Demb¨¦l¨¦ aparece en M¨¢laga
Los fichajes azulgrana fueron los protagonistas en la c¨®moda victoria de un Barcelona sin Leo Messi
El l¨ªder se regal¨® una victoria terap¨¦utica en casa del colista, nada sorprendente si no fuera porque no estaba Messi, y ya se sabe que el relato azulgrana en la Liga se explica a partir de la figura del 10. El partido dio para hablar bien de Demb¨¦l¨¦, para contrastar la calidad de los gestos t¨¦cnicos de Coutinho, para apreciar la versatilidad de Paulinho y para confirmar la fiabilidad de Luis Su¨¢rez. A la media hora, el barcelonismo ya preguntaba por el Chelsea, que el mi¨¦rcoles visita el Camp Nou en la vuelta de octavos de la Champions. Hab¨ªan marcado Luis Su¨¢rez y Coutinho y el M¨¢laga se hab¨ªa quedado con 10 por la expulsi¨®n de Samuel despu¨¦s de una entrada terrible a la tibia de Jordi Alba.
La ausencia del 10 azulgrana permiti¨® jugar a Demb¨¦l¨¦ mientras por el costado izquierdo se alineaban Paulinho y Coutinho, el primero como interior y el segundo en calidad de falso delantero, muy pendiente de armar el tiro y de conectar con Luis Su¨¢rez. Los fichajes azulgrana m¨¢s caros eran invitados por Valverde a marcar las diferencias en La Rosaleda. Y el juego del Bar?a se arranc¨® por las dos bandas, la de Demb¨¦l¨¦ y la de Coutinho, dispuestos a marcar diferencias a partir del desborde, el regate y el centro, o desde la recuperaci¨®n, dif¨ªcilmente con la elaboraci¨®n, menguada por la ausencia de Messi y tambi¨¦n de Iniesta. El plan de partido le sali¨® que ni pintado a Valverde a partir del gol de rigor de Luis Su¨¢rez.
Al uruguayo, pichichi por excelencia, solo le faltaba por abatir al M¨¢laga de los 20 equipos de la Liga. No perdon¨® el d¨ªa en que su amigo Messi hab¨ªa sido padre de Ciro. Luis Su¨¢rez cabece¨® sin aparente esfuerzo el dulce centro de Jordi Alba despu¨¦s de una jugada bien armada por Paulinho y Coutinho.
El segundo tanto lleg¨® por el extremo de Demb¨¦l¨¦, excelente en el desmarque, siempre bien en el juego sin bal¨®n, y por fin certero en la toma de decisiones: condujo la pelota, quebr¨® a su marcador y la puso en el ¨¢rea para que Coutinho taconeara de forma precisa y preciosa a la red del portero Roberto.
El M¨¢laga solo dio fe de vida cuando Samuel le solt¨® una patada sin venir a cuento a Jordi Alba. Ahora mismo es un equipo roto, sin pies ni cabeza, atrapado por las malas noticias, v¨ªctima de los peores resultados, un bomb¨®n para equipos escarmentados como el Barcelona.
El escarmiento azulgrana
Los azulgrana recordaban muy bien que no pierden en el campeonato desde el 8 de abril de 2017 en la Rosaleda. Todav¨ªa les escuece aquel 2-0 que les dej¨® fuera de la Liga y no olvidan tampoco el empate que cedieron hace poco en campo del Las Palmas. As¨ª que se aplicaron mucho y bien, ligeros, divertidos y atrevidos, solo condescendientes despu¨¦s del 0-2, cuando permitieron dos llegadas a En-Nesyri y Lacen que no fueron gol por la desdicha que persigue al M¨¢laga.
El Bar?a dominaba el partido y las oportunidades se suced¨ªan ante Roberto. Al mando del capit¨¢n Busquets el equipo se desplegaba muy bien con el vers¨¢til 4-3-3. La actividad de Demb¨¦l¨¦, perseverante y profundo, contrastaba con el f¨²tbol minimalista de Coutinho y la omnipresencia de Paulinho. El franc¨¦s quiere recuperar en dos partidos el tiempo perdido en meses, consciente de que hay una plaza que baila en el equipo de Valverde, la del jugador 11. No hay que descartar su candidatura para la alineaci¨®n del mi¨¦rcoles si se atienden a sus m¨¦ritos en el repleto estadio de la Rosaleda.
Muy generoso, Demb¨¦l¨¦ es un delantero honesto, no tiene truco, siempre dispuesto al desaf¨ªo, al mano a mano, al error o al acierto, como si en su cuerpo no se supiera muy bien todav¨ªa si hay un genio en potencia o un extremo de aquellos que nunca acabar¨¢ bien una jugada y ser¨¢ pitado en el Camp Nou. Coutinho es m¨¢s selectivo y decisivo, y tambi¨¦n m¨¢s pu?etero y economizador de esfuerzos pese a que no podr¨¢ jugar contra el Chelsea. Valverde apostar¨¢ de nuevo seguramente por Paulinho, recuperado en M¨¢laga despu¨¦s de unos partidos en que ha estado p¨¢lido, m¨¢s pendiente del equipo y de sus equilibrios t¨¢cticos y defensivos que de s¨ª mismo, cuando se sabe que tiene alma de delantero y goleador, en Brasil y en el Barcelona.
El partido decay¨® tanto con el tiempo que la mirada se centr¨® en los jugadores m¨¢s que en el f¨²tbol, solo animado de vez en cuando por los despistes del Bar?a y el desacierto en el tiro del M¨¢laga. A Valverde le dio tiempo incluso para probar a Andr¨¦ Gomes como lateral derecho, un puesto que ya ocup¨® la temporada pasada en la final de Copa, mientras los aficionados expresaban su malhumor o pitorreo por la manera como se desvencija el M¨¢laga. Messi debi¨® quedar contento con la rapidez y profesionalidad con la que sus compa?eros despacharon el partido de la Rosaleda. El encuentro del mi¨¦rcoles exigir¨¢ la mejor versi¨®n del 10. La Champions se presume hoy mucho m¨¢s complicada que la Liga.
A Su¨¢rez no hay rival de Primera que se le resista
Luis Su¨¢rez comenz¨® el curso destemplado, poco afinado en el remate e incluso algo torpe en el quiebro y la entrega. Sum¨® tres dianas en 11 encuentros ligueros y, aunque en el Camp Nou no se dispar¨® la rumorolog¨ªa ni las cr¨ªticas porque se sab¨ªa que su relaci¨®n con el gol es perenne, s¨ª que se mir¨® al entrenador y a su t¨¢ctica para explicar lo inexplicable, para encontrar una respuesta a su pasajera nulidad rematadora. La soluci¨®n, en cualquier caso, no estaba en la pizarra.
La realidad era que un quiste en la rodilla le tra¨ªa a maltraer porque le dol¨ªa al hacer seg¨²n qu¨¦ movimientos y sobre todo le imped¨ªa liberar la cabeza para centrarse en su trabajo dentro del ¨¢rea. Tras un par¨®n de selecciones y m¨²ltiples cuidados, Su¨¢rez descascarill¨® en noviembre al Legan¨¦s y solt¨® a pie de c¨¦sped: ¡°Era cuesti¨®n de sentirme bien¡±.
El tiempo parece haberle dado la raz¨®n porque pasados los partidos, el delantero recuper¨® su punter¨ªa y fiereza, hasta el punto de que es el segundo en la tabla del Pichichi de la Liga ¡ªsuma 21 por los 24 de Messi¡ª tras firmar 18 goles en los ¨²ltimos 16 duelos. Frente al M¨¢laga tambi¨¦n emboc¨® el bal¨®n tras atacar con la cabeza un centro medido de Jordi Alba. Uno, dos y tres besos en los dedos de la mano ¡ªpor sus hijos y mujer¡ª y festejo del pistolero. Un gol que le val¨ªa para romper la racha de dos encuentros sin ver la porter¨ªa rival, adem¨¢s de para explicar que desde anoche no hay un solo rival en Primera al que no le haya marcado.
Con 105 goles en 122 encuentros de la Liga, a Su¨¢rez solo le faltaba el M¨¢laga por batir. Ya no. Aunque es poca cosa si se compara con el Betis, su rival preferido, porque le ha hecho nueve tantos en cinco duelos; tambi¨¦n ha goleado al Deportivo (ocho en seis) y a Espanyol, Eibar y Sporting de Gij¨®n (siete). El Madrid, se queda con cinco. El Athletic, tambi¨¦n. Y as¨ª se quedar¨¢ en la pr¨®xima jornada porque el uruguayo vio una cartulina amarilla que le impedir¨¢ jugar por acumulaci¨®n.
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