El ¡®prime time¡¯ es para Federer

Los meandros del r¨ªo Yarra describ¨ªan ayer una corriente de alegr¨ªa. All¨ª, en el amanecer veraniego de Melbourne, el sonido de un banyo y los vuelos rasantes de las aves envolv¨ªan el bienestar de los habitantes que se concentraban en los jardines de Alexandra, un verdadero marco buc¨®lico. En los rostros de todos ellos se ve¨ªa una sonrisa de oreja a oreja, la misma que se dibuj¨® en el de Roger Federer nada m¨¢s aterrizar en una ciudad (3,8 millones de habitantes) y un pa¨ªs (24) que particularmente le entusiasman. ¡°El tiempo es muy bueno y la gente aqu¨ª entiende mucho de tenis, y adem¨¢s tienen leyendas a las que siempre he admirado¡±, explicaba en la previa del torneo.

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Recordaba entonces Federer a excompa?eros como Patrick Rafter, Lleyton Hewitt e instituciones como Ken Rosewall, Roy Emerson, y sobre todo a su ¨ªdolo, el legendario Rod Laver, ganador de 11 grandes. ¡°Fue una incre¨ªble pandilla que inspir¨® a muchos jugadores actuales y uno de ellos soy yo¡±, reconoc¨ªa el de Basilea, que ayer (6-2, 7-5 y 6-4 a Richard Gasquet) sell¨® su pase a los octavos con otra victoria irreprochable, la n¨²mero 90 en el grande australiano.

¡°Me quedo con la del 2000 ante Chang, la de 2004 contra Ferrero, porque as¨ª consegu¨ª por primera vez el n¨²mero uno; tambi¨¦n el partido ante Saffin de 2005, fue ¨¦pico, y las dos finales contra Rafa: las de 2009 y la del a?o pasado¡±, enunciaba el genio suizo, al que Australia recibe y trata como a toda una eminencia. De hecho, tanto es as¨ª que estos d¨ªas se ha generado una comidilla entre aficionados, periodistas y algunos jugadores (de puertas adentro) a ra¨ªz de los programas dise?ados por la organizaci¨®n del evento, para el que Federer es sin ninguna duda el m¨¢ximo reclamo.

Ayer, el suizo firm¨® su tercera victoria en la pista Rod Laver Arena, la misma en la que bati¨® en las rondas previas a Aljaz Bedene y Jan-Lennard Struff. No se cuestiona, de ning¨²n modo, que el campe¨®n de 19 majors no deba actuar en la central, pero si se debate la proporci¨®n. Hasta ahora Federer ha jugado todos sus partidos all¨ª, en la franja nocturna de prime time, de modo que no ha tenido que soportar en la pista las fases de m¨¢ximo calor y la grada estaba a rebosar.

El criterio: espect¨¢culo y hacer caja

El criterio es sencillo, porque se sigue en todos los torneos del circuito: prima el espect¨¢culo y el hacer caja. Sin embargo, habitualmente los organizadores suelen programar meticulosamente la asignaci¨®n del marco y las sesiones (ma?ana, tarde y noche) para que todo est¨¦ compensado y haya m¨¢s o menos equilibrio entre las estrellas. Hasta ahora el gran beneficiado ha sido Federer y las otras dos grandes figuras, Rafael Nadal y Novak Djokovic, no han disfrutado del mismo cartel.

Nole, plusmarquista del torneo con seis trofeos, ha perdido estatus este a?o. "Todav¨ªa amo la Laver...", ironiz¨®

El espa?ol, n¨²mero uno actual, ha disputado tres partidos en la central y uno en la segunda pista, la Margaret Court, aunque solo uno en la hora de gala. Mientras, el serbio parece haber perdido estatus en Melbourne, donde con seis t¨ªtulos luce junto a Roy Emerson la plusmarca. De sus tres partidos ¨Cayer 6-2, 6-3 y 6-3 al espa?ol Albert Ramos¨C, dos los ha jugado en la pista dos. ¡°Esta vez tengo que ser m¨¢s humilde, porque no he jugado en los seis ¨²ltimos meses¡­¡±, ironiz¨® en el parlamento que hace el ganador tras el partido, antes de insistir con la pulla: ¡°He jugado hasta ahora dos o tres partidos en esta pista. Me encanta esta pista¡­ Quiz¨¢ pueda seguir jugando en ella, ?no? Todav¨ªa amo a la Rod Laver¡­¡±.

Preguntado por este asunto, Nadal record¨® al periodista lo siguiente, sin querer entrar en pol¨¦micas pero algo molesto por la dudosa intencionalidad del interlocutor italiano: ¡°T¨², igual que yo, sabemos que hay jugadores que juegan de d¨ªa y otros de noche. Est¨¢ la televisi¨®n, hay que vender entradas, hay jugadores que han tenido m¨¢s ¨¦xitos que otros; esa es la raz¨®n por la que hay jugadores que juegan en prime-time y otros que no. Es f¨¢cil de entender. No se trata de que sea justo o injusto¡­¡±.

Rafa y la queja contra Wimbledon

Cabe recordar que el pasado mes de julio Nadal verti¨® una dura cr¨ªtica contra la organizaci¨®n de Wimbledon. En la ¨²ltima edici¨®n del grande brit¨¢nico jug¨® dos partidos en la central y otros dos en la 1, mientras que Federer intervino siempre en La Catedral. ¡°S¨¦ que alguien tiene que jugar en la central, pero casi siempre son los mismos¡±, censur¨®; ¡°un torneo que quiere ser tan tradicional y tan especial deber¨ªa repartir ese n¨²mero de partidos en la central, no que jueguen siempre los mismos. Los partidos deber¨ªan repartirse mejor¡±.

El caso es que Federer, por derecho propio y con cinco t¨ªtulos de Australia en el bolsillo, se ha ganado el ser la excepci¨®n aqu¨ª o all¨¢, en Wimbledon o en Melbourne. Nadie lo cuestiona, porque Federer bien vale la salvedad, pero est¨¢ muy claro qui¨¦n es el amo de la pista estos d¨ªas en Melbourne Park.