Marat¨®n de Ciudad de M¨¦xico: en sus marcas, listos... ?selfi!

El Marat¨®n de Ciudad de M¨¦xico celebr¨® su edici¨®n n¨²mero XXXVI en el que 32.645 corrieron por gran parte de la ruta ol¨ªmpica para celebrar los 50 a?os de los Juegos Ol¨ªmpicos M¨¦xico 1968. Este a?o, el marat¨®n se ha planteado el reto de obtener la etiqueta Oro de la Asociaci¨®n Internacional de Federaciones de Atletismo (IAAF), para lograrlo es necesaria la medici¨®n del trayecto, la protecci¨®n vial, el cronometraje electr¨®nico con chip, servicios m¨¦dicos, puestos de hidrataci¨®n en ruta, difusi¨®n medi¨¢tica con transmisi¨®n en vivo en todos los continentes, nivel competitivo de atletas certificados y pruebas antidoping.

Horacio de la Vega, director de Indeporte, no ve lejana la posibilidad de que la competici¨®n obtenga la m¨¢xima etiqueta otorgada por la IAAF, pues se ha cumplido con los requisitos. Aunque en esta edici¨®n la intenci¨®n era llegar a los 42.195 registros, solo se inscribieron 38,336, de los cuales? 29,555 iniciaron la competencia y 32,645 cruzaron la meta.?

El Marat¨®n de Ciudad de M¨¦xico es el m¨¢s importante en Am¨¦rica Latina y el cuarto de todo el continente americano. En 2017, pas¨® de ser el 13¡ã al noveno en el ranking mundial en cuanto a nuevo de corredores se refiere. Tambi¨¦n es el de m¨¢s r¨¢pido crecimiento en los ¨²ltimos cinco a?os a escala global.

Pero no todos sus r¨¦cords son positivos. La competici¨®n tambi¨¦n es la que m¨¢s tramposos suma: corredores cruzan la meta a¨²n sin completar el recorrido. En esta edici¨®n, hubo 2,011 personas que no finalizaron los 42 kil¨®metros de la competencia y 3,090 competidores fueron descalificados por irregularidades en su recorrido, seg¨²n datos oficiales. Una?investigaci¨®n realizada el a?o pasado por Marathon Investigation, un sitio que usa el an¨¢lisis de datos para ¡°mantener a los tramposos fuera del Marat¨®n de Boston (EE UU) y de los podios del mundo¡±, el 36% de los participantes analizados (27.873 corredores en total) hiceron trampa. Es decir, 10.046 no registraron su paso en por lo menos uno de los 11 puntos de revisi¨®n distribuidos a lo largo del recorrido. Las p¨¢ginas de Facebook ¡°Cazatramposos Marat¨®n CDMX 2017¡± y ¡°Ya se cansaron¡±, exhibieron a los corredores trav¨¦s de la publicaci¨®n de los registros de tiempos, evidenciando c¨®mo, algunos de ellos, usaban el suburbano para avanzar kil¨®metros enteros acomodados en un asiento y luego simulaban llegar a la meta solo por la medalla y la selfi.

En la edici¨®n pasada, el comit¨¦ organizador del Marat¨®n de Ciudad de M¨¦xico inform¨® la descalificaci¨®n de 5.800 corredores. De ellos, algo m¨¢s de 1.400 tomaron la salida pero no lograron terminar, mientras que casi 4.400 cruzaron la meta sin cubrir todo el recorrido. Un total de 691 corredores que cruzaron la meta sin cubrir la distancia contaban con el par¨¢metro de marcas para competir en el Marat¨®n de Boston, pero fueron reportados al comit¨¦ organizador de ese evento para que no pudieran participar en 2018. La presencia de corredores tramposos no es nueva, y el n¨²mero de competidores descalificados se redujo casi un 50 %, respecto a 2017; de hecho, los que s¨ª finalizaron la prueba este a?o fueron 27.544, seg¨²n datos del Instituto del Deporte de la Ciudad de M¨¦xico (Indeporte).

¡°Hay muchos corredores que salen con doble n¨²mero, otros que entregan n¨²meros a mitad de la carrera, porque t¨² lo vas viendo, t¨² est¨¢s desde la salida corriendo durante toda la ruta y ves todo este tipo de cosas. Personalmente, creo que si te vas a meter a un Marat¨®n est¨¢s expuesto a que te lesiones o que la mente juegue en tu contra, sobre todo en estas competencias tan largas; cuando pasa eso, lo ideal es salirse y pensar que en el siguiente marat¨®n te ir¨¢ mejor. Pero, el hecho de que te saltes 20 kil¨®metros y quieras ir por tu medalla es como enga?arte a ti mismo, porque no te la mereces¡±, dice Osvaldo Torres, de 38 a?os, corredor desde hace 11 que ha participado en 5 maratones.

?Qu¨¦ es un marat¨®n hoy? Por un lado, sigue siendo un deporte, con la disciplina, los tiempos y las reglas que implica cualquier otro. Pero tambi¨¦n, el marat¨®n est¨¢ siendo empujado por las marcas que desarrollaron una tribu de consumidores llamada runners. Ya no solo significa deporte, sino un estilo de vida, de autocuidado y pertenencia. Los runners no solamente corren por salud.

¡°Yo identificar¨ªa tres grupos de corredores: los que compiten porque pueden, porque es su estilo de vida y han logrado correr distancias largas por medio de la preparaci¨®n a lo largo de a?os; luego, los que saben del tema, es decir, que conocen de la cultura del running, de c¨®mo prepararse, del calzado correcto, etc¨¦tera, pero que no necesariamente son profesionales; y, por ¨²ltimo, los que quieren, que les gusta la idea de correr un marat¨®n (pero no necesariamente pueden, ni saben). Este ¨²ltimo, que yo creo es el grupo interesante, saben que no pueden, pero lo que les interesa es la experiencia. Vivir la experiencia de un marat¨®n¡±, cuenta a EL PA?S el Doctor en Sociolog¨ªa por la Universidad An¨¢huac, Alberto Borbolla Albores.

¡°La verdad yo no he hecho completo el Marat¨®n de la Ciudad de M¨¦xico, que es mi meta tambi¨¦n, pero es una ruta muy retadora, en otras ciudades todo es plano, a nivel del mar, la ciudad est¨¢ muy contaminada, es decir, son muchos factores, que hacen que la ciudad sea un reto enorme, entonces, lo tomamos de enteramiento, para pertenecer a esta fiesta de corredores y de energ¨ªa hermosa. Yo, y muchos de mis amigos, tenemos otro marat¨®n en puerta y es un tiempo de preparaci¨®n para los (World Marathon) Majors y usamos la ruta para entrenar. Habr¨¢ quien se ha hecho trampa a s¨ª mismo y a la ciudad y eso s¨ª me parece incorrecto y fuera de lugar¡±, dice Roxana Valle, corredora desde hace 10 a?os.

Seg¨²n Alejandro Llantada, consultor y capacitador en Ciencias de la Persuasi¨®n en The Persuasion Institute of The Americas, la trampa ocurre cuando ¡°una persona act¨²a para obtener un beneficio personal, que es a corto plazo, pero que a la larga lleva a todo ese grupo al que pertenecen a tener p¨¦rdidas en su conjunto¡±. ¡°Es como si se estuvieran en un dilema, en el que no hubiera opci¨®n. El dilema es: hacer o no trampa. ?Por qu¨¦ voy a hacer trampa? Porque el de enfrente est¨¢ haciendo trampa, porque yo s¨¦ que la mayor¨ªa lo hace. Luego, entonces, yo tambi¨¦n la voy a hacer. Si no, no me voy a beneficiar. No es un fen¨®meno personal, es un fen¨®meno social. Como la corrupci¨®n¡±.

¡°Terminar el Marat¨®n es m¨¢s importante que correrlo completo porque, en su mundo, es primordial completar la experiencia. Este grupo, m¨¢s pegado a las redes sociales, apunta a una nueva modalidad de trampa, que tiene que ver con una forma de desaf¨ªo y de juego. Aqu¨ª la trampa es algo novedoso, ya no es algo sancionable, al contrario, es algo atractivo. De acuerdo con los valores de este grupo, la sanci¨®n tiene que ver con que no innoves o no desaf¨ªes el sistema, en c¨®mo hacer de las reglas lo que quieran, interactuando con ellas y modific¨¢ndolas. Lo interesante es encontrar las maneras en las que pueden hacer su camino, eso es algo muy validado en el mundo online¡±, explica el Doctor en Sociolog¨ªa Alberto Borbolla.

¡°Hay personas que quieren sentir la energ¨ªa del Marat¨®n, otras tantas, y tengo muchos conocidos que as¨ª lo han hecho, quieren acompa?ar a alguien, imagina que su pap¨¢ va intentar correr 42 kil¨®metros, qu¨¦ orgullo poder compartir unos kil¨®metros con esa persona. Yo creo que no hay que satanizarlo y decir que est¨¢n haciendo trampa. Tambi¨¦n yo, en lo personal, hay veces que he sentido que ya no puedo acabar una carrera; yo empec¨¦ a correr inspirado en apoyar a mi esposa en una carrera y vi lo que estaba pasando, vi esa energ¨ªa y dije: ¡°yo quiero ser parte de esto¡± y as¨ª empec¨¦. Yo me imagino que habr¨¢ muchas personas que decidieron correr una distancia m¨¢s corta al marat¨®n completo y el d¨ªa de ma?ana van a correr su primer marat¨®n derivado de lo que vivieron el a?o pasado. Los que acaban y los que no acaban, tienen su m¨¦rito¡±, opina Alfredo Garc¨ªa, maratonista desde 2013.

El World Marathon Majors es una competici¨®n internacional que agrupa, desde 2006, los maratones m¨¢s importantes del mundo: Nueva York, Chicago, Berl¨ªn, Londres, Tokio y Boston. En el Marat¨®n de Ciudad de M¨¦xico, cualquier persona que pague por su n¨²mero puede competir, de manera flexible y accesible. En contraste, para el Marat¨®n de Boston, por ejemplo, los corredores tienen que haber corrido otros maratones con tiempos determinados para calificar y poder inscribirte. En Nueva York se registran unas 50 mil personas y pr¨¢cticamente el 100% completan la carrera.

¡°Hay una escasa cultura de correr en M¨¦xico y no hay respeto; si no est¨¢s relacionado con la cultura sueles criticar el Marat¨®n, porque ya te cerraron la calle o est¨¢n afectando la circulaci¨®n. Hay mucha gente que le molesta el Marat¨®n de la Ciudad de M¨¦xico, en cambio, para Nueva York es una fiesta y se presume de ella; para los neoyorquinos los maratonistas son h¨¦roes y aqu¨ª en la ciudad no es as¨ª, porque est¨¢ ls cultura de ¡°yo me met¨ª 15 kil¨®metros, yo me met¨ª 20 kil¨®metros¡±, otros corren para entrenar para otros maratones o se meten en bloques que no corresponden a su tiempo, es decir, no lo toman en serio, y luego, los organizadores acabaron con la seriedad de la competencia en el momento en el que dicen: tienen 9 horas para terminar¡±, opina Javier Rodr¨ªguez, que corre desde hace m¨¢s de 4 a?os y ya ha corrido 8 maratones en M¨¦xico, Par¨ªs y Estados Unidos.

¡°El Marat¨®n en M¨¦xico funciona en la informalidad porque M¨¦xico funciona en la informalidad, solo hace falta ver el comercio, la educaci¨®n, la pobreza. El Marat¨®n no es tan r¨ªgido como el de Boston porque ¨¦ste s¨ª est¨¢ anclado en la disciplina, en la profesionalizaci¨®n, mientras que el de M¨¦xico es m¨¢s flexible y accesible a todos. Las expresiones de trampa en M¨¦xico, respecto a otros maratones prestigiosos, es m¨¢s visible, porque hay m¨¢s diversidad de grupos y distintos niveles de corredores¡±, dice Alberto Borbolla.

Desde 2013 se ha entregado a los participantes una medalla en forma de letra para completar la palabra ¡°M¡±-¡°E¡±-¡°X¡±-¡°I¡±-¡°C¡±-¡°O¡±, las cuales se convirtieron para muchos corredores en una pasi¨®n. Este a?o, toc¨® el turno de la letra ¡°O¡± de Ol¨ªmpico, para conmemorar los 50 a?os de los Juegos Ol¨ªmpicos. Muchos corredores fueron por la ¨²ltima letra de la colecci¨®n. Algunos de ellos, quiz¨¢, solo para tomarse la selfi.