La igualdad se acerca en bicicleta
¡°Somos un equipo de 35 ciclistas, 25 chicos y 10 chicas¡±, proclama Valverde en la presentaci¨®n conjunta del Movistar
Mediado el acto, la presentaci¨®n del equipo ciclista del Movistar se transforma en una prueba pr¨¢ctica de la existencia del manspreading, que no es un invento. Mientras los hombres de la primera fila se abren bien de piernas, los dos pies firmemente apoyados en el suelo, sentados en los bancos, y ocupan buen cacho, las mujeres ciclistas, que comparten evento, cruzan las piernas para compartir el espacio con generosidad.
Es la primera vez que un club deportivo espa?ol de primer nivel mundial organiza una presentaci¨®n conjunta de sus equipos femenino y masculino, y los detalles visuales, la forma de sentarse, la fotograf¨ªa con ellas y ellos mezclados junto a los dirigentes (todos hombres) de la empresa y del equipo, el tratamiento equitativo, chocan a los habituados a lo de otros a?os.
¡°Somos un equipo de 35 ciclistas, 25 chicos y 10 chicas¡±, proclama Alejandro Valverde, el l¨ªder del sector masculino, que ocupa escenario junto a Mavi Garc¨ªa, la l¨ªder del sector femenino. Se dividen el tiempo de los discursos. ¡°Este equipo es un mensaje de igualdad para todos¡±, dice por videomensaje desde Australia Rachel Neylan, la figura extranjera de un equipo que no quiere ser solo imagen visual de diversidad porque est¨¦ de moda, sino realidad tambi¨¦n. ¡°Como defensor de la mujer, para m¨ª es un orgullo este equipo¡±, remacha Nairo Quintana, otro ciclista de los buenos.
La realidad y la igualdad, podr¨ªa decirse, se demuestran pedaleando, lo que en la pr¨¢ctica significa que las ciclistas del Movistar gozar¨¢n de muchos m¨¢s derechos y garant¨ªas laborales y salariales que la gran mayor¨ªa de las deportistas espa?olas. ¡°Es un equipo UCI [por la Uni¨®n Ciclista Internacional], y como tal, las corredoras son profesionales, cuentan con seguridad social y su contrato se deposita en la federaci¨®n, y nosotros comprobamos que todo es legal, y el equipo deposita un aval para garantizarlo¡±, explica Alejandro Mart¨ªn, secretario general de la federaci¨®n espa?ola. ¡°Y, como los hombres, pueden acogerse al decreto 1006 en caso de problemas laborales¡±. Y tambi¨¦n pertenecen al sindicato de ciclistas. ¡°El Movistar es el primer equipo femenino en Espa?a que hace todo bien¡±, dice el jefe del sindicato, Jos¨¦ Luis de Santos.
La ley del deporte espa?ola no obliga a las ligas femeninas a ser profesionales y tratar como tales a las deportistas, cuyos derechos no existen. Como denunciaron recientemente jugadoras del Aguere, de la primera divisi¨®n femenina de voleibol, se someten a contratos por obra, temporales, sin derecho a vacaciones ni a baja maternal. Como no son profesionales, se consideran contratos privados y ninguna autoridad o sindicato tiene derecho a fiscalizarlos, ni siquiera su federaci¨®n o el Consejo Superior de Deportes (CSD). ¡°Nosotros hemos trasplantado el modelo del equipo masculino al femenino, simplemente quitando alg¨²n cero en la cantidad de los contratos [entre 20.000 y 25.000 euros anuales para las chicas]¡±, dice Javier Valera, responsable financiero del equipo. ¡°Incluso nos salen m¨¢s caras las p¨®lizas de seguro de las mujeres que las de los hombres, por la posibilidad del embarazo¡±.
Mavi Garc¨ªa, de 33 a?os, trabajaba hasta hace dos en una empresa y se entrenaba en los ratos libres. Despu¨¦s decidi¨® ser ciclista profesional, pero se top¨® con que los contratos que le hac¨ªan otros equipos no cotizaban a la seguridad social. ¡°Por primera vez en el deporte cuento con todos mis derechos como trabajadora¡±, dice. ¡°Y podr¨¦ dedicarme al ciento por ciento a ser deportista profesional, y pensar solo en destacar en mis carreras preferidas, en la Bira, en el Giro¡¡±.
Feliz con la imagen conseguida, y la carne que sustenta esa piel, Carlos L¨®pez Blanco, el responsable de Telef¨®nica que impuls¨® la creaci¨®n del equipo femenino, no puede evitar resumir el momento con una frase redonda: ¡°Hemos de a?adir un nuevo valor a lo que representa el equipo¡±, dice. ¡°?ramos el trabajo en equipo, el sacrificio y el juego limpio. Ahora contamos tambi¨¦n con el valor de la diversidad¡±.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.