Wembley no da tregua a Espa?a
¡°Me gusta el Drag¨®n Khan¡±, dice Luis Enrique, que se reconoce ¡°encantado¡± con Ramos ante la inminencia de un duelo clave con Inglaterra sin apenas preparaci¨®n
El gigantesco patrimonio que reuni¨® Espa?a durante el periodo 2008-2012 se agota. Al cabo de dos Mundiales y una Eurocopa con resultados p¨¦simos y juego decadente, la empresa que aborda Luis Enrique esta noche en Wembley ante Inglaterra en su estreno en la Liga de Naciones (20.45 horas, TVE1) tiene algo de ¨²ltima oportunidad de regeneraci¨®n. De momento, hay material. Todav¨ªa hay clavos a los que aferrarse para volver a situar al equipo a la vanguardia del f¨²tbol. As¨ª lo cree el nuevo seleccionador, que, para empezar, dijo que ya tiene dos certezas. Primero, ha decidido qui¨¦n ser¨¢ su portero, aunque no lo revel¨®. Segundo, ha decidido que Sergio Ramos sea su capit¨¢n ¡°durante mucho tiempo¡±.
Hubo qu¨ªmica. Ramos y Luis Enrique conectaron. Al menos, en esta primera semana de convivencia. Contra las especulaciones desatadas a ra¨ªz de las explicaciones que dio el presidente federativo, Luis Rubiales, que indic¨® que fichaba a Luis Enrique para devolver el liderazgo a la caseta, insinuando la autonom¨ªa perniciosa de una plantilla liderada por Ramos. Contra las informaciones del interior del vestuario que apuntaban que durante el Mundial de Rusia el poder del t¨¦cnico se difumin¨® en un r¨¦gimen casi asambleario. Luis Enrique no solo no dej¨® de convocar al capit¨¢n , sino que por poco le condecor¨®.
¡°Es capit¨¢n quien tiene mayor n¨²mero de internacionalidades y en esto Sergio es indiscutible¡±, dijo el seleccionador, en referencia a los 156 partidos disputados con La Roja por el sevillano. ¡°No cabe duda de que es quien mayor presencia y personalidad tiene. Lo aprecias cuando lo ves competir: es un jugador escogido. Un gran l¨ªder dentro del terreno de juego, en el gimnasio y fuera; una persona que arrastra a los dem¨¢s y que espero que est¨¦ con nosotros mucho tiempo. Estoy encantado con ¨¦l. Esperaba un jugador de un nivel muy alto. Pero Sergio ha superado mis expectativas¡±.
Ramos cautiva a los entrenadores. A sus 32 a?os la lista es larga. Comenz¨® con Caparr¨®s cuando era adolescente, sigui¨® con Luxemburgo, con Capello, con Luis, Schuster, Pellegrini, Mourinho, Del Bosque, Ancelotti, Ben¨ªtez, Zidane y Lopetegui. ¡°Me he propuesto un reto¡±, dijo; ¡°ser titular con todos mis entrenadores¡±.
Ramos adudi¨® a la sala de conferencias de Wemblley despu¨¦s del seleccionador. Se mostr¨® sereno y contento de volver a ocupar el escenario que corresponde a los capitanes en los grandes acontecimientos.
¡°El balance es positivo¡±, resumi¨®, cuando le preguntaron que c¨®mo hab¨ªa pasado por el trance de ponerse al mando del asturiano. ¡°Somos personas con mucho car¨¢cter y la experiencia me dice que me llevo mejor con las personas que tienen m¨¢s car¨¢cter¡±.
¡°No he tenido esa sensaci¨®n¡±, concluy¨®, cuando le preguntaron si no lleg¨® a pensar que la federaci¨®n fich¨® a Luis Enrique para que le quitara de la selecci¨®n, o para que le restara poder imponiendo normas de convivencia insoportables para su gusto. ¡°No s¨¦ si nos han intentado enfrentar a trav¨¦s de los medios. Al final nos une la selecci¨®n; y tenemos los dos el mismo objetivo. Yo me siento muy joven y con mucha ilusi¨®n. A d¨ªa de hoy solo tengo halagos para este entrenador¡±.
¡°Al ataque¡±
La urgencia de construir un equipo en cinco d¨ªas y lanzarlo a competir en un gran partido oficial, sin una estaci¨®n intermedia, resulta novedosa. Inglaterra, cuarto clasificado del ¨²ltimo Mundial, se levanta como un obst¨¢culo temible y obiga a Luis Enrique a poner todas las cartas sobre la mesa. ¡°Me va el Drag¨®n Khan¡±, dijo el t¨¦cnico, evocando la monta?a rusa de Port Aventura para ponderar el reto que le plantea la Liga de Naciones. ¡°Me gusta. ?Perfecto! Estoy encantado estar aqu¨ª. Ser¨¢ dif¨ªcil. Pero debemos distrutar. Ser¨¢ un partido magn¨ªfico¡±.
¡°Vamos a jugar al ataque desde el principio¡±, avanz¨®; ¡°a tener bal¨®n, a generar m¨¢s ocasiones que el rival, a presionar lo m¨¢s alto posible, a dominar las fases del juego, y a ver d¨®nde encontramos los espacios¡±.
Luis Enrique, que insisti¨® en que su mayor preocupaci¨®n consiste en conseguir que Espa?a vuelva a ser un equipo impredecible para los rivales, tiene el estilo y el dibujo t¨¢cnico en la cabeza. Tambi¨¦n tiene el portero y el capit¨¢n decididos. Le queda por descubrir en p¨²blico lo m¨¢s trascendente de todo: los ejecutantes.
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