El Real Madrid gana al Numancia con m¨¢s penaltis que juego

Penalti a penalti ¡ªdos en Fuenlabrada y otros dos en Soria¡ª rema el Real Madrid por la Copa, torneo que no le ha seducido demasiado en los ¨²ltimos tiempos. Con Bale y Carvajal y un pelot¨®n de secundarios, el equipo blanco enfil¨® como un tiro hacia cuartos de final tras un partido sin mayor salero que comprobar la corteza del animoso Numancia. De inicio, los locales resistieron media hora, lo que tard¨® el ¨¢rbitro en sancionar un claro derribo de Carlos Guti¨¦rrez a Lucas V¨¢zquez, el mejor madridista de la jornada. Un parpadeo antes, el juez nada vio en un agarr¨®n de Theo a Dani Nieto, lo que encresp¨® a la gente de Los Pajaritos. Un chasco para la parroquia local.

El gol de Bale amortigu¨® al conjunto soriano, que de entrada procur¨® improvisar la gloria del modesto. Bien anudado delante de su portero, los muchachos de Arrasate hicieron vacilar a su imponente adversario. M¨¢xime por el costado de Theo, sin remangue para defender y sin dictado para atacar. Higinio, ariete rojillo con buen forro f¨ªsico, apur¨® a Casilla tras un desplome del inconsistente Theo.

Supeditado a pillar al Madrid a la contra, poco a poco el Numancia perdi¨® de vista a Casilla y se vio atornillado en su campo. Ceballos y Llorente, anclaron a los de Zidane en territorio ajeno y el Madrid, como era l¨®gico, gobern¨® el encuentro. Fue suficiente con un intermitente goteo de Bale, Asensio y m¨¢s frecuente de Lucas. No fue un dominio invasivo en el ¨¢rea, de hecho, apenas hubo focos para Munir, portero local, pero s¨ª efectivo para que el Real Madrid jugara en una sola direcci¨®n buena parte del choque. Es lo que pretend¨ªa.

Bale, Asensio y Mayoral estuvieron a un palmo del gol, pre¨¢mbulo del penalti ejecutado por el gal¨¦s. El Madrid daba carrete al bal¨®n, pero solo encontr¨® en Lucas a un secundario que se rebelara por encima del resto, que diera un golpe en la pasarela de la Copa. Si hace un curso la segunda unidad iba de cumbre en cumbre, esta temporada la noria de Zidane ya no gira lo mismo. En Los Pajaritos, adem¨¢s de Lucas, si acaso alguna huella de Ceballos y Llorente. El primero, muy activo en distintos sectores del terreno. El segundo interpreta con celo el librillo del medio centro. Tiene quite, buena vista y piernas para manejar al equipo. Zidane le conoce bien desde su paso por el Castilla, pero apenas le ha dado pista como relevo de Casemiro. En Lucas encontr¨® el Madrid a su elemento m¨¢s desestabilizador. Nadie encar¨® a sus rivales tanto como ¨¦l. Y buen provecho que sac¨®: dos penaltis.

Ya en el segundo acto, el segundo impulso del Numancia qued¨® abortado por la expulsi¨®n de Diamanka, que vio dos cartulinas seguidas. Al duelo le quedaba media hora y, ya ante un rival con diez, Zidane dio por concluido el periplo de Bale en Soria. Kovacic cogi¨® el testigo del brit¨¢nico y m¨¢s tarde Isco el de Ceballos. En nada se alter¨® el guion madridista. Ni con unos ni con otros tuvo fluidez, soltura. Incluso, el equipo qued¨® peor retratado ante un contrario en inferioridad. Ante la atrofia del Real, no se arrug¨® el Numancia, dispuesto a la heroica hasta con solo diez futbolistas. En la ¨²nica pifia de Llorente, ??igo P¨¦rez estuvo a punto de la campanada, pero su disparo desde medio campo en vuelo sobre Kiko Casilla rebot¨® en el larguero. A¨²n tuvo alguna otra salida el grupo de Arrasate, decidido ante las constantes desconexiones de un Madrid bastante borroso. Hasta que de nuevo Lucas se cit¨® en duelo con un zaguero local, esta vez con Medina. Segundo penalti de la noche y, ya sin Bale, Isco fue el francotirador. Borja Mayoral, que apenas hab¨ªa dado se?ales pero que anida por las ¨¢reas a lo suyo, caz¨® el tercero en el ¨²ltimo suspiro con un cabezazo. Penalti a penalti, v¨ªa libre para el Real Madrid en la Copa.