Suecia golea a M¨¦xico y ambas selecciones avanzan a octavos
El conjunto escandinavo, con goles de Augustinson, Granqvist y Edson ?lvarez en propia puerta, acaba primero de grupo
Suecia no se conform¨® con dejar a Italia mirando el Mundial de Rusia por televisi¨®n, ahora tambi¨¦n le tir¨® un jarro de agua fr¨ªa a la ilusi¨®n mexicana y, de paso, mand¨® a la Mannschaft de regreso a Alemania. El equipo de Janne Andersson respet¨® su estilo; el de Juan Carlos Osorio, no. M¨¦xico especul¨®. Suecia arriesg¨®. Una goleada con autoridad para subirse a lo m¨¢s alto del grupo F. Jug¨® con fuego M¨¦xico en Ekaterimburgo, demasiado pendiente de cuidar el empate, solo salvado por la sorprendente Corea del Sur que bati¨® a Alemania en Kaz¨¢n. ?
Se acab¨® el romperse la cabeza para Osorio. El t¨¦cnico que nunca hab¨ªa repetido una alienaci¨®n en sus 51 partidos en el banquillo del Tri -¡°con las rotaciones, los jugadores nos obligan a pensar a los entrenadores¡±, sol¨ªa decir el preparador colombiano-, M¨¦xico salt¨® al campo con el mismo once que venci¨® a Corea del Sur en la segunda jornada del grupo. Mismo molde, distinta receta. Cambi¨® M¨¦xico. No fue el equipo que maniat¨® a Alemania ni el que gobern¨® a los coreanos. M¨¢s pendiente de la clasificaci¨®n que del juego, el Tri se dej¨® atorar por Suecia, luchadora y vertical, pero escasa de punter¨ªa. A Suecia no le quedaba otra alternativa que despertar su vocaci¨®n ofensiva, efectiva frente a Corea, pero err¨¢tica contra Alemania. Mismo problema, tambi¨¦n ante M¨¦xico. Y, cuando acertaban entre los tres postes, emerg¨ªa la figura de un el¨¢stico Memo Ochoa, siempre presente cuando M¨¦xico lo necesita.
A la selecci¨®n amarilla no la ayudaba ni el tiro de sus delanteros ni las decisiones del ¨¢rbitro. Ya qued¨® claro, no importa si est¨¢ o no el VAR, si el ¨¢rbitro no quiere ver un penalti no lo ver¨¢. Lo que parec¨ªa una mano clara de Chicharito en el ¨¢rea de M¨¦xico (al menos, para lo suecos), el argentino Pitana la interpret¨® como sin intenci¨®n. Respir¨® la selecci¨®n Osorio. Sin embargo, le costaba encontrar los puentes para escapar del asedio sueco. La f¨®rmula de los muchachos de Janne Andersson eran los centros en busca de sus torres, Toivonen y Berg. La de M¨¦xico esperar un contra para aprovechar la clarividencia de Vela, la velocidad de Lozano o el olfato goleador Chicharito. Los tres apagados frente a los escandinavos. Entonces, el Tri qued¨® rendido sin furia en ataque ni solidez en la zaga.
Tan testarudos se pusieron los escandinavos con abrir el campo, para despu¨¦s intentar el centro cruzado, que finalmente encontraron a Augustinsson. El lateral apreci¨® por sorpresa en el ¨¢rea de M¨¦xico para batir a Ochoa. Fue entonces, cuando se invirtieron los roles en Ekaterimburgo. A M¨¦xico ya le incomodaba el marcador. Y, cu¨¢nto m¨¢s arriesgaba, m¨¢s se agrandaba Suecia. Con espacios, los suecos sal¨ªan disparados en busca de Ochoa. En una de esas, Berg se plant¨® frente a Ochoa y Herrera, seg¨²n el ¨¢rbitro, lo par¨® con falta. El colegiado ni consult¨® con el VAR, Granqvist no dud¨® en reventar la porter¨ªa del Tri. Se desdibuj¨® M¨¦xico en Ekaterimburgo. Una sombra, que termin¨® condenada por un gol en propia puerta de Edson ?lvarez, que calcul¨® mal en un despeje pifi¨® en al despeje.
Suecia era la Suecia que dej¨® afuera a Italia de Rusia, M¨¦xico no era el M¨¦xico que sorprendi¨® a la campeona del mundo en su estreno en Mosc¨². Mientras los suecos ya ten¨ªan su boleto a octavos sellado, la vida del Tri hab¨ªa quedado a merced de la resistencia coreana en Kaz¨¢n. Y antes de que el ¨¢rbitro se?al¨® el final, celebr¨® M¨¦xico. Corea del Sur hundi¨® a Alemania. Y respir¨® M¨¦xico.
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