De Barrika a Augusta, el viaje de Jon Rahm
El vasco es ya a los 23 a?os una estrella en Estados Unidos por su juego y su car¨¢cter
¡°?Es usted el padre de Jon Rahm?¡±, le preguntan a Edorta en Amen Corner mientras su hijo se prepara para salir del 12. ¡°?Jon es fant¨¢stico!¡±, felicitan los aficionados a un pap¨¢ orgulloso. Con solo 23 a?os, menos de dos temporadas como profesional y cuatro victorias, Jon Rahm es ya una estrella en Estados Unidos por su juego espectacular y su car¨¢cter caliente.
El viaje de Rahm, de Barrika a Augusta, es m¨¢s largo que los 6.700 kil¨®metros que separan ambas ciudades. Lo empez¨® de ni?o y no terminar¨¢ hasta que acabe cumpliendo todos sus sue?os: ganar un grande como el que persigui¨® este domingo hasta el ¨²ltimo aliento, ser el n¨²mero uno del mundo como ya ha podido ser este a?o... Sue?os de gigante para un golfista monumental. "Voy aprendiendo. Nadie gana a la primera o la segunda", afirma. Su cuarto puesto en Augusta es la confirmaci¨®n de lo que ¨¦l mismo ha pregonado. Est¨¢ listo para todo. Y est¨¢ listo ya.
¡°Jon es as¨ª de competitivo desde peque?o¡±, explica Edorta; ¡°siempre ha querido ganar. Practicaba el f¨²tbol, el esqu¨ª, el taekwondo, la pelota vasca, el golf, iba en piragua... Y en todo quer¨ªa ganar. Cuando ahora est¨¢ en casa con sus abuelos jugando a las cartas, quiere ganar. Pero todos esos sue?os de grandeza no son malos porque trabaja mucho para ello. Jon dice que quiere ganar el Masters, pero no se queda viendo la televisi¨®n. Cuando quiere algo, trabaja para conseguirlo¡±.
¡°Nadie en los ¨²ltimos a?os ha llegado al primer nivel tan r¨¢pido como Rahm. Lleg¨®, jug¨® bien, gan¨® muy r¨¢pido y sigue jugando bien¡±, dijo Jack Nicklaus en una reciente entrevista con este peri¨®dico. Palabra de un mito hacia otro que aspira a serlo. En su sexto grande como profesional, Rahm estuvo ayer por primera vez en el pulso final. Con los mejores del mundo, de t¨² a t¨². Augusta se ha volcado con ¨¦l, como si vieran en este joven vasco rasgos de aquel c¨¢ntabro testarudo al que todos amaban. Igual que EE UU e Inglaterra adoraban a Seve, ahora se han enamorado de Rahm casi m¨¢s que de Sergio Garc¨ªa.
¡°Creo que tiene algo de mi padre, s¨ª¡±, dice Miguel Ballesteros, uno de los tres hijos del genio, que estos d¨ªas en Augusta ha comprobado una vez m¨¢s el amor y respeto por Seve. El jueves pasado conoci¨® a dos leyendas, Jack Nicklaus y Gary Player ¡ªuna foto que tuite¨® su t¨ªa, Ana Bot¨ªn, la presidenta del Banco Santander y nueva socia del Augusta National¡ª, que le hablaron del carisma del doble ganador de la chaqueta verde. Tambi¨¦n conoci¨® a McIlroy y charl¨® con Rahm, a quien el pasado diciembre en Pedre?a regal¨® una figura del grip de Seve. ¡°Lo que m¨¢s me impacta de Rahm es la confianza que tiene en s¨ª mismo¡±, dec¨ªa Miguel Ballesteros, lamentando tambi¨¦n el cari?o que reciben los golfistas espa?oles en el extranjero y no tanto en su pa¨ªs. ¡°Lo noto mucho. En Espa?a no se ha valorado lo suficiente a los grandes jugadores que hemos tenido. Cuando salgo fuera me doy cuenta de lo que de verdad es mi padre¡±.
Rahm no deja de hablar de Seve, tambi¨¦n de Tiger y de Spieth. ¡°Ser¨¢ el car¨¢cter espa?ol¡±, dice el vasco sobre esa especial conexi¨®n con Augusta. Seve hubiera cumplido este lunes 61 a?os. Nadie le dijo lo que deb¨ªa so?ar, y logr¨® todo lo que quiso derribando las barreras que hiciera falta. Rahm quiere ser como ¨¦l.
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