El abatimiento contagioso de Messi

En Brasil la rivalidad con Argentina es en color. Antes de que la Albiceleste levantara su primera Copa en el 78, la Canarinha miraba con cierto desd¨¦n a sus vecinos, fuertes en Am¨¦rica, d¨¦biles en el mundo. Entonces, apareci¨® C¨¦sar Luis Menotti para profesionalizar un juego siempre m¨¢s pendiente del talento que del trabajo. Con El Flaco como piedra angular, el hilo conductor lo marcaron los entrenadores, se llamen Bilardo, Basile, Pasarella, Bielsa o P¨¦kerman. Hasta un sublime, aunque con mal genio, Maradona se puso al servicio de Bilardo para volver a colocar a Argentina en el techo del mundo en M¨¦xico 86. La Asociaci¨®n del F¨²tbol Argentino (AFA) se desfigur¨® y la selecci¨®n qued¨® a merced de un futbolista magn¨ªfico como Messi, capaz de llevar a Argentina a tres finales consecutivas, sin m¨¢s armas que un pie izquierdo sin precedentes y una necesidad (quiz¨¢ de div¨¢n) por ser reconocido en su pa¨ªs, la casa que le hab¨ªa cerrado las puertas para completar su formaci¨®n en Barcelona.

Hace tiempo que Argentina vive pendiente del f¨²tbol y del estado de ¨¢nimo de Messi. Y, cuando se apaga el 10, brillan todas las carencias de un equipo, sobre todo de una instituci¨®n. No es f¨¢cil interpretar los silencios del rosarino, Guardiola lo consigui¨®, tambi¨¦n el Tridente. El t¨¦cnico de Santpedor supo leer su mente; Luis Su¨¢rez y Neymar, su f¨²tbol. En Argentina, en cambio, Messi no tiene quien lo cuide, mucho menos quien lo lleve a lo m¨¢s alto del podio. Por el banquillo de la Albiceleste pasaron Basile, Maradona, Batista, Sabella, Martino, Bauza y Sampaoli. Siete entrenadores en los ¨²ltimos 10 a?os. El grupo es el mismo, la idea de juego salta de una banda a otra. La relaci¨®n entre el vestuario y sus distintos cuerpos t¨¦cnicos siempre fue delicada. La ¨²ltima se?al fue la del Kun Ag¨¹ero en la zona mixta de Nizhni N¨®vgorod. ¡°Sampaoli puede decir lo que quiera¡±, respondi¨® el delantero del City, cuando le dijeron que el t¨¦cnico hab¨ªa hablado de un proyecto no interpretado por los jugadores.

Ag¨¹ero no es un tipo cualquiera en la selecci¨®n argentina. Hace m¨¢s de 10 a?os que Messi y el Kun comparten habitaci¨®n en cada concentraci¨®n de la Albiceleste. ¡°Maradona respetaba a tres o cuatro jugadores con mucha personalidad en su selecci¨®n, Messi solo al Kun. Y todos sabemos como es Ag¨¹ero¡±, sostienen desde la AFA. Entonces, la rabieta del punta del cuadro de Manchester no es otra cosa que un nuevo pulso entre Sampaoli y los pesos pesados del grupo. Los jugadores ya le hab¨ªan pedido cambiar el sistema, tambi¨¦n jugar con Lucas Biglia en el estreno en Rusia ante Islandia.

En la pizarra ante el cuadro vikingo ganaron los jugadores; frente a Croacia el cuerpo t¨¦cnico. Siempre perdi¨® Argentina. No pas¨® del empate ante la debutante Islandia y este jueves se comi¨® un cachetazo tremendo frente a Modric y compa?¨ªa, dif¨ªcil de digerir para una selecci¨®n del pedigr¨ª de la Albiceleste. En cualquier caso, con calcado an¨¢lisis, Messi pas¨® de omnipresente a invisible. ¡°En Argentina se utiliza un lenguaje: ¡®D¨¢rsela a Messi¡¯. Leo es m¨¢gico, pero los magos tambi¨¦n necesitan un escenario. Si Messi jugara en el Alav¨¦s no s¨¦ si saldr¨ªa campe¨®n. Para ganar necesitas a Messi, pero tambi¨¦n a Busquets, Iniesta, Piqu¨¦... En definitiva, a buenos jugadores¡±, opina Menotti. ¡°El plan A de Sampaoli era darle el bal¨®n a Messi, no hab¨ªa plan B¡±, tercia Ardiles. Y Sampaoli mir¨® tanto a Messi que se olvid¨® del equipo. ¡°Nos cost¨® mucho hacerle llegar la pelota a Leo¡±, resumi¨® el entrenador.

En los mundiales con Argentina, Messi tocaba una media de 72,2 pelotas por partido. Contra Islandia conect¨® con el bal¨®n en 115 ocasiones, frente a Croacia, 49. Desde que fall¨® el penalti ante el cuadro vikingo, el 10 cay¨® en las redes del des¨¢nimo, desconectado en el campo, melanc¨®lico en la concentraci¨®n. El pasado 17 de junio, pas¨® en soledad la celebraci¨®n del d¨ªa del padre en el centro de operaciones de Argentina en Bronnitsy. Dos d¨ªas m¨¢s tarde, su mujer Antonela intent¨® borrar cualquier tipo de especulaci¨®n. ¡°Siempre juntos y con vos m¨¢s que nunca¡±, public¨® en Instagram. Si el ambiente era gris en el n¨²cleo duro de la Albiceleste, tras la debacle ante Croacia qued¨® negro.

Argentina lleg¨® este viernes por la ma?ana a Bronnitsy, algunos cenaron, otros se fueron sin escala a sus habitaciones, nadie habl¨®. Por la tarde, Sampaoli adelant¨® el entrenamiento una hora para que el grupo pudiera ver todo junto el partido entre Nigeria e Islandia, vital para las aspiraciones de la Albiceleste en el grupo D. Divididos entre ellos (hay una grieta entre los j¨®venes y los mayores), en tensi¨®n con el cuerpo t¨¦cnico, Argentina todav¨ªa tiene una peque?a esperanza de pasar a los octavos de final en Rusia.