Griezmann libera al Atl¨¦tico

A lomos de la finura y la astucia de Griezmann para definir y de la seda de Lemar, el Atl¨¦tico se deshizo de un inc¨®modo Brujas. De alguna manera, el Atl¨¦tico le dio un portazo al recuerdo del Qarabag para sumar tres puntos que le perfilan ya como m¨¢s que posible participante de los octavos de final. Tuvieron que trabajarse la victoria los rojiblancos como hab¨ªa anticipado su entrenador, pero hay veces que da por pensar que sus decisiones tambi¨¦n tienen que ver con esas esforzadas victorias.

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El Simeone m¨¢s osado en el Bernab¨¦u

A Simeone le dio por igualar el sistema de Leko de tres centrales y dos carrileros. Le concedi¨® la alternativa en la derecha al colombiano Arias y conden¨® a Sa¨²l al pasillo izquierdo. En el medio del eje defensivo Gim¨¦nez, God¨ªn y Lucas. A ratos, el Atl¨¦tico se sinti¨® un cuerpo extra?o en ese traje que el Cholo desempolva de vez en cuando de su libreto. Un dibujo a priori para tener superioridad en la elaboraci¨®n inicial y en el coraz¨®n del juego. Resulta raro que siendo God¨ªn el que peor salida de bal¨®n tiene ocupara el centro, salvo que Simeone buscara protegerle con la mayor velocidad de sus dos escoltas, en ese molde al que no terminaba de ajustarse. La distancia entrel¨ªneas permiti¨® al Brujas brindarle a sus 3.000 entusiastas seguidores el orgullo de jugar en campo contrario y amenazar con la brega de Wesley y de sus tambi¨¦n carrileros Vlietinck y Groeneveld.

En ataque el Atl¨¦tico fue un equipo de picos durante el primer acto. Casi siempre alcanzando sus mejores acciones cuando la pelota le ca¨ªa a Lemar. Cuando no fue as¨ª, se vivieron escenas que describieron el desconcierto rojiblanco en el juego. Las quejas continuas de Diego Costa a Sa¨²l, Koke y Griezmann reclamando balones fueron muy sintom¨¢ticas. El ¨²nico que ve¨ªa el f¨²tbol claro era Lemar. Suyo fue un pase teledirigido que rompi¨® dos l¨ªneas para dejar solo a Griezmann ante Letica, al que super¨® con una picadita de escuela. El medio cuerpo con el que parti¨® de ventaja en el desmarque invalid¨® la obra construida.

Tambi¨¦n fue Lemar el que puso el bal¨®n que le cay¨® de nuevo a Griezmann, esquinado en el segundo palo. Esta vez su remate cruzado raso esquinado s¨ª fue v¨¢lido. Lo hizo bueno Letica, que hizo todo lo que no debe hacer un portero en situaciones as¨ª. Encogi¨® la estirada y se tir¨® tarde y mal. Los manuales b¨¢sicos de la posici¨®n dicen que esos remates hay que atajarlos lanz¨¢ndose en diagonal para tapar m¨¢s hueco. El gol mejor¨® poco al Atl¨¦tico, que al borde del descanso se encaj¨® uno de los tantos de la jornada. Un misilazo cruzado con la derecha de Groeneveld desde m¨¢s atr¨¢s del v¨¦rtice del ¨¢rea y cercano a la banda izquierda que sobrepas¨® a Oblak para colarse cerca de la escuadra.

Entrada de Filipe Luis y 4-4-2

Las molestias de Gim¨¦nez obligaron a Simeone a naturalizar el dibujo. Meti¨® a Filipe y dispuso un 4-4-2 en el que el equipo se sinti¨® m¨¢s c¨®modo y reconocible. No le sobr¨® f¨²tbol, pero mejor¨®. Se vio m¨¢s a Arias, de poste en el primer tiempo. Fue preocupante algunas de las secuencias que dej¨® Koke, lento y nervioso en la ejecuci¨®n de una pelota clara en el ¨¢rea. En la primera parte le sucedi¨® lo mismo en una conducci¨®n de un contragolpe meridiano. Quiz¨¢ el intento de Simeone de revitalizarle con minutos le est¨¦ sobreexponiendo. Al menos, el t¨¦cnico rojiblanco no decidi¨® quitar a Lemar cuando meti¨® a Correa para tratar de agitar el partido. El sustituido fue Thomas. De Lemar tambi¨¦n parti¨® la jugada con la que Diego Costa le dio el segundo gol a Griezmann tras una carrera y un pase atr¨¢s. Del esfuerzo, Costa se rompi¨®.

Con 2-1, Simeone meti¨® a Rodrigo para reemplazar al hispanobrasile?o. De nuevo, el chico volvi¨® a mostrar que el Atl¨¦tico es otro con ¨¦l en la cancha. Como en la primera parte del Bernab¨¦u, emergi¨® un equipo m¨¢s calmado y limpio con la pelota. La hinchada le aclama cada recuperaci¨®n y cada pase, aunque sea para atr¨¢s. En su caso esas descargas que no son del agrado de su entrenador son casi siempre para que el equipo pueda avanzar en el siguiente pase hacia adelante. Como s¨ª le gusta a su t¨¦cnico.

Con Rodrigo de timonel, al Atl¨¦tico le dio para generar dos jugadas claras de gol para Correa y hasta para hacer rondos con el objetivo de dormir el partido y conservar el 2-1. Tambi¨¦n se puede defender con la pelota e incluso cerrar el partido como hizo Koke, al que an¨ªmicamente le vendr¨¢ bien ese gol.