Nadal irrumpe en octavos con 22 minutos de furia

En Melbourne Park, del cielo ca¨ªa fuego, y sobre el bosnio Damir Dzumhur, raci¨®n doble: por un lado el calor, en algunas fases de este viernes australiano insoportable, y por otro un castigo todav¨ªa superior por parte de Rafael Nadal, que sali¨® a la pista Margaret Court como si no hubiera comido en tres d¨ªas y devor¨® al bosnio con un instinto can¨ªbal, mordisco a mordisco. Tanto es as¨ª que para cuando se quiso dar cuenta, Dzumhur ya hab¨ªa cedido el primer parcial y el cron¨®metro marcaba solo 22 minutos. Nadal, a todo gas, en su versi¨®n m¨¢s salvaje: 6-1, 6-3 y 6-1, en 1h 50m. Y en esas, lo previsible seg¨²n el gui¨®n y lo deseado por el n¨²mero uno: ya est¨¢ en los octavos de Australia.

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¡°Ahora, el tenis es m¨¢s un negocio que un deporte¡±

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Ah¨ª se encontrar¨¢ con el menudo Diego Schwartzman, el tenista m¨¢s bajo del top-100 (1,70) y que despu¨¦s de resolver su compromiso de la tercera ronda (6-7, 6-2, 6-3 y 6-3 a Alexandr Dolgopolov) emit¨ªa una sentencia en la sala de conferencias que viene a subrayar lo complicado que puede llegar a ser medirse al n¨²mero uno actualmente: ¡°S¨¦ que el tenis lo voy a tener, pero debo recuperarme f¨ªsicamente y que se den dos cosas, porque mis opciones est¨¢n muy claras: que Rafa no tenga un buen d¨ªa y yo juegue al mil por cien; de lo contrario, no tendr¨¦ ninguna oportunidad¡±.

Que se lo pregunten si no a Dzumhur, embestido desde la primera bola en juego, cuando el sol todav¨ªa estaba presente en la ciudad. Nadal carg¨® contra ¨¦l de forma furibunda, con uno o dos puntos m¨¢s de agresividad que en sus dos partidos previos ¨Cfrente a V¨ªctor Estrella Burgos y Leonardo Mayer¨C. Fueron 22 minutos de pura furia por parte del balear, al que como bien se sabe el avance de los d¨ªas va d¨¢ndole un color bien distinto, y lo que en Australia ten¨ªa una tonalidad neutra, porque se desconoc¨ªa en qu¨¦ estado hab¨ªan llegado ¨¦l y su rodilla derecha, se transform¨® en un verde optimista.

¡°He jugado un gran primer set, a un ritmo muy alto¡±, explicaba el de Manacor a los enviados especiales espa?oles. "Es la l¨ªnea a seguir, excepto un momento en el que me he liado un poco, en el segundo set. A ¨¦l le costaba seguirme y eso es una muy buena se?al¡±, prolong¨® el de Manacor, que va cogiendo el punto y dinamizando su engranaje, y que en su comparecencia lanz¨® un doble aviso para navegantes; primero en ingl¨¦s, ¡°Here I am (aqu¨ª estoy)¡±, y despu¨¦s durante el turno de respuesta en espa?ol: ¡°Es la hora de competir¡±. Dicho esto, en boca de Nadal, debe tenerse muy presente.

Rafa est¨¢ m¨¢s cerca de Rafa

Arranc¨® el curso tarde, as¨ª que se hab¨ªa marcado unos plazos para ir confirmando su progresi¨®n. Ha ido adquiriendo br¨ªo y cada vez est¨¢ m¨¢s cerca de ese juego memorizado y autom¨¢tico que precede a la exposici¨®n del gran Nadal. En este tercer partido dio otro paso adelante y redujo a Dzumhur con 22 minutos deliciosos, cargados de p¨®lvora. ¡°Claro que estoy donde quer¨ªa estar porque estoy en la cuarta ronda y antes de haber empezado el torneo sin haber jugado un partido oficial, pues¡­ Era una situaci¨®n nueva para m¨ª y estar en octavos sin haber perdido ning¨²n set creo que es una gran noticia. Mi plazo es el d¨ªa a d¨ªa. He hecho una preparaci¨®n y la evoluci¨®n ha sido buena¡±, manifest¨®.

Contra Dzumhur, la radiograf¨ªa num¨¦rica dej¨® porcentajes positivos en todos los campos y otra vez muy pocos errores (18). Nadal, por lo tanto, est¨¢ m¨¢s cerca de s¨ª mismo. El pulso termin¨® cuando ya hab¨ªa ca¨ªdo la noche en Melbourne y el term¨®metro se hab¨ªa relajado. El domingo estar¨¢ al otro lado de la red el argentino Schwartzman, con el que Nadal se entren¨® justo antes del torneo. ¡°Le tengo aprecio, porque ante todo es buena gente y eso es m¨¢s importante que el tenis. Tiene todos los golpes y una gran seguridad en su juego; comete pocos errores y lleva muchos meses ganando muchos partido¡±, le elogi¨® el espa?ol, al que se le comienzan a ver los colmillos.

¡°S¨¦ d¨®nde estoy y cu¨¢l es mi nivel¡±. Ojo, lo dice Nadal.

¡°No es agradable ver sufrir a los jugadores¡±

El tema del d¨ªa fue el calor que azota a la ciudad desde ayer. Si el jueves se registraron 39? este viernes a mediod¨ªa ascendieron a 42?, aunque por la tarde fue reduci¨¦ndose progresivamente hasta quedarse en los 20? de la media noche. Preguntado por el asunto, Nadal volvi¨® a ser tajante.

"En mi opini¨®n, no es lo suficientemente seguro, pero este no es el ¨²nico lugar en el que ocurre; esta es la realidad. Las condiciones han sido muy, muy duras ayer y hoy. A veces esto puede llegar a ser peligroso para la salud. No es agradable ver sufrir a los jugadores sobre la pista", censur¨®.

Hoy, de nuevo, la organizaci¨®n del torneo no aplic¨® la norma de calor extremo (que permite adoptar medidas para paliar los efectos del sol) debido a que no se cumpl¨ªan estrictamente todos los par¨¢metros necesarios. Esto es, que la aguja rebase los 40? y que el ¨ªndice de humedad, viento y radiaci¨®n supere el 32,5%.

"Entendemos que competir as¨ª no es f¨¢cil", admiti¨® el director del evento, Craig Tiley, en un comunicado; "tambi¨¦n es un reto para nuestro equipo, sobre todo para los que trabajan en exteriores, incluidos los recogepelotas y los oficiales. Haremos todo lo posible por ayudar a todo aquel que no se sienta c¨®modo".

Seg¨²n los pron¨®sticos meteorol¨®gicos, el golpe de calor procedente del interior des¨¦rtico se ir¨¢ esfumando y las temperaturas de Melbourne descender¨¢n durante los pr¨®ximos d¨ªas; se situar¨¢n en una media de entre 25? y 30?.