como el m¨¢ximo goleador de un solo club en las mejores Ligas europeas despu¨¦s de superar a Gerd M¨¹ller (523 tantos del argentino frente a 525 del ariete del Bayern M¨²nich).
Hay una foto igualmente preparada desde hace tiempo y que, sin embargo, no hay manera de que se haga, sin que se sepa muy bien por qu¨¦, como si estuviera embargada o no saliera porque depende del propio Messi. No hay manera ni momento de que el 10 comparezca con el presidente Josep Maria Bartomeu para firmar p¨²blicamente la renovaci¨®n de su contrato hasta 2021. El acuerdo ha sido refrendado por su padre y representante legal, Jorge Messi, por su hermano Rodrigo, responsable de la fundaci¨®n, y por quienes defienden los derechos de imagen del 10. Incluso el salario de Leo se ha actualizado de acuerdo al nuevo contrato, muy superior al que vence en junio de 2018.
Messi cobra como si hubiera renovado ¡ªunos 35 millones¡ª mientras se discute la legalidad de un v¨ªnculo que no ha sido refrendado con luz y taqu¨ªgrafos por el futbolista y que le permitir¨ªa negociar con quien quiera a partir del 1 de enero de 2018, como escribi¨® Joan Manuel Serrat en este peri¨®dico. Bartomeu tranquiliz¨® al cantautor y no le da mayor importancia al encuentro con Messi de la misma manera que el rosarino relativiza la formalizaci¨®n de su permanencia en el Bar?a, tan ansiada en el club. Ambas partes recuerdan precisamente que la ¨²ltima mejora del contrato del rosarino se hizo de manera furtiva antes de que el jugador se incorporara a la selecci¨®n Albiceleste para el Mundial de Brasil. El club comunic¨® la noticia cuatro horas despu¨¦s de que se hubiera producido la firma si se atiende al reloj del presidente en el momento en que se tom¨® la instant¨¢nea en las oficinas del FC Barcelona. La foto ayud¨® entonces a responder a quienes advert¨ªan en el futbolista un motivo para plantearse su continuidad despu¨¦s de que el equipo azulgrana empatara contra el Atl¨¦tico. Messi fue suplente el mi¨¦rcoles contra la Juve y se activaron tambi¨¦n las alarmas sobre una posible lesi¨®n o malestar del 10. La coyuntura abonar¨ªa que el futbolista certifique hoy de alguna manera que sigue en el Camp Nou. El ritual de la firma, sin embargo, se dilatar¨¢ hasta que quiera Messi.
As¨ª funciona el delantero, cuyos amigos aseveran que se siente catal¨¢n despu¨¦s de llevar m¨¢s tiempo en Barcelona que en Argentina. Aparentemente no hay ning¨²n motivo pol¨ªtico, ni ciudadano ni futbol¨ªstico por el que no comparezca con Bartomeu. Messi entiende que su compromiso con el equipo, con el entrenador y con el club es inequ¨ªvoco, y por tanto no se puede dudar de su condici¨®n de barcelonista simplemente por no haber firmado p¨²blicamente el acuerdo con el presidente del Bar?a.
No es un chantaje
El aplazamiento de la r¨²brica, sin embargo, permite mantener el juego y la presi¨®n sobre la junta de Bartomeu. El presidente convirti¨® la renovaci¨®n en un asunto personal y, como tal, la firma supondr¨ªa cumplir su promesa y cerrar el caso Messi despu¨¦s de haber renovado ya a los jugadores que se supone m¨¢s cercanos al rosarino como es el caso de Luis Su¨¢rez. Y el 10 pretende que la junta atienda mientras tanto la remodelaci¨®n pendiente de la plantilla, la necesidad de negociar algunas salidas y tambi¨¦n de determinados fichajes, sobre todo para fortalecer una delantera disminuida desde la partida de Neymar.
No se trata de ning¨²n chantaje ni tampoco de un plan del vestuario, sino que a Messi y a los jugadores ya les va bien que la directiva mantenga tambi¨¦n la tensi¨®n competitiva y no se desentienda de los objetivos de competir por los distintos trofeos, especialmente la Liga y la Champions. La coyuntura favorece multitud de especulaciones y abona tambi¨¦n el protagonismo de Messi. La sensaci¨®n es que el 10 renovar¨¢ cuando y como quiera, de la misma manera que marca sus goles, a veces de forma rutinaria y en ocasiones sorprendentemente, genio y figura del Bar?a. A falta de palabras, Messi habla a trav¨¦s de sus fotos y sabe que ninguna tiene m¨¢s valor que la esperada con Bartomeu.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.