Sergio Llull: Especial tambi¨¦n para volver
El car¨¢cter marca la carrera de cada deportista, su manera de competir, su manera de sacrificarse, su manera de buscar retos y hasta su manera de regresar tras un palo as¨ª
¡°Is come back¡±, clamaba el speaker del WiZink Center, Pedro Bonofiglio, tras el segundo triple de Sergio Llull ante el Panathinaikos. La canasta que desat¨® su cl¨¢sico grito de furia, la que sumaba su octavo punto para pasar p¨¢gina a ocho meses de pelea por volver a ser ¨¦l de antes, el de siempre. Le hab¨ªamos echado de menos. Imposible no hacerlo. Pero se hizo la luz y ah¨ª estaba el incre¨ªble Llull.
Una lesi¨®n nunca llega en buen momento, pero a ¨¦l le sobrevino cuando todo le sal¨ªa. Valiente, confiado, afortunado, dominante, iluminado¡ Era el jugador total, casi como un superh¨¦roe. Resolviendo situaciones al borde del precipicio como quien tiene un pacto con la suerte. Sin embargo, la vida del deportista se quiebra en un segundo y te deja en muletas ante una prueba de madurez y de fuerza. Ha pasado el tiempo y ahora vuelve en el momento crucial de la temporada, con tiempo para seguir siendo h¨¦roe.
La ¨¦tica de trabajo de los grandes deportistas se traslada a los momentos de soledad de la convalecencia y la recuperaci¨®n. En esos d¨ªas, te asaltan los miedos y las dudas sobre si quedar¨¢s igual y eso te lleva a radicalizar el proceso, a ponerte a r¨¦gimen, a potenciarte f¨ªsicamente, a entrenar como nunca, a cuidarte hasta el extremo. Todo por miedo a no ser el de antes. Una lesi¨®n de este calibre despierta la ansiedad ante lo desconocido. Pero se supera con exigencia y competitividad, lo que Llull lleva en los genes.
Cuando estuve lesionada de las dos rodillas durante seis meses lo primero que hice al volver fue tirar un triple para medir mi fortaleza mental. Lo met¨ª. Necesitas esa primera canasta para liberarte y para vencer los miedos. Hay d¨ªas durante el proceso en los que todo se nubla y piensas que no te queda nada por dar, pero luego te das cuenta que todo va saliendo y se va colocando. Poco a poco o de sopet¨®n, como Llull. Las canastas ganadoras est¨¢n en sus manos y en su cabeza desde hace tiempo y jugar al baloncesto, como montar en bicicleta, no se olvida nunca. El primer d¨ªa de entrenamiento con el grupo est¨¢s muerto de miedo, temeroso de cada contacto, de cada movimiento, de cada penetraci¨®n¡ Pero el ¡®ya queda menos¡¯ te da el aliento decisivo para el empuje final.
Desde el primer d¨ªa sab¨ªamos que cada minuto que estuviera en la pista querr¨ªa un minuto m¨¢s; que cada bola que cogiera, buscar¨ªa una bola m¨¢s; que cada bal¨®n decisivo que se jugara, desear¨ªa lanzar uno m¨¢s¡ Es lo l¨®gico cuando te llamas Sergio Llull y tienes esa capacidad para brillar jugando a baloncesto. Nunca es lo mismo entrenar que jugar y volver en un partido de la m¨¢xima exigencia f¨ªsica y t¨¦cnica resalta el valor del jugador y la persona. Cualquier otro se habr¨ªa probado con mayor progresividad y menos presi¨®n. Eso dice la teor¨ªa. Hay jugadores que necesitan varios partidos para entrar en competici¨®n, pero Llull solo necesit¨® unos minutos. La firmeza de Laso manteni¨¦ndole en pista tras esos fallos iniciales fruto de la ansiedad y la inactividad remarca el papel del jugador como s¨ªmbolo y referencia.
El d¨ªa que volvi¨® Paul George con Indiana anot¨® 40 puntos, pero fue en uno de los 80 partidos de liga regular de la NBA. Llull regres¨® en un duelo decisivo, en mitad de una eliminatoria intens¨ªsima, ante un equipo dur¨ªsimo f¨ªsicamente, en mitad de fieras que llevaban siete meses de competici¨®n. El car¨¢cter marca la carrera de cada deportista, su manera de competir, su manera de sacrificarse, su manera de buscar retos y hasta su manera de volver tras un palo as¨ª. Muchos tardan meses en readaptarse y otros jam¨¢s vuelven a ser los mismos. Llull es especial en todo. Tambi¨¦n en la manera de volver a ser ¨¦l. Su carisma se refleja en el cari?o recibido por todo el mundo del baloncesto. Ante el Panathinaikos super¨® esa mezcla de nervios y adrenalina, esa sensaci¨®n juvenil de sentir cada matiz como algo nuevo y de querer demostrar todo en un momento. Esprintas dos veces, las piernas se te hinchan, durante unos segundos el ox¨ªgeno no riega tu cuerpo, pero aprietas los dientes, te reenganchas te olvidas del martirio y te acuerdas de quien eres y metes dos triples decisivos. He's back. Llull est¨¢ de vuelta. Bienvenido. Todos te est¨¢bamos esperando, aunque seguramente la espera m¨¢s larga ha sido la tuya.
Two quick 3-pointers from @23Llull sends the @RMBaloncesto crowd into overdrive!#7DAYSMagicMoment pic.twitter.com/QX90MPr3oO
— Turkish Airlines EuroLeague (@EuroLeague) April 25, 2018
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