La voracidad de Santi Mina le da al Valencia la primera victoria en Mestalla

Hambriento y sin gol hasta ese momento, el Valencia se aliment¨® de la voracidad de Santi Mina para abatir al Young Boys en la cita clave de la Liga de Campeones por 3-1. Dos tantos del cazagoles gallego, que ha estado un mes de baja por una lesi¨®n, una noche excelente de Carlos Soler y una convincente actuaci¨®n coral mantienen activo y estable al grupo de Marcelino en la competici¨®n tras salvar su primera final. La primera victoria del Valencia en Mestalla llega en noviembre ante un belicoso equipo suizo que golpe¨® al l¨ªmite de lo permisible.

Por primera vez esta temporada, Marcelino repiti¨® formaci¨®n titular. La necesidad apretaba y el t¨¦cnico cambi¨® de h¨¢bitos empleando a los mismos que jugaron ante el Girona. Pese a la derrota ante los rojiblancos, Marcelino insisti¨® en que su n¨²cleo rindi¨® bien y le dio continuidad. La realidad indica que delante de la primera final de la temporada el entrenador asturiano tir¨® de sus pretorianos. Excepto Dani Parejo, que contin¨²a lesionado, de salida ante los suizos de Gerardo Seoane formaron los m¨¢s habituales, tres de ellos: Garay, Gay¨¤ y Guedes con molestias. Destac¨® la suplencia de Batshuayi y Gameiro, llamados a darle un salto de calidad a la plantilla precisamente en la Liga de Campeones. Marcelino, decepcionado y agobiado por los resultados, comienza a disciplinar a los dos puntas que ha tra¨ªdo en verano. El franc¨¦s y el belga llevan dos partidos seguidos en el banquillo y se perdieron el partido gordo de la semana. El mensaje del t¨¦cnico es claro: jugar¨¢n en Getafe si no lo impide el arrebatador momento emocional de Santi Mina, al que Marcelino retir¨® en el minuto 68.

El gallego se convirti¨® anoche en el m¨¢ximo goleador de la plantilla con cuatro goles ya en el zurr¨®n. En el minuto 14 abri¨® el marcador y puso a su equipo en los ra¨ªles con destino a su primera victoria en Mestalla. La jugada, brillante, gestada entre Soler y Rodrigo en banda derecha, acab¨® en una picada del canterano sobre la salida de Von Ballmoos que dio en el palo; atento al rebote estaba Santi Mina que empuj¨® el bal¨®n a gol y explot¨® en una mezcla de rabia y alegr¨ªa. Celebr¨® a lo LeBron James marcando todos los movimientos con furia y acab¨® dando una patada a la valla de publicidad, gritando fundido con la Curva Nord.

Gerardo Seoane, el t¨¦cnico del Young Boys, suizo con sangre gallega, orden¨® contragolpe y agresividad para detener las estampidas del Valencia. Muy intenso, el valiente equipo amarillo y negro, infl¨® a faltas a los velocistas de Marcelino en cada arranque de jugada. A bal¨®n parado, el Young Boys explotaba la altura de Hoarau y alarmaba a Neto. Los centrales del Valencia, advertidos, vigilaron al gigante y descuidaron al peque?ito Assal¨¦ que empat¨® en el minuto 37 en una recuperaci¨®n de bal¨®n despu¨¦s de una falta sobre Coquelin que valid¨® el ¨¢rbitro rumano Kovacs, muy permisivo con los golpes que arrearon los campeones de la Liga Suiza.

Con el explosivo Guedes en la izquierda, de nuevo renqueante por un golpe ante el Girona, el Valencia rompi¨® el partido por la derecha con la sociedad Soler, Wass y Rodrigo. En un momento peligroso en el que estaba molido a palos y tambale¨¢ndose, un centro lateral exquisito de Soler lo remat¨® de nuevo Santi Mina cazando la pelota en el aire y empuj¨¢ndola a puerta con la planta de su bota derecha. El combativo Mina, intenso y jugando bien con su cuerpo, rescat¨® el gol que hab¨ªa perdido el Valencia, prisionero de su crisis de identidad.

Percutiendo por el costado derecho y con Guedes ausente y muy vigilado por Mbabu en la izquierda, el Valencia mat¨® el partido en el arranque del segundo acto. En otra acci¨®n luminosa ejecutada por Rodrigo y Soler, el canterano marc¨® el tercer gol. El indiscutible talento de Soler, de nuevo en la derecha pese a la baja de Parejo, se impone al debate sobre su posici¨®n en el campo. Juega bien en cualquier demarcaci¨®n.