Todo lo que se puede perder antes de volver a ganar

Al Madrid en la Copa de Europa hay cosas que le han pasado hace mucho tiempo, pero muchas de esas cosas apenas le han pasado a nadie. Al volver a acercarse a algunas de las m¨¢s raras, tambi¨¦n las m¨¢s distantes, como encadenar tres coronas, los blancos, por su propia insistencia, vuelven a toparse con su distinguida colecci¨®n de fantasmas de las primaveras pasadas. El a?o pasado, en la final de la Champions de Cardiff, enfrente ten¨ªan a la Juve, rival tambi¨¦n en la final de 1998 en ?msterdam, la primera que el Madrid consegu¨ªa ganar despu¨¦s de 32 a?os de sequ¨ªa. Este a?o, el contrincante es el Liverpool, recuerdo de la ¨²ltima final perdida, en Par¨ªs, hace ya 37 a?os. La edad geol¨®gica del Madrid puede leerse en los estratos de la Copa de Europa.

Mientras los vuelven a repasar en Kiev y recorren de nuevo hacia atr¨¢s ese camino de viejas cicatrices y triunfos, los blancos se siguen acercando a tiempos cada vez m¨¢s alejados. El ¨²ltimo equipo que enlaz¨® tres t¨ªtulos seguidos, como pueden hacer este s¨¢bado los de Zidane, fue el Bayern (1974, 1975 y 1976): hace de eso ya 42 a?os. El anterior, el Ajax (1971, 1972 y 1973): hace 45. Y antes, s¨®lo de nuevo el Real (1956, 1957 y 1958, los primeros de aquellos cinco iniciales consecutivos): hace 60. Si el Madrid retrocede lo suficiente vuelve a encontrarse a s¨ª mismo.

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A veces, como este s¨¢bado por la noche, en ese trayecto encuentra la oportunidad de peque?as redenciones. El Liverpool dej¨® en 1981 a una generaci¨®n, la de los Garc¨ªa, varados sin Copa en la zona des¨¦rtica de la historia madridista. Aunque lejana, aquella final es todav¨ªa su recuerdo m¨¢s reciente de una gran derrota. El aroma del perder acompa?a siempre hacia la victoria, como en el trayecto a Kiev, trazado sobre el borde del precipicio. Como si se preparara para este encuentro con aquella vieja desilusi¨®n.

Pocas veces ha avanzado el Madrid tan cerca de despe?arse tan pronto. Este curso ha probado de forma anticipada el v¨¦rtigo de las ¨²ltimas finales: el minuto 93 de Lisboa, los penaltis de Mil¨¢n, el gol de ventaja de la Juve. Ya en la fase de grupos, corrieron grogui detr¨¢s de la pelota en Wembley, bajo un chaparr¨®n de oles de la hinchada del Tottenham, que les ganaba 3-0. Acabaron 3-1, que hasta el cl¨¢sico del Bernab¨¦u (0-3) era la peor derrota de Zidane con el Madrid. En cuartos de final, la Juve se coloc¨® a un pelo de una haza?a descomunal, tambi¨¦n en Chamart¨ªn: revivi¨® del 0-3 de la ida, igual¨® la eliminatoria, y los blancos solo escaparon en el 98, de penalti (Lisboa y Mil¨¢n juntas). De nuevo en el Bernab¨¦u, en semifinales, el Bayern tambi¨¦n les provoc¨® el terror de perder con un formidable bombardeo hasta el ¨²ltimo instante.

El Madrid llega a su reencuentro con el Liverpool, la ¨²ltima gran derrota, habiendo perdido todo lo que pod¨ªa perder (la Liga, la Copa, los sustos) sin dejar de poder ganar, rumbo de nuevo al pasado.