La ¨²ltima apuesta familiar se llama Koeman

Hay dos cargos que han aguardado permanentemente a Ronald Koeman. No fue entrenador del Bar?a en 2003 porque la directiva azulgrana no quiso pagar la cl¨¢usula de rescisi¨®n del contrato que ten¨ªa con el Ajax. El presidente Joan Laporta entonces apost¨® por Frank Rijkaard y se abri¨® una v¨ªa, protegida por Txiki Begiristain y Andoni Zubizarreta, que todav¨ªa dura hoy con Ernesto Valverde. Nadie duda, sin embargo de que un d¨ªa Tint¨ªn volver¨¢ al Camp Nou para dirigir al equipo al que hizo campe¨®n de Europa en Wembley 92. Tambi¨¦n se sab¨ªa desde hace tiempo en Barcelona y en ?msterdam que Koeman ser¨ªa un d¨ªa seleccionador de Holanda.

A sus 54 a?os, y 78 veces internacional, despu¨¦s de ser despedido del Everton, Koeman firm¨® ayer como responsable del equipo oranje por cuatro a?os y con el Mundial 2022 en el punto de mira, despu¨¦s que el equipo no se clasificara ni para la Eurocopa 2016 ni para el Mundial 2018. El reto inmediato, en cualquier caso, ser¨¢ alcanzar la clasificaci¨®n para la pr¨®xima Eurocopa 2020.

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¡°Aunque el desaf¨ªo es importante, no tengo ning¨²n miedo; en caso contrario no habr¨ªa aceptado el puesto¡±, afirm¨® en su presentaci¨®n. ¡°Puede que no tengamos a los mejores futbolistas de la historia, pero estoy seguro de que podremos armar un buen equipo¡±, concluy¨® Koeman, consciente de que la generaci¨®n del Big Four ¡ªVan der Vaart, Sneijder, Van Persie y Robben¡ª, subcampeona en Sud¨¢frica 2010 y tercera en la ¨²ltima Copa del Mundo de Brasil 2014, precisa de un relevo que ahora mismo lideran futbolistas como Van Dijk (Liverpool), De Vrij (Lazio), Blind (Manchester United), Strootman (Roma), Depay (Lyon) y Cillessen (Bar?a).

Ning¨²n extranjero

Koeman siempre fue un ganador, como jugador y t¨¦cnico (Vitessem Ajax, Benfica, PSV, Valencia, Feyenoord, Southampton, Everton), y est¨¢ considerado como uno de los miembros ilustres de la familia holandesa, desorientada desde la p¨¦rdida de Johan Cruyff y el retiro de Louis van Gaal, herederos de Rinus Michels. La oranje insiste en que la soluci¨®n pasa por un t¨¦cnico de casa, preferentemente con experiencia en el extranjero y que comprenda el f¨²tbol moderno, cada vez m¨¢s f¨ªsico, requisitos que re¨²ne Koeman por su experiencia en la Premier y la Liga.

Muy recelosa con el passing-game que postula Frank de Boer, la Federaci¨®n Holandesa prefiere a Koeman a cualquier seleccionador for¨¢neo despu¨¦s que descartara pujar por Sampaoli, que parec¨ªa destinado a seguir el camino cerrado desde Happel (1977-78). El f¨²tbol holand¨¦s, al fin y al cabo, est¨¢ dirigido por un grupo de amigos que se conocen desde la adolescencia, dispuestos a reivindicar que Holanda puede ser mejor y m¨¢s competitiva que Islandia o bien Hungr¨ªa.

M¨¢s que t¨ªtulos, de la Naranja Mec¨¢nica siempre se ha esperado lecciones de f¨²tbol, ense?anzas, en el campo y en la grada desde que fue subcampeona del mundo en 1974. Ocurre que no salen ideas del cuarto de pensar desde que gan¨® la Eurocopa de 1988. El know how ha pasado a selecciones como Alemania o Espa?a.

La regresi¨®n oranje ha sido imparable: se pas¨® del juego de posici¨®n (4-3-3) a prescindir de la figura del 4 (Krol, Koeman, Frank de Boer) para defender con un doble pivote (Engelaard-De Jong) hasta amputar a los extremos y acabar con un 5-2-3 en el Mundial de Brasil. Han pasado entrenadores de distinto calado, desde Michels a Van Marwijk, por no hablar de Hiddink o Blind, hasta acabar con Advocaat. El nombramiento de Koeman suena en Europa con el mismo vigor que en su d¨ªa tuvo el de Van Basten. A falta de jugadores que guarden cierto parecido con Cruyff, Gullit o Robben, se impone regenerar un f¨²tbol en el que se inspiraron muchas selecciones despu¨¦s campeonas a partir de un seguro de vida, s¨ªntesis de las distintas selecciones, de nombre Tint¨ªn en el Bar?a.